“Iglesia hoy y camino sinodal – … ¿y por qué sigo aún aquí?

ALEMANIA, Peter Hagmann • 

Es el primer domingo de julio, verano, ambiente de vacaciones… Y casi 20 hombres se encuentran frente a sus pantallas y hablan de la Iglesia, del camino sinodal y de su propia fe. ¿Utopía? De ninguna manera. Es la primera de tres reuniones sobre el tema, ofrecidas y organizadas por el “Männerwerkstatt” («Taller de Hombres»), abierto a todos los hombres. Y ellos están ahí. —

“En nuestra nueva trilogía, hemos abordado un tema extremadamente desafiante”, dijo Peter H. al comienzo. «Iglesia hoy y camino sinodal – … ¿y por qué sigo aún aquí?»

Mucha gente, especialmente en Alemania, ha puesto sus esperanzas en el camino sinodal de la Iglesia alemana, pero la pregunta seguirá abierta si finalmente, tras una larga discusión, solo se llegue a una respuesta para la mayoría, o sea, para los frustrados.

El número de personas que abandonan la Iglesia en estos momentos es alto y las críticas a la iglesia generalmente se concentran en algunos puntos que se mencionan una y otra vez. El Katholikentag (Jornada de Católicos) en Stuttgart, el mes pasado, fue un evento muy bueno en cuanto al ambiente, pero se notó en todas partes que se planeó para una cantidad más grande de personas que la cantidad de visitantes que finalmente asistieron.

Sin embargo, nos concentramos en el tema «Iglesia hoy & camino sinodal – . . . ¿y por qué sigo aún aquí?» No se trata tanto de la Iglesia como institución, sino de la Iglesia como comunidad y de nuestro vínculo emocional con esta comunidad de creyentes.

El moderador le dio la bienvenida a Sven B., quien describió esa noche su camino hacia la fe y la Iglesia. Él se diferencia fundamentalmente de muchos otros que deben su formación a una educación cristiana.

Hace solo unos años que él decidió bautizarse como adulto y, por lo tanto, tiene una visión de la Iglesia completamente diferente a la de las personas que siempre han estado más o menos en contacto con ella.

La búsqueda de la verdad

Sven B., de unos cuarenta años, que relató su vida esa noche, fue educado conscientemente ateo, y la Iglesia no tenía más importancia para él que un club de fútbol o de balonmano.

Sven les contó a los participantes sobre su camino, su larga búsqueda de la «VERDAD», que comenzó a la edad de 18 años. A los cuarenta años tuvo su experiencia de llamado a esta Iglesia y a Dios. Fue el llamado consciente a la Iglesia católica. La religión que él mismo se había inventado hasta entonces era una mezcla de islam, cristianismo, budismo, hinduismo y otros elementos.

Sven lo experimentó como una intensa búsqueda de la verdad, del amor, del sentido de su vida. En el punto más bajo de su estado de ánimo escuchó a Jesús que le decía: «¡Comienza una vida nueva!»

¡Aprendió a confiar, a ceder responsabilidades y a sentirse aceptado! Para él, estas fueron experiencias existenciales que le mostraron con claridad: ¡Aquí vivo, aquí siento la acción de Dios!

Foto: Cathopic

La búsqueda de la verdad

El acercamiento y también la experiencia con la Iglesia es algo completamente nuevo: el catecismo trae muchas cosas nuevas, pero también incomprensibles y muchas cosas que no se pueden conciliar con la visión del mundo y la autoimagen anteriores. En todo este proceso, Sven sintió el amor incondicional de Dios, experimentó a Jesús como LA verdad que te hace libre. Una confesión de vida le permitió sentir esta gracia santificadora de la conversión y del perdón. Para él, la confesión se convirtió en un encuentro con Jesús. 

Communio – más que un sentimiento de “camaradería”

También experimentó la comunidad en la fe, lo que se diferencia totalmente de su solitaria “búsqueda de Dios”, que también experimentó como un proceso muy doloroso.

Él sintió que esta «communio», este vínculo a través de la comunión eucarística significaba algo muy especial, una comunidad en la fe que es algo diferente a la camaradería de un club de boliche. Su acercamiento personal a la Eucaristía y a la comunidad cristiana está recién comenzando, pero intuye que aquí le espera un misterio místico de la fe católica que quiere ser descubierto.

Sven experimenta la fe como una “verdad liberadora”, aprende a confiar y a sentirse menos responsable de todo. ¡Hoy siente la diferencia de la “vida antes y después del bautismo”!

Experimenta la comunidad como otro aspecto importante, muy beneficioso y unificador, y siente una gran apertura y aprecio en estas diferentes comunidades en las que participa.

La Iglesia como jerarquía la experimenta más como una «fraternidad y autoridad», pero hasta ahora no ha tenido experiencias negativas. Considera más bien a las autoridades eclesiásticas en el papel del «gran hermano» del que puede aprender.

Misión

Otro gran tema para Sven es la misión, el anunciar, porque quiere compartir con los demás la alegría que ha experimentado en la fe. Él ya ha comenzado con algunas cosas que nunca hubiera imaginado, como dar la bienvenida a los nuevos miembros de la comunidad, hablar con ellos o también rezar en público.

En la ronda posterior de charlas se abordaron diversos temas y se intercambiaron experiencias personales. Jim, de Sydney/Australia, contó que experimentó la historia del Sven consigo mismo en una forma muy parecida.

Después de la oración final, hecha por el moderador Peter H., el encuentro terminó como siempre alrededor de las 21:30 hrs.

Original: alemán 6/7/2022. Traducción: Tita Andras, Viena, Austria