Publicado el 2014-12-07 In Schoenstatt en salida

Las Misiones Familiares, parte de la misión que es Schoenstatt

ARGENTINA, Lilita y Carlos Ricciardi/mda. Fue en el año 2001. Carlos y Lilita Ricciardi viajaron desde la Argentina a Schoenstatt, en Alemania, con el sueño de peregrinar al Santuario Original y de compartir su experiencia en las Misiones Familiares. Lo primero lo lograron, escuchando y viendo lo mucho que se les mostró; pero para contar de sus vivencias solo les quedó una conversación en la redacción de Schoenstatt.org, que entonces estaba en Schoenstatt; no hubo ninguna otra muestra de interés en escuchar sus experiencias y su inquietud. Trece años más tarde, el viernes 24 de octubre, por invitación oficial de los organizadores del jubileo 2014 presentaron las Misiones Familiares en el Consejo Pontificio de la Familia, después de haberlas ofrecido en la Carpa de la Cultura de Alianza, “Familia”, en Schoenstatt.

Durante una “repetición” del encuentro de 2001 – ahora en Belmonte y sin necesidad de traducción – cumplieron con la promesa de compartir sus vivencias desde la perspectiva del envío misionero hecho por el Santo Padre Francisco. He aquí su testimonio:

“¡Que alegría por habernos encontrado en Roma, en el Santuario de Belmonte! Fue la culminación, el broche de oro de todo lo vivido en Schoenstatt y en el Vaticano. Esta experiencia del Jubileo fue totalmente inesperada para nosotros. No teníamos previsto viajar pero… las circunstancias y los caminos de la Mater nos llevaron a hacerlo. Las gracias que hemos recibido, las experiencias vividas y compartidas con nuestros hermanos en la Alianza de todo el mundo, han sido un privilegio y un regalo de Dios. Hemos festejado los cien años de Schoenstatt y hemos visto y comprobado el reconocimiento de la Iglesia a la tarea realizada por el Padre Kentenich en su Obra predilecta. Las palabras del delegado y del Papa Francisco así lo corroboran.

Sembrando…

Estamos muy felices por haber participado en el Jubileo representado a las Misiones Familiares, junto a Alicia y Eduardo Monguillot (fundadores de las Misiones Familiares en la Argentina, que siguen siendo misioneros después de haber participado en dieciséis misiones). El haber estado en la Carpa de la Cultura de Alianza de Matrimonio y Familia, con el stand de las Misiones Familiares, haber podido compartir dos talleres con nuestros hermanos chilenos, Verónica y Rodrigo Bascuñán, en los que tratamos de informar lo que son las Misiones Familiares a nuestros hermanos de todo el mundo, ha sido una tarea gratificante. Deseamos que esta semilla sembrada, dé sus frutos en el futuro…. Se esparcieron las semillas… la Mater se encargará del resto…

Fruto de la comunicación al servicio de la vida real

El haber llegado a participar en el Jubileo con las Misiones Familiares, tiene un gran responsable: es el equipo de Schoenstatt.org. Sin la colaboración, apoyo y difusión que hizo Schoenstatt.org no se hubiera logrado que las Misiones Familiares se conozcan en todo el mudo. Un simple ejemplo: estábamos en el stand de las Misiones Familiares, y se acercaron algunos ecuatorianos diciendo que tenían noticias de las misiones por unos compatriotas que habían ido a la Argentina (Pablo y Cristina Terán) a conocer las Misiones Familiares y que después de la visita a la Argentina habían fundado las Misiones Familiares en el Ecuador. Al rato nomás aparecieron los Terán y nos dimos un fuerte abrazo. Agradecieron por las atenciones y consejos brindados en su visita a nuestra ciudad para conocer las Misiones Familiares y compartir un día con nuestros misioneros. Hoy están preparando la cuarta misión. ¡Realmente fue una gran alegría poder encontrarnos con nuestros hermanos ecuatorianos! Y todo esto surgió porque Pablo había leído una nota en Schoenstatt.org sobre las Misiones Familiares y te escribió. Y nos reenviaste el mensaje.

Lo que pueden las comunicaciones ¡cuándo son atendidas y correspondidas!

También tuvimos oportunidad de encontrarnos con nuestros hermanos misioneros paraguayos que nos ayudaron en la fundación de las Misiones Familiares en la Argentina. Ellos habían recibido la posta de las Misiones Familiares chilenas, que fueron creadas por inspiración del P. Hernán Alessandri. Como verás todo esto se realiza gracias a la vinculación… Así que vaya nuestro agradecimiento por todo lo que el equipo de Schoenstatt.org realiza por las Misiones Familiares y su difusión.

Centrarnos en Cristo y des-centrarnos de nosotros mismos

Nos parece que las Misiones Familiares son una parte de la gran misión que es Schoenstatt. El mensaje de Schoenstatt es la gran misión para el mundo de hoy: lograr la formación de un hombre nuevo en una comunidad nueva, tal como lo propuso desde el inicio el Padre Kentenich. Para ello, y como dice el Papa Francisco, debemos cambiar muchas cosas pero fundamentalmente debemos cambiar nuestro corazón para que el mundo cambie y sea mejor.

Por eso comentábamos la utilidad de tener un espacio para todas las Misiones de Schoenstatt, indicando mensualmente las fechas y lugares en los que se realizan y así poder rezar por ellas. Es una manera de unir tareas y esfuerzos, algo tan difícil de hacer en Schoenstatt (pero no en Schoenstatt.org). Quizás por eso el Papa nos habló de centrarnos en Cristo y descentrarnos de nosotros mismos y del ego personal.

El Papa Francisco: “aconsejándonos de una manera paternal… como el verdadero Padre, que lo es de todos nosotros”

Del encuentro con el Papa Francisco nos quedaron muchas cosas, todas muy valiosas: los vínculos, el reconocimiento al Padre Kentenich y a su obra de Schoenstatt, el descentrarnos, dejar de ser el centro de las cosas y dar su lugar a Cristo, en la Mater que tiene en su habitación y que toca y saluda al levantarse, en la misión apostólica, en no quedar “peinando ovejas”. Y por supuesto que hay más, pero nos quedamos con la sencillez y la alegría de su mensaje, con la manera simple y humilde en lo que transmitió. Parecía que estábamos en una charla de amigos, en una mesa de café o en una ronda de mates, donde con un lenguaje campechano, informal, contaba sus experiencias y vivencias, aconsejándonos de una manera paternal, como el verdadero Padre que es de todos nosotros. ¡Fue el gran regalo del jubileo!

Nuevamente, muchas gracias por todo lo que hacen en Schoenstatt.org por las Misiones Familiares. Y de ahora en más, por todas las misiones de Schoenstatt.

¡Esperamos encontrarnos en alguna misión!».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicado el In Schoenstatt en salida

Las Misiones Familiares, parte de la misión que es Schoenstatt

ARGENTINA, Lilita y Carlos Ricciardi/mda. Fue en el año 2001. Carlos y Lilita Ricciardi viajaron desde la Argentina a Schoenstatt, en Alemania, con el sueño de peregrinar al Santuario Original y de compartir su experiencia en las Misiones Familiares. Lo primero lo lograron, escuchando y viendo lo mucho que se les mostró; pero para contar de sus vivencias solo les quedó una conversación en la redacción de Schoenstatt.org, que entonces estaba en Schoenstatt; no hubo ninguna otra muestra de interés en escuchar sus experiencias y su inquietud. Trece años más tarde, el viernes 24 de octubre, por invitación oficial de los organizadores del jubileo 2014 presentaron las Misiones Familiares en el Consejo Pontificio de la Familia, después de haberlas ofrecido en la Carpa de la Cultura de Alianza, “Familia”, en Schoenstatt.

(más…)

5 Responses

  1. pablo d'amico dice:

    Hola Amigos, gracias por compartir sus experiencias de Belmonte y del Santuario Original. Soy un misionero de los lugares de trabajo en el Macrocentro de BA por una iniciativa surgida (alla por 2005 apx en Santa Catalina con el P Rafy Braun)y quedo conectado a Schoenstatt.
    Me podran contar mas de estas Misiones Familiares ?
    gracias!!!

  2. HMA - Argentina dice:

    Felicitaciones a todas las misiones familiares del mundo, que están creciendo maravillosamente. Muchas gracias a Lilita y Carlos por compartir esta hermosa experiencia. Todos los años los acompañamos con nuestras oraciones y aportes al Capital de Gracias mientras misionan. En cada lugar la gracia actúa a su manera, con sus colores y melodías propios ¡esa es la gran riqueza de Schoenstatt, encarnarse en cada lugar y dar flores y frutos originales para engalanar el Jardín de María, el Jardín del Padre!
    Contribuyamos todos para que las misiones familiares construyan aquellas islas de familias santas con las que soñó el Padre y Fundador, que lleguen a ser un archipiélago y luego un continente firme. ¡Es la misión de Schoenstatt al servicio de la Iglesia y del mundo!

  3. Monina Crivelli dice:

    Me uno totalmente al P. Javier Arteaga en sus felicitaciones y su aclaración. Es hora de que nos abramos a la fidelidad creadora y dejemos de adueñarnos de las corrientes de vida, que surgen en cada lugar con su impronta y riqueza propia, y por algo es así. Lo mismo pienso de la Federación de Familias, antes de Matrimonios, a la que desde Alemania obligaron a cambiar por Familias porque en alemán no existe la palabra «matrimonio», simplemente. Eso sí que me parece totalmente inorgánico, o como dice Francisco (nunca mejor dicho) funcionalistas. Según este criterio no podríamos hablar de "filialidad" porque, como afirmaba el P. Horacio Sosa, no se encuentra en el diccionario. Un vez más, felicitaciones a todas las Misiones Familiares del mundo, que salen al encuentro del hermano, como nos pidió el Papa y nuestro Padre y nos exige nuestra misión.

  4. P. Javier Arteaga dice:

    Felicito al matrimonio Ricciardi por este excelente testimonio de las Misiones Familiares que se realizan en 5 diócesis de la Argentina y próximamente en la 6ª. A lo dicho por ellos quiero agregar que la participación en las mismas es abierta, SI, también participan hermanos que no son del Movimiento. Es importante decir que en varias oportunidades han sido los párrocos quienes nos han convocado a misionar en sus ciudades, y muchas veces gente del lugar misionan con nosotros. Aunque parezca obvio hay que decirlo: las Misiones Familiares están al servicio de la parroquia donde se misiona y colaboran con los objetivos de la pastoral de la Iglesia local. Es una alegría ver como las Misiones Familiares, participando en un mismo carisma del Padre Fundador, adquieren en cada país rasgos originales que nos enriquecen.

  5. Juan Enrique Coeymans Avaria dice:

    Es una alegría que la Misiones Familiares Católicas, fundadas por el Padre Hernan Alessandri en Chile a fines de los 70 , se hayan ido propagando por diferentes países (Paraguay, Argentina, España, etc). Sin embargo me queda una espina clavada en el corazón: en Chile se siguen llamando y siendo Misiones Familiares Católicas, porque el espíritu con que se fundaron iba en la línea del tercer fin de Schoenstatt: la Confederación Apostólica Universal. Desgraciadamente en algunos países se les está llamando Misiones Familiares de Schoenstatt y en algunos ( al tenor de lo que aparece en este artículo), simplemente Misiones de Schoenstatt.
    Hay una tendencia inconsciente en nuestra querida Familia de Schoenstatt, de olvidar el tercer fin, el que ayudemos a coordinar las fuerzas apostólicas de la Iglesia. ¿Puede alguien pensar que llamándose Misiones de Schoenstatt van a venir a participar las personas de otros Movimientos o simplemente de Parroquias, cuando no son schoenstattianos? NO. NO van a participar, y con eso matamos una iniciativa que surgió por lealtad a nuestro fundador y a San Vicente Pallotti, el santo olvidado, cuarto punto de contacto denominó nuestro fundador. Aun es tiempo de que cambiemos y las hagamos de verdad Misiones Familiares Católicas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *