“Necesito dos peregrinas más…”

VENEZUELA, Xiomara Pilar Mora Roma•

Después de recibir la Peregrina que me fue asignada en febrero de 2018, al principio me sentí un poco reacia a sacarla de casa para que comenzara su misión peregrina. La verdad, me costó bastante… Al principio la llevé a algunos lugares puntuales, pero siempre conmigo, ida y vuelta a mi casa. La iglesia a la que asisto, el colegio de mis hijos, un hogar de ancianas, y la casa de mis suegros. Sin embargo, seguía teniéndola en casa.—

Al fallecer mi suegro, en el mes de mayo, la llevé a casa de mi suegra y sentí el impulso de dejarla durante los días de la novena por el descanso eterno de él. La colocaron en el altar que para ese fin elaboraron mis cuñadas. Pasados esos días, se la llevó una de mis cuñadas para su casa, pero yo no veía el momento de que regresara otra vez a mi casa.

De nuevo la tuve un lapso más o menos largo de tiempo en mi casa.

Un error providencial

Hasta que por un maravilloso “error”, obra evidente de la mismísima Virgen, tuve la oportunidad de conocer a Daniel, un joven de 16 años, quien lleva a cabo su misión en Barquisimeto, aquí mismo en Venezuela.

Un día cualquiera me escribe Mercedes MacDonough, desde Argentina y me dice que envió a mi dirección, dos Peregrinas que le correspondían a Daniel, a ver que podía hacer yo para que llegaran a su destino real.

Me pone en contacto con Daniel y nos comunicamos él y yo. Comenzamos a pensar en las distintas opciones para resolver la situación. Entre ellas le digo que me envíe sus datos por correo en una autorización para yo ir a la oficina de correos a retirar las Peregrinas en su nombre, ya que estaban a nombre de Daniel, pero con mi dirección…

De pronto, me dice Daniel que una trabajadora de la oficina de correos aquí en Valencia sintió interés por las cajas, que ya tenían varios días allí sin que nadie las retirara y las destapó, y se sintió conmovida por el contenido, poniéndose en contacto con Daniel, ya que el número de teléfono que aparecía registrado en el envío sí era de él. La señora, al ser también de Barquisimeto se sintió más que identificada y personalmente se encargó de hacérselas llegar a Daniel. Total, que Daniel y yo no tuvimos que hacer nada para solventar la situación. ¡La Virgen se encargó de todo!

Ya luego en conversación más tranquila con Daniel, me dio algunos trucos para hacer peregrinar la imagen de la Mater. Además, me pidió también que, si podía, le enviara una foto de la Patrona de Valencia, Nuestra Señora del Socorro, junto con la Peregrina, ya que había comenzado a sentir devoción por esa advocación, aunque no había tenido la oportunidad de verla en persona.

No veía fácil la misión por problemas de tiempo y falta de vehículo, pero tampoco era imposible, y se lo dejé a Nuestro Señor y a su Santa Madrecita…

Y la Peregrina sale…

Mientras tanto, yo estaba haciendo un Taller de Oración y Vida, y le hablé al guía de la Imagen Peregrina. Él no había escuchado hablar de la Virgen de Schoenstatt y le encantó la idea de que la llevara a una sesión del taller para presidir el encuentro.

Al finalizar la jornada, les hablé de la imagen y su misión. Inmediatamente una de mis compañeras manifestó su deseo de llevarla a su casa, y luego ella se la entregó a otra de las muchachas. Más adelante se las pedí, porque había encontrado el momento oportuno para llevar la Peregrina junto a la Virgen del Socorro.

En medio de la iglesia

El día en el cual se le celebra esta advocación, que es el 13 de noviembre (en vida era la fecha de cumpleaños de mi padre), se celebra una Misa solemne, con la presencia de todo el Clero, y presidida por el Arzobispo de Valencia, en un recinto deportivo en el cual entra una cantidad importante de personas. De allí se lleva en procesión la imagen de la Virgen del Socorro de regreso a la Catedral, a lo largo de la ciudad, por unos cuantos kilómetros.

Mi mamá, mi hija y yo nos fuimos a la Misa y luego a la procesión. Fue hermosísimo. Nunca habíamos acompañado a la Virgen en esa procesión y de verdad que fue maravilloso.

Yo, que no soporto mucho el sol en la cabeza, le di mi gorra o cachucha a mi hija, que no había llevado para ella, y no sentí molestia alguna, ni me cansé. Y mi mamá desde ese día no ha vuelto a sentir necesidad de usar sus lentes o anteojos.

¡Además, pudimos tomar la foto con la Peregrina!

Una nueva misionera

Después se la llevó otra de mis cuñadas, que la tuvo en su casa unos cuantos días también, y actualmente espera poder llevarla de nuevo a su hogar.

Ya en el mes de diciembre, luego de terminar el Taller de Oración y Vida, nuestro guía tuvo la idea de elaborar comidas para darlas a las personas que viven en las calles de la ciudad.

Cada quien aportó lo que pudo para preparar «arepas», comida tradicional venezolana. Algunos pudieron asistir a la jornada, otros no pudimos, pero de algún modo hicimos presencia.

Se me ocurrió que a la comida que entregarían, le sumaran la Imagen Peregrina para llevar bendiciones a estas personas con tantas necesidades. También les di varios escapularios verdes del Inmaculado Corazón de María, para que se los entregaran a cuántas personas pudieran en ese recorrido.

La imagen la recibieron las dos primeras chicas que se la llevaron desde aquella sesión del Taller, y la una de ellas aún la tiene desde ese día. Siento que la Mater quiere estar con ella y me hace sentir mucha paz que así sea. Por ello, ahora me gustaría que María Angélica también pudiera ser misionera de Schoenstatt. Ella está encantada con la idea.

No es parte de la decoración de la casa

Ya poco a poco, he ido madurando la idea de que la Mater debe peregrinar para bendecir todo camino y persona por donde pase, que no es parte de la decoración de una casa, sino del corazón y el afecto de las personas que depositan en Ella su fe.

Agradezco mucho la oportunidad que Dios y la Virgen me han dado de llevar a otros su Amor, a través de esta preciosa imagen que ya ha sido bendecida por distintos sacerdotes, unas cinco o seis veces desde que la recibí.

Por eso, me gustaría recibir una segunda imagen para mí y otra para María Angélica, y así poder seguir difundiendo su mensaje de Amor y sus gracias.