BRASIL, Edso y Luciana Mocelin. Abril de 1947. El P. José Kentenich, en un viaje, pasa por Curitiba / PR, hospedándose en la parroquia del Buen Jesús, donde ofrece una conferencia en alemán, que narra los horrores que hicieron los nazis en Europa. Sus pasos generaron vida. ¡La semilla fue plantada en tierra fértil!
A mediados de los años 50, los miembros del Movimiento de Londrina se trasladaron a Curitiba. Sin embargo, el amor filial a la MTA y el celo apostólico no disminuyeron. Celebraban los días 18 y a medida que se internaban en Schoenstatt, sintieron la necesidad de tener un Santuario. ¿Pero dónde y cómo llevar a cabo este deseo? Sólo con la cooperación de la Madre de Dios. Ella tenía que elegir el lugar predilecto y querido por Dios desde toda la eternidad, para erigir su trono de la gracias.
Surgió una aliada, D. Lenir Bavoso, de la Rama de Madres, y en su lecho de dolor, se consagró dedicó a la Madre Tres Veces Admirable de Schoenstatt, el 12 de diciembre de 1975, ofreciendo su propia vida por la construcción del Santuario de Curitiba y la difusión de la Obra de Schoenstatt.
«Si fuera de su agrado llamarme a su lado, me entregó como semilla que se echa en los cimientos del Santuario…
La semilla estaba siendo plantada
Para comprender mejor la historia del Santuario de Curitiba, es necesario mirar más en el tiempo. La Madre de Dios ya estaba haciendo algo silenciosamente a través de los acontecimientos.
En los años 60, el Sr. Ignacio Biernaski era el responsable de la pastoral de los enfermos en la zona de Campo Largo y con frecuencia acompañado por su hijo Rafael, visitaba a la señora Kulik Anna que se hallaba en cama y vivía con sus cuatro hijas. Con las constantes visitas, se concretó una gran familiaridad entre todos.
Años más tarde, en 1981, el diácono Rafael Biernaski, conociendo Schoenstatt, en una visita a las señoras Kulik, comentó sobre la posibilidad de construir el Santuario en el terreno de ellas.
En 1982, el P. Rafael Ramos comunicó al reverendo Sobrinho Iden, ambos de la Federación de Sacerdotes de Schoenstatt, la existencia de un posible lugar para un futuro Santuario. Y cuando los dos sacerdotes, al año siguiente, hicieron un viaje a Schoenstatt, la idea de construir el Santuario en el terreno de las señoras Kulik quedó clara.
El 18 de octubre de 1983, un día lluvioso y húmedo, sacerdotes y hermanas visitado el sitio. Cuando llegaron sólo encontraron a las señoras Rosa, María y Marta, que los recibieron con amabilidad. Todas tenían los pies mojados y descalzos, porque trabajan en el campo. Como el P. Rafael las conocía bien y entendía el polaco, no fue difícil el relacionamiento. Pero ese día, casi no se habló sobre la donación del terreno porque no podían resolver nada, debido a la ausencia de la señora Helena, la más joven, que estaba en la parroquia.
Al salir, se detuvieron en un punto del terreno, que más tarde fue vendido y allí enterraron una medalla, venida de Schoenstatt. Cuando se encontraron con la señora Helen conversaron de la posibilidad de donar el terreno para construir un Santuario de Gracias. Se le mostraron fotos del interior y el exterior del Santuario. Ella dijo: «Si fuese en nuestra tierra, con quedaríamos felices. Queremos esperar, todas, la inauguración». Esta frase es comprensible, ya que eran cuatro señoras de edad avanzada.
Una historia de gracias
Con el generoso sí de las señoras Kulik, que donaron más de tres fanegas a la Madre de Dios y su obra, se inicia una historia sagrada.
Una Ermita, dedicada a la MTA, fue construido con la madera de un árbol de pino que cayó fulminado por un rayo. Misas y peregrinaciones crecieron en el sitio. La Familia de Schoenstatt aceleró la conquista espiritual y las iniciativas para recaudar fondos para la construcción del Santuario «Magnificat», que sería una misión en agradecimiento al centenario del nacimiento del Padre José Kentenich y el cincuentenario de la llegada de las primeras Hermanas de María a tierras brasileñas.
La puesta y bendición de la piedra fundamental del Santuario se produjo el 17 de noviembre de 1984 y la solemne inauguración el 19 de mayo de 1985. La Madre de Dios pasó a tener un nuevo trono de gracias en tierras brasileñas.
Han surgido los frutos
25 años han pasado y los pasos del Padre siguen dando sus frutos. Hoy, junto al Santuario Tabor Magnificat, la Familia de Schoenstatt refleja la vida, la unidad y disposición para el apostolado. La Liga de Madres es la rama más numerosa y la Juventud Femenina y Masculina han cobrado un nuevo impulso con la apertura de los grupos de vecinos en la Parroquia Tingui. También están presentes la Liga y la Federación de Mujeres. La Obra Familiar está representada por el Instituto, la Liga y la Federación. Los Apóstoles Lucientes de María y los Pioneros de Schoenstatt renacerán, serán la semilla de los próximos 25 años. El Rosario de los Hombres también ya tiene un grupo que rinde culto en el Santuario.
Aquí nos detuvimos a reflexionar sobre los planes de Dios que son realmente un misterio para nosotros. El P. Idenando, que tanto colaboró con el Santuario desde el principio y ya se preparaba para el Jubileo de Plata, murió en un accidente a principios de este año. Mons. Rafael fue nombrado Obispo Auxiliar de Curitiba un mes más tarde. Ambos de la Federación de los Padres de Schoenstatt. Dos vidas que se entrecruzan con la historia del Santuario Magnificat, dos dádivas jubilares.
En estos 25 años de historia, muchas Hermanas de María dieron a su valiosa contribución para que la vida surgiera y floreciera en el Santuario. Para ellas nuestra gratitud, así como a todos los bienhechores y el personal que colaboró, y continúa ayudando a las necesidades materiales y mantenimiento de todo el espacio físico.
El Centro de Educación infantil rincón del Sol, administrado por las Hermanas de María se encuentra lejos del Santuario, pero se alimenta de la fuente de gracias.
La casa que pertenecía a la familia Kulik y que durante algunos años sirvió de residencia de las Hermanas y después como depósito, fue renovada y ahora se llama Casa Nazaret, acogiendo a los visitantes y sirviendo como sala de reuniones para la Familia de Schoenstatt.
Grandes obras, torrente de gracias
En el año 2003 se inició la obra audaz de la construcción de la Casa de Retiros, que se interrumpió por algunos años por falta de recursos, pero la han reanudado con gran confianza en la Divina Providencia.
Una idea reciente e innovadora es el plan de acción anual, que contempla las actividades que la Familia de Schoenstatt de Curitiba desarrolla en conjunto. Ello ayuda a tener objetivos claros y responsabilidad en la ejecución del proyecto. También se entregó al arzobispo, con la intención de mostrar el trabajo realizado en el Movimiento de Schoenstatt y la inclusión en la iglesia local.
La Pastoral del Santuario es otra iniciativa reciente, que muestra activa con muchos proyectos en desarrollo. Uno de ellos, Llévate a la Madre a casa, ya se está llevando a otros Santuarios.
Son 25 años de una historia construida por muchas manos, con generosidad, mucho Capital de Gracias y bajo la protección de la Madre, Reina y Vencedora Tres Veces Admirable de Schoenstatt.
Invitamos a todos a unirse en oración por la preparación de todas las festividades y a los que pueden, queremos hacer una invitación muy especial: vengan a celebrar con nosotros 25 años de actuación de nuestra Madre, Reina y Vencedora Tres Veces Admirable de Schoenstatt en nuestro Tabor Magnificat. ¡Ella se regocija con la presencia de todos!
Fuente histórica: Crónicas del Santuario Tabor Magnificat y Revista de la Generación Tabor
Traducción: Kikito Vázquez, Asunción, Paraguay
Me hubiera encantado ir a celebrar este gran Jubileo del Santua
rio Magnificat, pero recién llego de viaje. Sin embargo, espiri
tualmente celebraré con Uds. en nuestro Santuario Familia del Padre Hogar para el Mundo que como Familia, celbra los 50 años de estar bajo la protección de la MTA de Schönstatt!. Realmente Ella, la Reina, se escoge el lugarcito y los "instrumentos" para seguir en su viaje triunfal por el mundo entero. Unámonos en la Alianza de Amor para que nuestra Iglesia junto al Santo Padre, sepan y sientan y "vean" que Schönstatt y cada uno de sus hijos, se entrega por Ella y para Ella por la Canonización de nuesstro querido Padre Fundador. Un saludo de felicitación en el corazón de la Reina. Ma. Piedad ( LAF )