El amor que ensucia las manos

Publicado el 2023-08-06 In JMJ Lisboa

El amor que ensucia las manos

JMJ LISBOA 2023, Maria Fischer •

«El arzobispo de las villas” – así lo expresó Lena Castro Valente en su artículo sobre el programa de Francisco en la Jornada Mundial de la Juventud 2023 – se dirigió, como en cada JMJ en los 10 años de su pontificado, a una periferia existencial, tal como se dirigió tantas veces a las villas, los barrios marginados de Buenos Aires, durante su tiempo como arzobispo (donde la Virgen Peregrina ya estaba presente…). El 4 de agosto, Francisco se dirigió al Centro Parroquial de Serafina para el encuentro con los representantes de algunos centros de asistencia y caridad. —

JMJ Lisboa 2023

El encuentro con el Papa Francisco en el Centro Social Serafina fue un “momento muy importante”, uno de los “momentos más notables de su visita”, dice Carlos Moedas, Presidente de la Cámara Municipal de Lisboa. “Fue realmente hermoso” que el Santo Padre eligiera este proyecto, guiado por el Padre Crespo, subraya. La visita al Centro Social Serafina fue un “momento inolvidable” para estas asociaciones sociales, cuyo mensaje implícito fue la necesidad de “estar al lado de los más vulnerables”. A lo largo de la visita, “él mostró, claramente, en sus ojos, que tenía ganas de quedarse más tiempo”, añade.

El barrio, que recibió a Su Santidad, está marcado por los problemas habitacionales y el narcotráfico. En los últimos años, el Centro Parroquial de Serafina ha desarrollado una labor social para combatir esta realidad. El párroco dijo estar sorprendido de que este sea uno de los lugares que visitará el Papa Francisco durante su visita a Portugal. “¿Por qué a mí?”, “¿A qué debo esta gracia?”, se preguntó al conocer la noticia.

“La Iglesia, como sabemos, desde sus orígenes siempre ha tenido en cuenta el papel primordial de la caridad”, comentó en la rueda de prensa despues de la visita del Papa Francisco. Según el párroco, esa fue la “razón fundamental” que lo llevó a trabajar en el Barrio Serafina durante más de 40 años, habiendo encontrado un lugar sin agua, electricidad y alcantarillado. “De nada nos sirve hacer una buena predicación, celebrar buenos sacramentos, si no los ponemos en práctica con los más necesitados”, subraya.

En cuanto al trabajo realizado en el Centro Social y Parroquial, el P. Francisco destaca los 170 puestos de trabajo que ha conseguido dar y las más de 1000 comidas diarias que ofrece. “La obra no está completa, es permanente, diaria”.

El Papa Francisco también dejó un mensaje al final de la conferencia, al ser cuestionado por los periodistas: “O vivimos, de hecho, la caridad o no somos cristianos”.

En el mismo lugar, el Papa se encontró con representantes de diferentes asociaciones; la asociación Ajuda de Berço, un hogar para niños abandonados o en situación de riesgo que surgió hace veinticinco años en el contexto de los movimientos en defensa de la vida y de las campañas del referendo sobre el aborto de 1998. El deseo era ofrecer a las personas una alternativa a la tentación de renunciar a sus hijos o apoyar a quienes no podían hacerse cargo de ellos. La asociación Acreditar que sigue ocupándose de los más pequeños. También, un joven presentó a su asociación: «Somos un grupo de niños y jóvenes con cáncer, niños y jóvenes que han pasado por este calvario, junto con sus padres». Desde hace treinta años, la asociación «invita a la esperanza en la recuperación e intenta aliviar el sufrimiento durante el tratamiento, tanto en los casos de supervivencia como a las familias cuyos hijos no han sobrevivido».

Como no pensar en estos momentos de encuentro a obras de caridad nacidas desde la Alianza de Amor solidaria y concreta; como no tener presentes en este momento los niños de Dequeni, los jóvenes de la cárcel de menores y de Casa Madre de Tuparenda, los niños y jóvenes en las casas de Maria Ayuda, los niños en la Casa del Niño en Villa Ballester y Florencio Varela,  las familias en torno a la ermita de la Mater en la Villa 31, los “Niños de Maria” en Quito y las familias que reciben las bolsas de caridad a la sombra del santuario de Quito, Navidad Solidaria, las misiones, la Misión IPS, los niños y sus familias en el Campamento Yevide…

“Hacer el bien juntos, actuar concretamente y estar cerca de los más frágiles. O sea, hacer el bien juntos, actuar concretamente —no sólo con ideas, sino concretamente— y estar cerca de los más frágiles”: tres puntos que el Papa Francisco da en este encuentro, para ellos y para todos nosotros.

Obras de caridad desde la Alianza de Amor

Obras de caridad desde la Alianza de Amor

¿Cómo surgen obras de caridad?

En el texto entregado (y no pronunciado, por problemas de vista), el Papa Francisco explica como surgen proyectos de caridad desde el dialogo entre las voces del tiempo y la vocación personal:

“Del cruce de miradas con un anciano en la calle nace un centro de caridad integral, como este en el que nos encontramos; de un desafío moral y social, la «campaña por la vida», nace una asociación que ayuda a las madres y a las familias que esperan un bebé, así como a niños, adolescentes y jóvenes en dificultad, para que, como nos ha dicho Sandra, encuentren un proyecto de vida seguro; de la experiencia de la enfermedad nace una comunidad de apoyo a quien afronta la batalla contra el cáncer, especialmente los niños, para que, como nos ha dicho João, «el progreso del tratamiento y una mejor calidad de vida sean para ellos una realidad».

Gracias por todo lo que hacen. Con mansedumbre y amabilidad, sigan dejándose interpelar por la realidad, con sus pobrezas antiguas y nuevas, y respondan de manera concreta, con creatividad y valentía.”

¿Cómo surgieron las obras de caridad en Schoenstatt que conocemos? ¿Cómo surgen nuevas obras, y donde? ¿Donde surgen obras de amor concreta?

El amor que ensucia las manos

Foto: JMJ Lisboa

No hay amor abstracto

Hay que ensuciarse las manos, hay que vivir un amor concreto. Espontáneamente, el Papa dijo al final del encuentro, como el amor se hace concreto:

Solamente quiero detenerme ya en algo que no está escrito, pero está en el espíritu del encuentro: lo concreto. No hay amor abstracto, no existe. El amor platónico está en órbita, no está en la realidad. El amor concreto, ese que se ensucia las manos, y cada uno de nosotros puede preguntar: ¿el amor que yo siento a todos los de aquí, lo que siento sobre los demás, es concreto o abstracto?

Yo, cuando le doy la mano a una persona necesitada, a un enfermo, a un marginado, después de dar la mano, ¿hago así enseguida, para que no se me «contagie»? ¿Le tengo asco a la pobreza, a la pobreza de los demás? ¿Busco siempre la vida destilada, esa que existe en mi fantasía, pero no existe en la realidad? ¡Cuántas vidas destiladas, inútiles, que pasan por la vida sin dejar huella, porque su vida no tiene peso!

Y aquí tenemos una realidad que deja huella, una realidad de tantos años, que está dejando una huella que es de inspiración a los demás. No podría existir una Jornada Mundial de la Juventud sin tener en cuenta esta realidad, porque esto también es juventud, en el sentido de que ustedes generan vida nueva continuamente. Ustedes, con esta conducta de ustedes, con el compromiso de ustedes, con el ensuciarse las manos de ustedes por tocar la realidad y la miseria de los demás, están generando inspiración, están generando vida, y gracias por eso. Se los agradezco de todo corazón. ¡Sigan adelante y no se desanimen! Y si se desaniman, tomen un vaso de agua y sigan para adelante.

El amor que ensucia las manos

El amor que ensucia las manos – Foto: JMJ Lisboa 2023

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