SANTUARIO ORIGINAL, Maria Fischer •
En torno al Santuario Original aún está todo tan tranquilo como casi siempre; sin embargo, las fotos que Pedro M. Dillinger nos envió el otro día, muestran preparativos. Se siente el aire de juventud, el aire de Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). El símbolo del evento ya está hace mucho en el altar del Santuario Original, y fuera se ve una estructura que da un toque urbano a “la pequeña capilla en la pradera verde”. —
Santuario Original en modo de JMJ
Muchos grupos, sobre todo de Latinoamérica, aprovecharán el cruce del océano Atlántico para visitar otros países europeos, antes de llegar a Portugal para la JMJ. En el caso de los schoenstattianos, es una oportunidad para que muchos jóvenes conozcan Schoenstatt.
Y ya es tradicional que unos días antes de la JMJ, estos jóvenes se reúnen en torno a un santuario cercano. Al ser este año la JMJ en Europa, los jóvenes se reunirán en los últimos días de julio en torno al Santuario Original.
Más de 50 jóvenes paraguayos del movimiento de Schoenstatt están listos para partir este domingo 16 de julio hacia Lisboa para la Jornada Mundial de la Juventud, que reunirá a jóvenes de todo el mundo con el papa Francisco. «Estamos muy emocionados y vamos a estar en Roma, Asís, Padua, Alemania y finalmente en Portugal», dijo Vanessa Torres, gerente general de Universo Turismo y coordinadora de esta larga peregrinación.
Un nutrido grupo de jóvenes del Movimiento de Schoenstatt de México ya llegó, se esperan también grupos de Ecuador (con el P. Rafael Amaya, a quien conocemos de las “bolsas de caridad”), Brasil (con el P. Rafael Mota, corresponsal y traductor de schoenstatt.org), Puerto Rico, Estados Unidos, Argentina, Chile, y ciertamente de otros países, especialmente de Latinoamérica.
El 25 de julio habrá una Misa para todos los jóvenes presentes en la Iglesia de Peregrinos y harán renovación de la Alianza de Amor en el Santuario Original.
Las grandes letras blancas “SCHOENSTATT” al lado del Santuario Original, algo bien conocido en ciudades latinoamericanas, dan un hermoso motivo de fotos para todos los grupos… y son un mensaje.
Donde hay un santuario, hay Schoenstatt. Donde hay Schoenstatt, nace santuario. En casa, en el trabajo, en el barrio, en encuentros, en obras sociales, en nuestro tiempo.
Colaboración: Claudia Echenique, Pedro M. Dillinger
