Publicado el 2014-04-04 In Temas - Opiniones

El fuego pulsa en palabras

EN POCAS PALABRAS, P. Joaquín Alliende L. Sabemos que nuestro fundador enseñó latín en Ehrenbreitstein. Más tarde sostuvo que el preferiría que ciertos ramos de la teología se dieran en latín, en razón de la precisión lingüística.

 

 

Recuerdo bien al prior de una cartuja en medio de bosques nevados. En víspera de Navidad le oí decir: “Kentenich es un pensador neoescolástico, y como tal, no me interesa”. Sentí que aquel monje caía en la trampa de confundir el traje con la persona. Si bien, en algunos asuntos el habla kentenijiana es deudora de un tiempo pasado, su mensaje tiene proyección para varios siglos, como él se atrevió a sostener.

La finalidad determina todo

La cuestión es más seria de lo que parece, porque el fundador se refirió a la materia más clave de su obra, usando la palabra “fin”, en alemán: “Ziel”. Al pronunciarla, en su mente resonaba un adagio central en latín: “finis causa causarum”. Hoy pudiera traducirse como: la finalidad determina todo. Un ejemplo muy simple: si yo me propongo ir con urgencia a París, esa meta determina qué ropa me pongo, a qué hora me levanto, qué boleto solicito en la ventanilla… todo para lograr mi propósito.

Aquí se juega todo el existir de Schoenstatt en el tiempo

Un fundador carismático tiene la obligación de de-finir los fines de la Obra que funda. Sin esto, él está programando el pronto fracaso de su fundación. Nuestro padre fue clarísimo, tres fines: la comunidad nueva con hombres nuevos, la misión salvífica de occidente, la Confederación Apostólica Universal, como herencia de san Vicente Pallotti. Aquí se juega todo el existir de Schoenstatt en el tiempo. Recortar los fines, adaptarlos a lo que buenamente hoy podemos hacer, a lo que creo, siento, oigo y presiento, es enfriar o apagar del todo el fuego pentecostal que se apoderó del Santuario el 18 de octubre de 1914.

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El fuego pulsa en palabras

EN POCAS PALABRAS, P. Joaquín Alliende L. Sabemos que nuestro fundador enseñó latín en Ehrenbreitstein. Más tarde sostuvo que el preferiría que ciertos ramos de la teología se dieran en latín, en razón de la precisión lingüística.

 

 

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1 Responses

  1. HMA - Argentina dice:

    ¡Nuevamente, muchas gracias por estas sabrosísimas ‘pocas palabras’ que regala el P. Joaquín a schoenstatt.org!El tema evoca la genial formulación hecha por el P. Alex Menningen con ocasión del centenario del nacimiento del Padre y Fundador: la fidelidad creadora. Mantener con firmeza los principios, tantear continuamente su aplicación acorde a las necesidades del tiempo, del lugar, de las personas. ¡Fidelidad creadora! No se puede conservar la vida en una caja fuerte. Allí muere, solo sobrevivirán formas que con el tiempo dejarán de cumplir su función de sostén del organismo vivo y se transformarán en un verdadero estorbo. ¡Tarea permanente para todo schoenstattiano: fidelidad al Fundador, creatividad para aplicar sus principios!

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