COSTA RICA, por Rudolf Sauter y Maria Fischer•
Un sismo con magnitud de 7,0 grados, que tuvo epicentro frente a las costas del océano Pacífico de El Salvador, sacudió este jueves el territorio centroamericano, apenas una hora después de que el huracán Otto entrara a Nicaragua por el Caribe. Los pequeños países de Centroamérica – Panamá, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica – muchos de ellos con alto grado de pobreza, en pocas horas se encontraron con los daños de un sismo en el oeste y un huracán en el este.
Panamá, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica… Son países que suenan «familiares» a los schoenstattianos en red. Hay misioneros e imágenes de la Campaña de la Virgen Peregrina en todos ellos. Hay inicios de un Movimiento organizado. Y hay un Movimiento pujante en Costa Rica, donde acaban de bendecir la piedra fundamental del primer Santuario de Centroamérica, pocos días antes de los dos catástrofes naturales.
«Costa Rica nos necesita»
Al menos cuatro personas murieron por el paso de Otto en Costa Rica y unas 30 personas estarían desaparecidas. Las zonas más afectadas son Upala, Bagaces y Los Chiles. El paso del fenómeno dejó condiciones inestables en el país, que podrían provocar lluvias aisladas durante el viernes y sábado. Hay puentes destruidos y rutas bloqueadas, hay casas totalmente destruidas y muchas personas que perdieron todo.
La Familia de Schoenstatt no esperó y lanzó un llamado urgente a la solidaridad en oración, capital de gracias y donaciones de alimentos.
Querida Familia de Schoenstatt: Costa Rica nos necesita. Recemos y pidamos por todos los damnificados; que los rescatistas puedan entrar a los lugares que quedaron incomunicados. ¡Ayudemos! Unámonos como familia y, si les parece, pidamos alimentos no perecederos. Llevémoslos a cada una de las Casas Sedes y luego los entregaremos a uno de los centros de recolección, probablemente la Cruz Roja. ¡Es momento de ayudar a nuestros hermanos de Upala, Bijagua y Bagaces! ¡Es tiempo de ser solidarios!
La Casa Sede del Este abre de 8:00 a 12:00 y de 1:00 a 5:00. Pueden dejar las cosas en el salón contiguo al Santuario Hogar.»
Un inicio de Adviento inesperado.
Un inicio de Adviento solidario.
Un Adviento que realmente es Adviento.
