ARGENTINA, Claudia Lell. El 18 de este mes le llegó a una de las misioneras de la Campaña de la Virgen Peregrina de Crespo un afiche con una invitación «Un Millón de niños rezando el Rosario», una iniciativa que se está realizando desde el año 2005 y que tiene como objetivo que un millón de niños, todos al mismo tiempo, estén ofreciendo a la Virgen sus oraciones. Al proponer esta actividad a las docentes de la escuela primaria Nº 70 San José, éstas aceptaron gustosas, por ser el mes del Rosario.
Diariamente en alguno de los recreos se rezaba una decena. Todos sentados en ronda, con sus rosarios entre sus manitos y con mucho respeto, junto a sus maestras le ofrecieron esta «corona de rosas a la Virgen».
Desde principio de año se está trabajando con los jóvenes de esa misma escuela que asisten al secundario. Ellos son misioneros que hacen circular su imagen por la casa de sus compañeros. Han estado reuniéndose con ellos, y en la primera reunión se votó por el nombre del grupo. Ellos se bautizaron como «LOS MENSAJEROS DE MARÍA».
Acción solidaria: Colección de ropa para un Hospital de niños
En las sucesivas reuniones fueron surgiendo distintas propuestas de trabajo. Una de ellas fue el compromiso en realizar una campaña de ropa y calzado para un Hospital de niños en la vecina ciudad de Paraná, que se cumplió con mucho éxito. Al finalizar la recolección, se dispusieron a seleccionar por talles y tamaños todo lo recaudado y con mucha alegría y entusiasmo viajaron a llevar el cargamento solidario para los necesitados del Hospital Materno Infantil San Roque de Paraná.
Trataron de llevar también un poco de alegría en su visita, para lo cual algunos de los jóvenes se vistieron de payasos y repartieron bolsas de golosinas, las que llevaban no sólo la dulzura de las golosinas sino también una tarjeta con una frase bíblica y, por supuesto, un denario, para que en la situación en que se encuentran, puedan sobrellevar sus preocupaciones mediante la oración.
Peregrinación al Santuario
Luego de esta experiencia solidaria los chicos, junto al grupo que los organizó y guió, se dirigieron al SANTUARIO DE LA LOMA para que conocieran las raíces y la historia del Movimiento. Luego de una merienda compartida en el predio del Santuario, realizaron una recorrida por el lugar donde tomaron innumerables fotografías para inmortalizar el viaje. Fue una experiencia enriquecedora que quedará grabada no solo en la mente sino también en el corazón de todos.
