"Madre del pueblo"

Publicado el 2021-09-11 In Vida en alianza

¿Cuándo despertará el niño?

CHILE, Patricio Young •

¿Cuándo despertará el niño? Una pregunta certera y llena de significado que un pequeño niño argentino hizo al padre Martín Donetch en un basural de Córdoba el año 2004, al colgarse de su hombro junto a otros dos niños y descubrir su medalla de la Madre del Pueblo. Otro niño le preguntó ¿Cuándo me vas a llevar a la iglesia? —

P. Sergio Mena, fundador del "Oratorio Mariano Madre del Pueblo"

P. Sergio Mena, fundador del «Oratorio Mariano Madre del Pueblo»

Dos preguntas que marcaron la vida del padre Martín y del Movimiento Oratorio Mariano, fundado por el padre Sergio Mena, ex padre de Schoenstatt, que se retiró de la comunidad en 1976 para formar este nuevo movimiento, conformado por matrimonios, señoras, jóvenes, sacerdotes y tres comunidades religiosas femeninas, hoy presente en la zona central y sur de Chile, Argentina, Brasil, Ecuador, Colombia, México, EE. UU. (dos estados), Alemania y España.

El padre Martin es el sucesor del padre Sergio en la conducción de este movimiento desde su muerte en febrero del presente año. Este tiene un claro sello popular, sin negar a otros sectores, pero quiere responder claramente a la opción que ha hecho nuestra Iglesia.

Encuentro de schoenstattianos con el Oratorio Mariano

Hace unos días, un grupo de schoenstattianos que reflexionamos sobre la dimensión social del Movimiento, quisimos conocer esta experiencia de la que algunos habíamos sabido tangencialmente. Nos parecía que era hora de encontrarnos, ya que mucho podía decirnos sobre su experiencia con los sectores populares y en la conciencia de que, como primos hermanos, tenemos mucho en común.

Uno de los motivos, y quizás el más importante, de la salida del padre Sergio de los padres y del movimiento, fue justamente sus diferencias con la forma que se desarrollaba Schoenstatt (en Chile), tan lejos de los sectores más pobres y carenciados de la sociedad. El padre venía trabajando con ellos desde 1969 en su paso por Carrascal. Su visión la compartió desde un principio con su comunidad e incluso personalmente con el padre Kentenich, quien lo reconoce distinto al resto de los padres y le escribió dos frases: “Yo te envío, vayan e incendien el mundo” y “Me envió a evangelizar a todo el pueblo”.

Hoy, por clara diosidencia, en el lugar donde el padre Sergio conversó con el padre Kentenich hay una gruta a la Madre del Pueblo; la imagen y advocación para la Virgen de este movimiento.

Sergio Mena con el P. Kentenich

Sergio Mena con el P. Kentenich

Lo común y lo diverso con Schoenstatt

En un maravilloso y fecundo diálogo, el padre Martín nos fue mostrando lo común y lo diverso con Schoenstatt. Nos señaló que el padre Sergio siempre reconoció su origen e incluso oraba diariamente hasta el final de sus días; “que siempre me mantenga unido al padre Kentenich”.

Los principales rasgos de este carisma son: un movimiento mariano, junto a los pobres sin exclusión, el oratorio a la Virgen del Pueblo como lugar de gracias, la odología (estudio de caminos), una metodología pastoral para caminar juntos hacia la santidad y, por último, la autenticidad.

Para el Oratorio Mariano una de las mayores fuerzas inspiradora es la “cultura del encuentro”[1]. Encuentro con Dios y encuentro entre los hombres, especialmente los más pobres. De su experiencia en la Rioja argentina incorporaron un concepto que era muy propio de su cultura y que venía desde 1640: el Tinkunaco,[2] que representa claramente esta dimensión de encuentro y así denominan a sus grandes reuniones.

Claramente hay muchos puntos y riqueza por compartir.

P. Martín Donech

P. Martín Donetch

La dimensión social que nos (hace) falta

Sin duda que esta reunión con el padre Martin fue también muy significativa para él, así lo manifestó, dado que es la primera vez que un grupo de nuestro Movimiento se acerca a conocer esta gran experiencia desarrollada por un hijo de la alianza.

Para nosotros fue un momento extraordinario, tanto humano como sobrenatural, que hemos querido compartir con la Familia. Para mi, fue un reencuentro con el padre Sergio a quién conocí en 1969 a mis 19 años y que tuvo una gran significación en esa etapa de mi vida.

Este encuentro nos lleva, con mirada providente, a descubrir la voluntad de Dios para este tiempo. También nos deja muchas interrogantes: ¿Qué nos pasó que no fuimos capaces de escuchar y acoger la visión del padre Sergio en su momento y hoy estamos tan atrapados en un gran clasismo o elitismo social? ¿Por qué nos cerramos tanto que no hemos sido capaces de ir a la búsqueda de lo que Dios nos quiera decir con otras experiencias que han nacido desde nuestra familia y han migrado de ella? En momentos en que nuestro movimiento imperiosamente necesita, por fidelidad a nuestra Iglesia y a nuestra misión, alcanzar una mayor cercanía e incorporación de los sectores mas pobres y carenciados de nuestra sociedad ¿Qué y cuánto nos puede enseñar el Oratorio Mariano?

Seguiremos avanzando en estas reflexiones y en nuevos encuentros que pondremos en común, porque es una experiencia en la que Dios, con fuerza y casi gritándonos, nos muestra maravillosos caminos para ser transitados por nuestro Movimiento.

¿Cómo despertamos al niño Dios en el Chile de hoy?

Tendremos que partir despertándonos nosotros a la mirada de Cristo que nos invita a descubrirlo principalmente en los más pobres, carenciados y excluidos o descartados de nuestra sociedad, comprendiendo cabalmente que solo nos encontraremos con Él en la medida que vivamos el amor al prójimo y las obras de misericordia.

Pero el niño ha despertado en miembros de nuestra familia que están viviendo una comprometida entrega a los más necesitados, que han decidido vivir y compartir el día a día con ellos. Reñaca Más Alto y Arde Puente Alto son una muestra de ello. Se prende una luz de esperanza que anhelamos se transforme en un gran destello para toda la familia.

¡No hay otro camino para despertar al niño!


[1] Expresión típica del Papa Francisco
[2] “El Tinkunaco es la fiesta popular y religiosa más importante de la provincia de La Rioja. Se celebra desde hace más de 400 años entre el 22 de diciembre y el 3 de enero. En ella confluyen raíces andinas e hispánicas que se fueron resignificando a lo largo de la historia. Durante el Tinkunaco se conmemora un pacto de paz que sucedió en las Pascuas de 1593 entre los conquistadores españoles y los diaguitas que habitaban La Rioja. Medio siglo más tarde de aquel episodio, fueron los jesuitas quienes retomaron esta historia como parte de su práctica evangelizadora y dieron origen a la celebración” (https://www.cultura.gob.ar/conoce-que-es-el-tinkunaco-8655/).

 

Etiquetas: , , , , , ,

3 Responses

  1. Patricio dice:

    Enorme alegría leer este artículo. Desde hace 20 años pertenezco al Oratorio Mariano, tuve la gracia de compartir con el padre Sergio Mena, su fundador, conozco los detalles de su partida de Schoenstatt y hasta un corto en video realicé sobre el tema, para conocimiento de la familia Mariana. El padre Sergio siempre se expresó con mucho cariño del movimiento de Schoenstatt incluso para los 50 años de sacerdocio me encargué de entrevistar e invitar al padre Ricardo (de Schoenstatt) quién nos visitó y concelebro la eucaristía de esos 50 años. Fue una jornada extraordinaria me emotiva dado que ambos estuvieron juntos desde jóvenes y se ordenaron juntos. Un Gran abrazo a las familias de ambos queridos movimientos

  2. Paz Leiva dice:

    Gracias, Patricio. Me ha interpelado tu artículo. Schoenstatt tiene pendiente la vertiente social. No pierdo la esperanza de que algún día despertemos y dejemos de vivir en la zona de confort.

  3. Gustavo dice:

    Que alegría mirar desde mi postura mariana, el encuentro de la familia mariana, conozco ambos movimientos, los he amado a ambos, 3 hijas mías estudiaron en el colegio Mariano, pude participar ampliamente de su espiritualidad, como asimismo del movimiento Oratorio madre del pueblo, en este crecí al punto que hoy me identificó ante el mundo familiar y social, como hijo de María.. a ella entre tantas cosas le encomiende mi salud… nunca me enfermo. hasta ahora a mis 78 años, para compartirles les diré que cada día antes de ir al trabajo… le cantaba a la madre… Así me traspaso su amor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *