Publicado el 2016-05-05 In Taller de comunicación kentenijiana, Vida en alianza

Recordé el día en que la llama empezó a arder

PARAGUAY, Mónica Enciso Arrúa – «La Misa del 1º de mayo en Tupãrenda (5)» •

De camino a la iglesia Santa María de la Trinidad para participar en la misa dominical, íbamos hablando con otros dos miembros de la Rama de Profesionales del Seminario sobre Comunicación Kentenijiana sobre los dones que tenían algunos santos y que tienen algunos sacerdotes que imponen las manos para la sanación de los enfermos. En ese momento era para mí una charla más de las tantas que tuvimos durante el retiro.

Al llegar a la iglesia quedé impactada por la enorme y hermosísima imagen del altar que refleja la Santísima Trinidad y la Sagrada Familia: no podía quitar mis ojos de ella y no era la primera vez que la veía.

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Recordé cómo mi vida cambió desde ese día

Durante la comunión me emocioné mucho cuando el hermoso coro que acompañaba la misa empezó a cantar «Déjate», música en la que Jesús nos llama y pide que nos dejemos llenar de su espíritu.

Allí me di cuenta de que la charla sobre los dones, la hermosa imagen del altar con la paloma en el medio y la música “Déjate” fueron momentos que hablaban sobre el Espíritu Santo y me hizo recordar la primera vez que lo sentí y cómo mi vida cambió desde ese día.

Fue lindo volver atrás y vivir ese momento en que la llama empezó a arder y que marcó mi vida, pude darme cuenta de todo lo que crecí, de todo lo que hice y acordarme de los grandes regalos que recibí desde ese momento y que sigo recibiendo.

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Fotos: Cássio Leal, Sao Paulo, Brasil

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1 Responses

  1. Santiago González dice:

    Nunca voy a olvidar ese día, el 1 de mayo ; ese día lo voy a guardar siempre en mi corazón, soy integrante de ese Coro que cantó ese día y que por primera ves me tomé el coraje de cantar como solista y así regalarle a mi hija una canción por su cumpleaños y por que va a viajar en los EEUU a estudiar en la Universidad, cuesta mucho aceptar que los hijos se tienen que despegar de los padres, pero mi corazón tiene un alivio,que vaya dónde vaya , va acompañada de María

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