ARGENTINA, Guillermo Ferreyra •
Días pasados un grupo de docentes de nivel secundario pertenecientes al Colegio María de Nazareth, de los Padres de Schoenstatt, viajaron desde la ciudad de Córdoba, capital de la provincia homónima, hasta las ciudades de La Plata, Florencio Varela y Pilar en la provincia de Buenos Aires, distante a unos 800 kilómetros, con un doble objetivo: visitar y conocer por un lado Santuarios de Schoenstatt, como también tomar contacto con docentes de colegios del Círculo de Colegios Kentenijianos, un hermoso proyecto para profundizar en la pedagogía kentenijiana y el la espiritulidad schoenstatiana a través de la vivencia del encuentro. —
La docente encargada, Juliana Revol Martínez nos comparte los lugares visitados y los testimonios de los viajeros.
Casa de los Padres en Pilar con el Padre Marcelo Gallardo
Primer día: ciudad de La Plata
Catedral de La Plata
Apenas llegados a la ciudad de La Plata, se dirigieron a la localidad cercana de Gonnet, en donde fueron recibidos por directivos y coordinadores del colegio Covenant, compartiendo durante el desayuno, vivencias y testimonios de un proyecto relativamente nuevo, ya que fue fundado hace 11 años (foto de título).
De allí se dirigieron al Instituto José Manuel Estrada de City Bell, en donde los esperaban los directivos, miembros de la Fundación y el capellán, Padre José María Iturrería. Momento de almuerzo compartido con experiencias y testimonios de un proyecto afianzado por muchos años de entrega y dedicación.
Para culminar la jornada, se dirigieron a visitar el Santuario de la Liberación del Padre, en el centro de la ciudad de La Plata, erigido a la sombra de la Iglesia Catedral, en los jardines de la Curia. Un Santuario cargado de historias y vivencias profundas de filialidad al fundador del movimiento.
Segundo día: ciudades de Florencio Varela y Pilar
El segundo día fue la vivencia profunda de visitar lugares cargados de gracia como el Santuario Nacional de Nuevo Schoenstatt, a cargo de las Hermanas de María, representadas por las Hermanas María Julia y María Sol, como los Santuarios de Sión y de Pilar, a cargo de los Padres de Schoenstatt. Allí tomaron contacto con el Marcelo Gallardo con quien recordaron los tiempos de la fundación de su colegio.
Asimismo, visitaron la llamada “Casa del Padre”, un lugar de encuentro profundo con la historia, la vida y los recuerdos de nuestro Padre Fundador.
En el Santuario Sion del Padre
Los frutos del viaje plasmados en testimonios
- “Cuando estuvimos en la Casa del Padre y la Hna. Ma. Julia nos invitó a visitar la planta alta, había un cartel colgado en una de las habitaciones que decía: «el Santuario es fuente de gracia, es casa, un lugar donde se encuentra la familia». Después de la visita a los cuatro Santuarios, puedo afirmar que eso se respira… casa, familia, hermanos.” (Prof. Paola Quiroga)
- “La confianza en la divina Providencia de nuestro Padre Fundador sigue vigente en el movimiento, las Hermanas y el Padre Marcelo Gallardo nos regalaron un poco de sus testimonios. Entre estos la historia de nuestro Colegio, que a pesar de las diversas adversidades su obra fue llevada a cabo por el trabajo de varias familias y padres que confiaron en el poder y voluntad de Dios”. (Prof. Mumi Parellada)
- “Conocí más de cerca la historia de la orden de las Hermanas de María y el Padre Kentenich. Ha sido sorprendente, para mí la diferencia con otras órdenes que conozco, lo cercana que es a la realidad de cada uno”. (Mariana Schenk, secretaria académica)
- “Me llevo de estos días la entrega y ejemplo de amor a Dios Padre, al prójimo, viviendo desde el amor y el sufrimiento, desde la confianza y la enseñanza y construyendo esta maravillosa obra que sintetizan la vida en plenitud. ¡Hermosa experiencia de fe! ¡Amo el María de Nazareth! Feliz de pertenecer y saber que la Mater guía cada uno de mis pasos dentro y fuera del colegio. ¡Gracias!». (Prof. Gaby Oliveri)
- “Compartir estos dos días con otros docentes movidos por el mismo amor a la educación, a nuestros alumnos y también a la propuesta pedagógica de Schoenstatt, fue realmente un regalo para el alma y un volver a encendernos en la pasión por esta vocación de amor y de entrega que es la educación”. (Miss Julie Revol, Coordinadora de Carisma y Convivencia)
- “Un viaje con docentes siempre es fructífero ya que permite charlas y vivencias adicionales a lo habitual; más aún si durante el itinerario visitamos distintos Santuarios de Schoenstatt y escuelas con nuestro mismo carisma institucional. Estos días pude apreciar lo tangible que se puede volver la historia del Padre Kentenich y comprender cómo la divina providencia se refleja en algunos hechos particulares de su obra. En lo personal me sirvió para renovar la motivación y convicción de la vocación docente; agradecer y fortalecer el vínculo con Maria Madre y Dios Padre». (Prof. Lucas Medici)
- “Conocer los colegios de Schoenstatt y visitar los diferentes santuarios me dieron la gracia de experimentar el espíritu del movimiento y sobre todo de ver encarnadas las palabras de Kentenich: “Vengo de casa, estoy en casa y voy a casa”. (Prof. Inés Luque)
- “Este viaje me permitió principalmente profundizar mis conocimientos sobre Schoenstatt y hacer una mirada introspectiva sobre mi espiritualidad. Aprender de las experiencias de otros colegas y de las vivencias de los Padres Josema y Marcelo. Disfruté mucho la charla con los directivos del colegio Covenant quienes mostraron ser muy sencillos y con una manera de trabajar similar a la nuestra. Después de la visita al Colegio Estrada, valorar nuestro trabajo y el buen clima de convivencia que vivimos en Maria de Nazareth».
- «Me llevo del viaje nuevos amigos y recuerdos de buenos momentos, lindas charlas y risas compartidas. ¡Gracias por hacerme parte de este proyecto de inmersión en el carisma schoenstattiano!». (Miss Naty Duckwitz)
Instituto José Manuel Estrada de City Bell
