URUGUAY, vía www.providencia.org.uy •
El Centro Juvenil realizó una apuesta grande en 2021 para crecer en la cantidad de estudiantes que participan del espacio, así como en la propuesta en general para que sea cada vez de mayor calidad. “El Centro Juvenil viene creciendo mucho año a año”, resaltó Florencia Cruces, coordinadora del programa. Este programa educativo busca acompañar a los alumnos a descubrirse ellos mismos, ir descubriéndose con otros y así ir creciendo, desarrollándose e ir soñando en quien quieren ser. —
El año 2021 el Centro Juvenil planificó sus objetivos y acciones en base al Mapa Educativo de Trayectorias de Aprendizaje (META) de Providencia. Esto permitió poder trabajar teniendo en cuenta las competencias que se buscó trabajar con los adolescentes.
En este sentido se realizaron talleres con un enfoque recreativo y otros más reflexivos, en los que se contemplaron los intereses de los chiquilines y su vida actual. Fue así como se generaron los siguientes talleres: Compartir la vida, Recreación y Deporte, Cocina, Sexualidad, Huerta y Teatro. También se incluyeron espacios lúdicos y diariamente funcionó el espacio de estudio acompañado por profesores y educadores.
Un espacio de encuentro
“Ellos encuentran en el centro juvenil un espacio para encontrarse y poder disfrutar”, destacó Florencia. Y agregó, “Se generó un grupo muy lindo y unido”.
La no presencialidad trajo algunos desafíos en cuanto a la motivación de los alumnos y el rendimiento académico, lo que implicó “trabajar a la par con las familias en el acompañamiento a los chiquilines”, subrayó Florencia. “El trabajo en conjunto es lo que permite que los jóvenes se sientan acompañados y que en los momentos en los que hay una desmotivación, que pasa porque realmente es difícil el bachillerato, tener ese soporte, ese sostén desde casa y desde Providencia es lo que ayuda a que el muchacho levante”, sostuvo.
Un año de grandes desafíos para el Centro Juvenil y los jóvenes, pero también de crecimiento a todo nivel. Seguimos construyendo oportunidades educativas y acompañando a los chiquilines para que puedan ir descubriendo sus potencialidades y talentos.
El centro juvenil
En el año 2005 comienza a funcionar el Centro Juvenil, el cual surge como espacio educativo creado para darle continuidad al Club de Niños una vez que los alumnos egresaban del mismo.
En una edad muy sensible a los cambios y que presenta desafíos propios, los adolescentes ingresan al Centro Juvenil, el cual les brinda un espacio de referencia y participación buscando acompañar el crecimiento y potenciar las capacidades de los jóvenes, trabajando para asegurar la continuidad educativa de los jóvenes en relación con un proyecto de vida personal. Esto implica una propuesta de convivencia y disfrute, de apoyo en el tránsito educativo y de cuidado. En la que se generan espacios comunes para interactuar, para ser solidario, todo esto en un clima educativo que los impulse a ser autónomos y a tener una sana autoestima.
Actualmente participan del mismo 60 adolescentes que cursan la educación secundaria en liceos y UTU de la zona. Allí asisten a un espacio de apoyo pedagógico y diversos talleres que tienen como objetivo el desarrollo de sus potencialidades partiendo de sus intereses y motivaciones.
Fuente: www.providencia.org.uy
