SANTUARIO ORIGINAL, Roberto M. González •
Schoenstatt y la Iglesia, se alegran cuando un joven laico decide consagrar su vida en medio del mundo, pues hoy no es sencillo comprender esta decisión y sobre todo el arriesgarse a vivir como Hermano de María de Schoenstatt. Es así como, la familia de los Hermanos de María en una sencilla pero emotiva ceremonia a ha admitido a un nuevo novicio a su comunidad. —
El pasado 20 de enero de 2024, Ignacio Suazo, sociólogo chileno, ha sido admitido al Noviciado del Instituto Secular Hermanos de María de Schoenstatt, de aquí y durante dos años participará de la vida y formación interna de la comunidad.
En una ceremonia íntima en la Capilla de la Casa Mario Hiriart, en Schoenstatt, Casa Central del Instituto, se llevó a cabo la ceremonia de admisión, la cual fue transmitida por Schoenstatt TV y la cual participaron sus padres que viajaron desde Chile para este día, así como otros familiares y amigos quienes se conectaron por Zoom momentos antes y luego de la misa para saludarlo.
Una comunidad fundada en el campo de concentración de Dachau
El Instituto Secular Hermanos de María de Schoenstatt, tiene una profunda vinculación con el 20 de enero, pues sin esta decisión del P. Kentenich de ir a Dachau en 1942, tanto la fundación del Instituto de Familias como de los Hermanos de María y la obra Internacional tal vez no hubiese ocurrido.
En consecuencia, desde este 20 de enero, Ignacio Suazo, ha tomado el nombre de María e incorporado al suyo, comprometiéndose a vivir los 3 consejos evangélicos y según las normas del Instituto.
Al tratarse de un Instituto Secular existen tanto derechos como obligaciones de cada miembro, pero en primer lugar se trata de vivir la santidad en la vida diaria, el vivir la profesión en el medio del mundo, naturalmente sin descuidar los momentos de oración y formación, pues no se trata de pasar todo el día trabajando, sino de vivir un balance que le permita “Unir la tierra con el cielo”, como bien lo expresó el Venerable Mario Hiriart, quien fue Hermano de María de Schoenstatt.
Una pequeña comunidad que deja huellas en todo Schoenstatt
Las vocaciones laicas consagradas dentro de Schoenstatt no resultan desconocidas, pues toda la estructura se sustenta en ellas, siendo más conocidas las femeninas a través de las Hermanas de María, las Señoras de Schoenstatt y la Federación de Mujeres. Los Hermanos de María son un secreto de Schoenstatt, una comunidad que ha entregado y aportado mucho a Schoenstatt, de la cual hoy Ignacio M. Suazo forma parte.
Es así como Ignacio pasa comenzar el camino como Hermanos de María, donde tiene a grandes modelos de quienes inspirarse, no únicamente del Venerable Mario Hiriart (1931-1964), sino de otros cohermanos, como Hermann M. Arendes (1925-2014), quién fuera acompañante espiritual de Joao Pozzobon y quien lo impulsó en su proyecto con la Virgen Peregrina, en Paul M. Rothgerber (1927) quien estuvo presente en la ceremonia de este sábado, que durante mucho tiempo estuvo al frente de la Orfebrería de los Hermanos de María en Vallendar, diseñando muchas coronas, sagrarios y otros miles de símbolos para los diferente santuarios del mundo; y enseñando a otras tantas personas este noble oficio y cuyas enseñanzas hoy continúan en la Orfebrería de las Hermanas de María en Santa María Brasil; también en Paul M. Hannapel (1932-2013), gracias a quien tenemos los diarios personales de José Engling e impulsó todo el trabajo alrededor del Santuario de Cambrai; y por nombrar uno último de una lista que podríamos continuar más en Manfred M. Worlitschek (1958-2019), quien durante mucho tiempo tomó la posta de otro cohermano Ernest M. Brandstetter (1938) en la fábrica y carpintería en Santa María donde se elaboraron más de 50 Altares para Santuario de Schoenstatt en el mundo. La familia de los Hermanos de María será pequeña, pero ha dejado y continúa imprimiendo su huella en la historia de Schoenstatt.
Acompañamos con nuestras oraciones a Ignacio M. Suazo, que sea un tiempo de mucho crecimiento y profundización en el carisma de los Hermanos de María de Schoenstatt, y así mismo por la comunidad que lo ha acogido en su familia. Sin olvidar por supuesto de rezar por más vocaciones a la Vida Consagrada dentro de Schoenstatt y la iglesia.
Grande Ignacio. Dios te bendiga.
No te acompañé en la ceremonia de tu incorporación como novicio, (no sabía)) pero te acompañaré rezando diariamente el Rosario por ti y por toda la familia de Hermanos de María de Schoenstatt