Ordenación sacerdotal en día de Alianza

BURUNDI, María Fischer con material de https://www.peres-schoenstatt.org•

18 de julio de 2020, día de Alianza, adelante del santuario de los padres de Schoenstatt en Suiza. Una vista impresionante al lago Vierwaldstätter. Sin embargo, conversamos sobre África, ya que estamos con dos suizos veteranos de África, los PP. Zing y Barmettler, y compartimos su alegría por la ordenación sacerdotal de tres padres de Schoenstatt en este día, en Burundi. Y ellos cuentan…—

Intercambio con el P. Zingg, Horw, 18.07.20. Foto: Grauert

La familia de Schoenstatt y los peregrinos, que pertenecen al Santuario del Monte Sion Gikungu en Bujumbura, han esperado con ansias este 18 de julio de 2020, día de Alianza. Tres jóvenes de la comunidad de los padres de Schoenstatt, Jean Bosco Habonimana, Floribert Kaneza y Alain Amani Mwilarhe, que habían sido ordenados diáconos el 19 de octubre pasado (día de las Bodas de Plata del Santuario de la Paz y la Reconciliación), en este día 18 de julio recibieron la ordenación sacerdotal en la ciudad de Rugazi, en el noroeste del país. Unos cientos de peregrinos se trasladaron desde el Santuario hacia allí, para participar y acompañarlos.

La celebración de la Eucaristía comenzó alrededor de las 9.45 h con una procesión, que fue acompañada con canciones vocacionales. Los candidatos para las diversas ordenaciones, seguidos por los sacerdotes, el arzobispo emérito Mons. Evariste Ngoyagoye y el arzobispo de Bujumbura, Mons. Gervais Banshimiyubusa, se dirigieron alegremente hacia el lugar de ordenación. Ya al principio de la misa, el párroco Laurent Nkurabanka saludó a todos los presentes, tanto a los que llegaron de distintas partes del país como a los familiares y a amigos del P. Alain, de la República Democrática del Congo.

Dios elige a sus colaboradores también hoy, como Jesús lo hizo con sus apóstoles, entre pescadores, recaudadores de impuestos y otros, independientemente de su procedencia o formación, dijo el arzobispo en su homilía. Seis diáconos y catorce sacerdotes fueron ordenados ese día; entre ellos, los tres jóvenes de la comunidad de los padres de Schoenstatt. En nombre de todos los recién ordenados, uno de los neopresbíteros agradeció a todos los que los acompañaron en ese camino: padres, hermanos, maestros y educadores desde la escuela inicial hasta el Seminario, a los sacerdotes con los que han convivido, a los vecinos y a todos los cristianos que ayudaron, tanto material como espiritualmente, con el desarrollo de las celebraciones del día. Pidió también a todos que, en lo sucesivo, recen más por ellos, para que puedan ejercer su apostolado con alegría y coraje en Cristo.

Primera misa en el Monte Sion de Gikungu

Sólo veinte horas después de su ordenación sacerdotal en Rugazi, los padres Jean Bosco Habonimana, Alain Amani Mwilarhe y Floribert Kaneza están frente a los peregrinos del santuario, en el que tendrá lugar la celebración de la Eucaristía del 16° domingo durante el año, animada por dos coros. En la homilía, el P. Jean Bosco dejó en claro que el sacerdote necesita la oración de los fieles y la fuerza de Dios para poder desarrollar bien su apostolado.

Basándose en el evangelio del día, que narra la parábola del trigo y la cizaña, el P. Jean Bosco recalcó la paciencia que tiene el sembrador con su siembra, mientras espera la cosecha. Es esta bondad y esta paciencia que los hombres deben mostrar recíprocamente, empezando por los que gobiernan con sus gobernados, los padres con sus hijos, los educadores con sus educandos y así sucesivamente.

Durante la preparación de las ofrendas, se llevaron al altar tres fotos de los nuevos sacerdotes y sus primeras homilías. Al final de la misa, todos se dirigieron en procesión al santuario, una buena oportunidad para que los nóveles padres pudieran poner todo su apostolado en las buenas manos de la Madre de Dios.

Original: Alemán, 24.07.2020. Traducción: Juan Eduardo Villaraza, Paraná, Argentina