«Gracias por contar las cosas que no van bien»

María Fischer •

Javier Martínez-Brocal (Granada, España, 1978), periodista y escritor, reside en Roma desde el año 2003. Es director de la agencia de noticias Rome Reports, autor de El Papa de la Misericordia, colabora con el Wall Street Journal y el diario ABC de Madrid, dirige el programa semanal El mundo visto desde el Vaticano, que se emite en televisiones de treinta países. El 11 enero de 2022 – por intuición, suerte o profesionalidad o todo junto – estaba justo en el lugar perfecto para sacar una foto que iba a recorrer el mundo, y pocos días después recibió una carta escrita a mano por el “objeto” de su foto: el Papa Francisco. —

“Si la teología narrativa es una forma privilegiada de predicación y de catequesis, el autor consigue una magnífica expresión de esta forma de teología. Se nos narra el modo de hacer del Papa y con ello descubrimos las líneas maestras del pensamiento del Pontífice”, se lee en una de las reseñas del libro “El Papa de la Misericordia”. Este mismo autor hace unos días nos narró la visita privada del Papa Francisco saliendo de una tienda de discos en pleno centro de Roma.

«Gracias por cumplir con su vocación, aunque sea poniendo en dificultad al Papa»

Al ver que la foto estaba en medios de todo el mundo, el periodista escribió unas líneas al Papa. La carta de respuesta del Papa le llegó inmediatamente, escrito a mano, con una buena dosis de humor y un mensaje precioso a cada periodista.

«Señor Javier Martínez-Brocal, no me negará que fue una ‘bruta sorte’ (mala suerte) -como dice la Señora del Serrallo- que, después de tomar todas las precauciones, justo había en el lugar un periodista esperando a una persona en la parada de taxis. No hay que perder el sentido del humor… Lo que más extraño en esta Diócesis (de Roma) es no poder callejear, como lo hacía en Buenos Aires, yendo caminando de una parroquia a otra. Gracias por cumplir con su vocación, aunque sea poniendo en dificultad al Papa».

«Gracias por contar las cosas que no van bien en la iglesia»

No es la primera vez que el Papa expresa su aprecio por la labor de los medios de comunicación. En el pasado, Francisco confió al corresponsal de ABC en el Vaticano, Juan Vicente Boo, que el buen periodista está siempre atento, de modo que no pierde detalle, y luego lo cuenta todo. Para Boo, el Papa Francisco es «el mejor comunicador del planeta: “Comunica como el Evangelio, con gestos, pequeñas parábolas y con tuits. El Evangelio es absolutamente tuiteable», dice. Además, «escucha muchísimo a personas corrientes y por eso habla su lenguaje». Pero, sobre todo, «predica con el ejemplo».

También, en noviembre de 2021, durante la entrega de condecoraciones a los dos vaticanistas más veteranos, Valentina Alazraki y Philip Pullella, dio las gracias a los vaticanistas también por «lo que contáis sobre las cosas que no van bien en la Iglesia».

Confirmando la misión que asumimos

Compartimos la carta del Papa entre los colaboradores de schoenstatt.org. ¿Hay algo de nosotros en eso? Cierto, pasión, profesionalidad, lo que el Papa apreció en cada entorno laboral. Pero nuestro Juan Zaforas lo nombra sin pensarlo:

• Gracias por cumplir con su vocación, aunque sea poniendo en dificultad al Papa.

• Gracias por contar las cosas que no van bien.

Lejos de pensar que nuestra misión como medio libre e independiente de comunicación en Schoenstatt, sea poner en dificultad a la dirigencia de Schoenstatt o de contar (solo) las cosas que no andan bien, la respuesta de Juan va al centro. Pues es esta la diferencia entre periodismo y comunicación oficial que en verdad es nada más y nada menos que marketing. Una labor noble y necesaria también, pero marketing.

En este sentido, la revista MTA del padre Kentenich y los primeros, fue periodismo. Pues el base del intercambio libre fue un consenso básico no discutido; una base, sin embargo, sobre la cual se pudo decir, hacer, pensar y expresar todo.

Para periodistas como Martínez-Brocal este consenso básico es el amor a Cristo y a su Iglesia, más allá y a pesar de lo que no anda bien. Para nosotros, es lo mismo, junto al amor a Schoenstatt, más allá y a pesar de lo que no anda bien.

Colaboración: P. José María García, Juan Zaforas