EN POCAS PALABRAS, P. Joaquín Alliende Luco. El 26 de junio del año del Centenario de la Alianza de Amor, vísperas de la Fiesta del Sagrado Corazón de este jubilar 2014, nuestras redes de Internet traían una noticia ardiente: la proclamación de la nueva Ley 15462 para el Estado de San Pablo, Brasil, que cuenta con 43,6 millones de habitantes, lo cual hace el 21% de la población de aquel inmenso país. Desde ahora en adelante, el día 18 de octubre de cada año, a partir de este 2014, será fecha conmemorativa oficial, con el nombre “Día de la Alianza de Amor”.
Se trata de un rarísimo hecho que ocurre no al interior de la Iglesia. Es algo que sucede en el espacio “mundanal”, político. Manifiesta cómo el cielo nos bendice en respuesta a nuestra plegaria de ser, desde la Iglesia, “alma del mundo”.
En 1933, cuando Hitler arrasaba políticamente, el P. Kentenich invoca un principio organizacional: “Masa contra masa”. Schoenstatt ofreció a la Iglesia, a Europa y al mundo una “movilización general masiva”: su Movimiento Popular de Peregrinos (MPP). Con fecha 21 de diciembre, el P. Kentenich escribe una carta a la Federación de Hombres. Con su autoridad de Fundador produce una “re-orientación” (PK) de todo Schoenstatt. Con este paso fundacional él completa esencialmente la estructura de la Obra. En concreto, el contrapunto histórico de ese 21 de diciembre de 1933 hay que situarlo en el 20 de agosto de 1919, día de la fundación de la Federación en Hörde, y en octubre de 1926, cuando las Hermanas de María nacen como nuestro primer Instituto Secular. Detrás de este paso estratégico y constituyente, hay una opción eclesiológica y profética, en comparación con todos los otros “nuevos Movimientos y Comunidades”. Éste es un fenómeno singular en la Iglesia Católica del S. XX, que fluye hacia el Concilio Vaticano II y desde ese Concilio, hacia el horizonte.
La Ley 15462 del Estado de San Pablo, ciertamente no habría ocurrido bajo el sólo impulso del “Schoenstatt organizado” (según la terminología del P. Alex Menningen). Ocurrió por la inmensa fuerza del “Schoenstatt no organizado” de Brasil. El año 1977 el P. Alex Menningen resumió su pensamiento de esta forma: “El pueblo salvará a Schoenstatt del elitismo y de la mentalidad monopólica, que siempre amenaza a la Iglesia y a cada una de sus movimientos”. – “Sin el Movimiento Popular de Peregrinos, Schoenstatt está en grave peligro de caer, por el pecado original y personal, en deformaciones”.
P. Joaquín Alliende L.
2014-06-26 00:53:10
