Publicado el 2011-07-25 In schoenstattianos

Silencio, esperanza y fidelidad: Padre Jorge Falch Frey. Un regalo de Dios para nuestra Familia y para la Iglesia de Santiago

P. Jorge FalchCHILE, Carmen Maria Rogers. En la madrugada del 1º de junio pasado, “el sacerdote alemán que dedicó su vida a crear obras en Chile”, llegó al Schoenstatt eterno. El P. Raúl Hasbún dijo “la figura del Padre Jorge se resumía en tres palabras evangélicas: silencio, esperanza, y fidelidad.

 

 

 

 


“¡Pidámosle al Padre Jorge!”

Mil veces se escuchó esta propuesta en Bellavista…. Y el Padre Jorge, con la fidelidad silenciosa de María y su profunda paternidad, siempre tenía un sí para todos. Con la mirada y la alegría transparente de un niño, te daba la sensación de que eras tú quien le hacía un favor a él.

En un artículo publicado por El Mercurio en días pasados, se habla de la fecundidad del Padre Jorge, uno de los pilares del Instituto de los Sacerdotes Diocesanos en Chile: “La fundación del Santuario Nuevo Belén, de la Casa San José y de la Sociedad de Historia Eclesiástica, son sólo algunos de los aportes del sacerdote alemán, fallecido a los 83 años.

Su obra en Chile

Llegó a Chile el 29 de julio de 1967. En 1972, se le encomendó la Parroquia Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa en la Zona Oeste de Santiago y entre otras tareas cooperó en la construcción del Santuario “Nuevo Belén” en Quinta Normal.

Preocupado de la formación de los sacerdotes trabajó en conjunto con otros sacerdotes, para dar una nueva estructura al Seminario de Santiago y en 1972, con el grupo abrió la Casa Las Rosas, del Seminario en el Paradero 31 de Vicuña Mackenna.

En 1980, Cardenal Silva Henríquez lo nombró Director Espiritual en el Seminario Pontificio Mayor de los Santos Ángeles Custodios de Santiago. Estuvo a cargo de la biblioteca y trabajó intensamente en el equipo de redacción de la Revista Católica, en la que publicó en cada número los aniversarios de las parroquias y las reseñas biográficas de los sacerdotes diocesanos fallecidos.

En 1982 participó de la fundación de la Sociedad de Historia de la Iglesia en Chile. Como miembro del Instituto de Sacerdotes Diocesanos de Schoenstatt promovió la construcción de la Casa San José en Bellavista. Permaneció siempre vinculado al Seminario como profesor y confesor.

Silencio, esperanza y fidelidad

En 1985 peregrinó con la Familia chilena a Schoenstatt y a Roma. En una oportunidad, recorriendo las calles de Roma encontró una imagen de la Santísima Virgen, Patrona de los Sacerdotes Diocesanos contó. Como no había suficiente cantidad de imágenes, más tarde compré algunas más y se las llevé de regalo; ¡veinte años después recordaba la anécdota!

Siempre alegre, siempre confiado, siempre dispuesto, verdaderamente su vida fue un regalo de la Mater para todos los que tuvimos el privilegio de conocerlo… especialmente su familia del Santuario de Bellavista.

1 Responses

  1. Luis Ortiz Pino dice:

    Conocí al padre Jorge en el proceso de fundación del Santuario Nuevo Belén, participando en la juventud. Me conmueve su sencillez, su bella voz, su deseo de siempre servir, su paternidad, muchos de los jovenes recibimos su acogimiento. Un hombre constructor, la casa de las Hnas Marianas al costado del Santuario es también su obra. En lo mas profundo de su ser mantenía su fidelidad al fundador de Schoenstatt, un sí genroso para Chile, somos parte de su bondad y alegría. El confio mucho en nosotros los jovenes, bajo una condición social media baja.
    P. Jorge nos llevas en tu corazón al cielo, ayudanos a seguir construyendo la obra de tu amor, servir y amar a la iglesia a través de Schoenstatt, especialmente en las parroquias y barrios de nuestras comunas,Qta. Normal, Renca, Conchali, Lo Prado, Pudahuel, Cerro Navia, Estación Central.

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