CHILE, Beatriz Letelier •
Arriba en la montaña, en lo alto de la cordillera, la paz une a dos países hermanos latinoamericanos. Chile y Argentina celebraron un nuevo aniversario de la inauguración del monumento al Cristo Redentor, en la frontera entre Chile y Argentina, a 3854 m sobre el nivel del mar, símbolo que nos recuerda que un 13 de marzo de 1904, hace 120 años, se selló la paz y amistad entre ambos países. —
Chilenos y argentinos, principalmente, suben desde hace 49 años, el tercer sábado de marzo, al Cristo Redentor, con el anhelo de renovar este acuerdo de paz e inspirados también por las palabras que el joven Mario Hiriart, chileno, miembro del Instituto Secular Hermanos de María, ingeniero civil, en proceso de beatificación, quien dijo: “Construiremos en Los Andes un santuario como símbolo de la paz y la unidad de nuestros pueblos y nuestros corazones”.
Reina de la Paz
Al llegar al Cristo nos encontramos con que había allí un acto conmemorativo en el que participaban delegaciones de ambos países. Fue un gran regalo para todos nosotros estar presentes en ese momento y poder participar en la ceremonia que se estaba llevando a cabo.
Al terminar la celebración nos dirigimos a la ermita que está allí y renovamos la coronación a nuestra querida Mater como “Reina de la Paz”, en medio del fuerte viento que soplaba en el lugar.
Luego celebramos misa en una capilla salesiana del lugar, en la que participaron cerca de 60 personas, con un corazón agradecido y emocionados de poder compartir con nuestros hermanos argentinos. La misa fue preparada con mucho cariño y merece especial mención el coro que encendió nuestros corazones. La fiesta continuó con un momento de compartir entre nosotros.
Estoy segura de que todos tenemos alguna anécdota que contar y estamos agradecidos por haber vivido esta preciosa experiencia.
Están todos invitados a la celebración del año que viene cuando se cumplirán los 50 años de esta peregrinación.
Testimonios
Roberto Seguel, chileno: “Peregrinar al Cristo Redentor de Los Andes, es volver a revivir los ideales por los que hemos trabajado tanto tiempo: paz y unidad de pueblos y corazones, comprobar que no estamos solos”.
Andrés Manresa, argentino: “El motivo que me lleva a peregrinar al Cristo Redentor es la certeza que la paz y la unidad entre los pueblos de Argentina y Chile se da por sentirnos hijos de Dios Padre. Y como hijos debemos compartir, rezar juntos, abrazarnos y alegrarnos en el encuentro. La Virgen nos convoca y protege, ella medianera de todas las gracias siempre nos cuida.
Es también seguir el anhelo de Mario Hiriart, laico como nosotros, que siguió a Cristo en medio del mundo.
Cada año que nos reunimos en el Cristo Redentor para renovar la coronación a la Mater, estamos representando ese santuario vivo en Los Andes, símbolo de la unidad de nuestros pueblos y nuestros corazones».
