Sandra Lezcano. Qué bueno saber que la Familia de Schoenstatt en el lugar de origen no sólo se reúne para jornadas, misas, entierros y reuniones de gremios… También se reúne para disfrutar un poco de música y arte. Y es que, como cualquier familia, ¿también necesitamos relajarnos un poco, no?
Fue una iniciativa interesante de Gertraud Wackerbauer y su generación, pertenecientes al Instituto de Nuestra Señora de Schoenstatt, que nos deleitaron con una selección de músicas que no sólo eran agradables al oído sino también nos permitían reflexionar y profundizar sobre diversos temas relacionados a los sentidos el gusto, el olfato, el oído, la vista, el tacto…
Un encuentro internacional
La manera en que Gertraud Wackerbauer lograba mezclar momentos profundos para luego quitar un sinfín de risas del público fue algo asombroso.
Lo que había sido pensado como un encuentro casual para las personas que viven en Schoenstatt y los alrededores, terminó en un encuentro internacional. Empezando por los de casa estaban representantes de Alemania, Portugal, España, Polonia, Argentina, Chile y Paraguay. Las anfitrionas quedaron felizmente sorprendidas al ver a un público tan variado que cantaba, reía y bailaba en cada tema.
Los pequeños y grandes detalles que dieron originalidad al encuentro
La organización fue perfecta, los detalles transmitían delicadeza, las pinturas de Miriam Soto, de nacionalidad española, dieron un toque especial a cada composición.
Otro detalle que despertó alegría y ternura fueron los títeres, durante la pausa intermedia y comentando con muchos de los presentes me sentí mejor al saber que más de una persona quedó enamorada de la Ranita cantora al igual que yo.Gracias a todas las personas que trabajaron por un momento tan bello, y ojalá tengamos siempre presente que son estos momentos los que permiten crear lazos de amistad, permiten que sacerdotes, Hermanas de Marías, las Frauen y todos los schoenstattianos que estábamos presentes olvidáramos por un momento los rangos y las formalidades para compartir un momento en familia.
Un momento especial vivido en familia
Las chicas de Portugal también presentaron dos cantos llenos de vida y explicaron en resumidas palabras que estaban en Schoenstatt para discernir su vocación como mujeres de la Juventud Femenina.
La noche culminó de una manera divertida, donde todos prendimos una estrellita dando fin a la noche. Las anfitrionas y artistas de la noche fueron reconocidas de pie y con aplausos en agradecimiento al momento especial vivido en Familia.
