Carlos Cox schoenstatt.org

Publicado el 2020-06-23 In Alianza solidaria, Proyectos

“Pequeños impulsos para tiempos de Coronavirus”

CHILE, Entrevista al P. Carlos Cox Diaz, por Claudia Echenique y María Fischer •

“María, no sé si a usted le llegan las cápsulas de P. Carlos. No lo he hablado con él, pero pensé que quizás, se podrían incluir de alguna forma en Schoenstatt.org para darle más publicidad (a lo mejor a ti se te ocurre cómo), pues son bien geniales”, me comentó nuestro columnista Ignacio Serrano del Pozo, el fin de semana pasado. Tuve que admitir que sabía de esta oferta digital del P. Carlos Cox en forma de breves videos, pero que – saturada de tantas cosas piadosas (para no decir kitsch) mil veces reenviadas en las redes – no me había tomado el tiempo para mirar ni uno. Al recibir unos tres por parte de Ignacio Serrano y mirarlos, decidí avanzar con la propuesta y contactarle al P. Carlos Cox. Pues realmente son impulsos de fe para estos tiempos de angustia y nervios.—

“Vea uno, no dura más de 2 minutos e incluye bendición. Yo me despierto y lo veo”, me recomendó Ignacio. Día por día, el P. Carlos Cox publica un video-impulso en su canal de YouTube y también lo envía a varios grupos de WhatsApp. Cada video de 90 segundos necesita casi una hora de producción para rezar, pensar, escribir, montar el “set”, grabar, desmontar, además del tiempo de editar el video, que hace Beatriz Letelier, una colaboradora del P. Carlos.

Historias de la vida en 90 segundos

Fernando Besser, de Chile, ya recibe los video-impulsos del P. Carlos Cox y comenta:

“Valoro especialmente:

  • Que es una voz de esperanza y de fe que tanto necesitamos todos, especialmente ahora que todo es confuso, ahora que tenemos miedo de enfermar y morir, ahora que ha cambiado la Era y todo renace colaborativa, ecológica y tecnológicamente; es un grito de esperanza que ilumina desde la vida.
  • Tienen el ritmo del tiempo, nunca más de 90 segundos; nadie alcanza a dejarlo pasar y todos lo quieren escuchar porque es brevísimo.
  • Sigue el moderno modelo de breves historias de la vida y animan a mirarla con entusiasmo; una sola idea cada vez.
  • Culminan con la bendición sacerdotal que tanto necesitamos”.

“Ya los suben a la página de Facebook de la Pastoral Familiar de Ciudad de México. David Miranda lo hace en Bolivia. Yo intento ocupar un lenguaje lo menos chileno posible”, es la primera respuesta del P. Carlos Cox al preguntarle sobre sus videos. “Además trato de hablar desde la vida, captar un ‘proceso de vida’, y no necesariamente tocar temas de la ‘actualidad’, porque a veces están manipulados, en la línea de los trendtopics, que aparecen y desaparecen

Ya estamos en plena entrevista…

P. Carlos Cox Diaz

P. Carlos Cox Diaz

 

Padre Carlos, ¿cómo surgió la idea?

Los videos del P. Carlos Cox Diaz, ahora también en schoenstatt.org

Los videos del P. Carlos Cox Diaz, ahora también en schoenstatt.org

Cuando comenzó, la cuarentena percibí el ambiente negativo y difícil que se iba generando. Las noticias eran alarmantes; muchos no sabían cómo vivir en confinamiento; otros pensaban que había que soportar “hasta que todo vuelva a ser como antes…”. De allí surgió la idea de crear estos «pequeños impulsos para tiempos de Coronavirus», así los titulé yo. A poco de compartirlos, muchos los bautizaron «pildoritas para la fe».

Como principio básico, asumí la escuela del P. Kentenich: “A mayor dificultad externa, mayor crecimiento interno”, mayor animación, para tener vida que contrarreste los problemas que enfrentamos.

Cuando hice la primera grabación con mi IPhone 5, descubrí que solo se pueden grabar 90 segundos. Ese es el tiempo límite.

Traía como experiencia previa los 15 años que grabé unos programas, una vez por semana, para el Canal 13, de Santiago, llamados Misión 13, que duraban más o menos lo mismo. Se emitían al final de la programación, aproximadamente a las 1.30 am y llegaban a 180.000 personas más o menos. ¡Increíble!

Durante ese tiempo, fui afinando la forma de hacerlo, también en la escuela del padre Kentenich, como lo recibí del P. Tillman Beller.

Normalmente, parto de un hecho de vida real, y no necesariamente contingente. Busco tocar un proceso de vida, una emoción, una historia (observar/Beobachten); luego, iluminar desde la fe y la Palabra de Dios, o desde la vida de alguna persona notable (un santo, el padre Kentenich, Viktor Frankl…), para acercar a un encuentro personal con Dios, con el Señor y la Virgen (comparar/Vergleichen). Allí debe entregarse el núcleo a trasmitir en una frase corta, impactante, certera… (palabra, verdad, valor/Wort, Wahrheit, Wert). Ello busca tocar el centro de la persona, para así invitarlo, en libertad, a dar una respuesta en la vida de cada día (aplicar/Anwenden).

Hacer todo esto en 90” no es fácil. Para ello me voy a la capilla. Lo hago desde hace ya 15 años, cuando comencé en el canal. Rezo al Espíritu Santo y comienzo a meditar. ¿Qué temas vitales andan rondando? Cuando leo o veo algo interesante, anoto esa idea, esa frase, y así lentamente voy «amasando» el impulso. A veces me despierto en la noche con un impulso; me levanto, lo escribo en una hoja de papel y vuelvo a dormir. Todo esto me ayuda a experimentar que hay mucho del Espíritu Santo en esto.

Una vez, una persona muy cercana me preguntó: “¿Quién te hace los guiones?”. Le dije: «Mira, el guionista, el que prepara el ‘set de grabación’ (una habitación de la casa) y el locutor es la misma persona”.

¿Cómo selecciona los temas?

Últimamente he buscado generar ciclos, de más o menos una semana de duración. Por ejemplo, uno fue sobre cómo escribir lo que nuestro fundador llamó la «novela de vida»; otro fue sobre «Cómo tener costumbres en casa para tener un ritmo en este tiempo”, que fue una especie de «ora et labora»; otra vez, fue una novena para preparar Pentecostés, ahora, algunos «tips» para ser padres (en la proximidad del día «comercial” del Padre).

 

 ¿Cómo los difunde?

Aquí hay una ayuda súper importante que es la de Beatriz Letelier. Ella ha colaborado mucho tiempo conmigo, es secretaria y asistente. Ahora hace de «productora» y ayuda a distribuir. Yo le envío la grabación, ella lo edita. Si se le ocurre buscar e insertar una foto, lo conversamos, así como la frase-título del video. Estamos experimentando, por el momento, lo de la música. Beatriz tiene una lista de distribución vía WhatsApp, y yo, otras. La Pastoral Familiar de Ciudad de México pidió poder usarla. Ellos lo hacen vía Facebook. David Miranda lo piensa hacer en Bolivia; el P. Rafael me pidió permiso para subirlo a Schoenstatt vivo, y muchas personas me cuentan que lo envían a sus amigos y contactos. Desde hace una semana, se creó un canal de YouTube personal y Beatriz está subiendo primero los videos más actuales y, poco a poco, los anteriores (llevo más de 90 videos grabados).

Como ve, todo es muy «artesanal». Creo que tiene un frescor y olor a autenticidad, a ser «muy de casa». Creo que ello tiene su valor.

Muchas gracias por sus preguntas, que me ayudan a explicitar y a compartir una experiencia que he ido madurando y desarrollando desde el año 2004.

Yo lo pensé como un aporte para este tiempo. Mi horizonte era Pentecostés y regalarlo a la Mater para su coronación el 31 de Mayo en Bellavista, pero varias voces me animaron a continuar.

Los envío todas las mañanas desde la capilla de la casa con una bendición. Y me impacta e impresiona, que cuando por algún motivo me atraso, ya me empiezan a llegar mails preguntando qué me pasó, si estoy enfermo, etc…

Con gusto comparto estos impulsos con los lectores y seguidores de Schoenstatt.org.

 

Canal de Youtube del P. Carlos Cox Diaz

Encuentran los videos, mientras perdure el tiempo de pandemia, en schoenstatt.org, en el sidebar (lado derecho) abajo de los botones.

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2 Responses

  1. Irma dice:

    Saludos PADRE Cox y mi cordial afecto.
    Soy Irma de Maipú. Necesito conversar con usted. Cómo sacar hora o espacio para dicho encuentro. Agradecería su mensaje.

  2. María Isabel Herreros Herrera dice:

    Gracias P. Carlos, por sus videos, que terminan siempre con la bendición del buen Dios a través de sus manos sacerdotales (es increíble el bien que puede hacer la bendición paternal de un sacerdote para quienes la reciben con un corazón sencillo). Son el testimonio de un sacerdote que sabe bien el mensaje que queremos escuchar en este tiempo de pandemia, y lo comparte solidariamente , con la conciencia de haber sido elegido especialmente para transmitirlo. Que el buen Dios y la Mater le bendigan y bendigan su apostolado.

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