Publicado el 2014-07-30 In schoenstattianos

El obispo Claudio Giménez es elegido el Amigo del año

PARAGUAY,  Última Hora. La Cruzada Mundial de la Amistad distinguió el 27 de julio a monseñor Catalino Claudio Giménez Medina, obispo de Caacupé, al culminar la misa en el Santuario Nacional de Caácupé. El obispo Claudio Giménez  – miembro de los Padres de Schoenstatt – promociona el valor de la amistad en las misas dominicales de Caacupé, destacaron.

 

 

El Amigo del año nació en Puerto Pinasco el 25 de noviembre de 1940. 17 años y 8 meses después, en la misma ciudad chaqueña, el doctor Artemio Bracho creaba el Día de la Amistad.

Durante la ceremonia de distinción, el obispo que preside la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) agradeció que lo hayan tenido en cuenta y resaltó la importancia de la amistad en el trato personal, como Jesús, “nuestro amigo del alma”.

Artemio Bracho comentó que el reconocimiento puso muy contento a monseñor Claudio Giménez, que inclusive invitó a los miembros de la Cruzada Mundial de la Amistad a pasar a su casa para tomar un “suculento desayuno”.

Su trayectoria, su buen comportamiento como sacerdote y obispo y “su vida ejemplar” valieron para que la Cruzada Mundial lo escogiera como el Amigo del año, justificó Bracho.

30 de julio: Día internacional de la Amistad

Historia. El 27 de julio de 2011, la Asamblea General de las Naciones Unidas fijó el 30 de julio como el Día Internacional de la Amistad.

Esta fecha es imborrable para Bracho y para miles de paraguayos. “Ese día, por 192 votos se instauró el día, fue unánime. “Chemo py’a pirî upéa”, dijo Bracho al describir en guaraní su emoción.

El impulsor del Día de la Amistad instó ayer nuevamente a todos los paraguayos a aprender a vivir en amistad. “Estamos cansados de tanta muerte, accidentes, de tantas barbaridades que ocurren en nuestro país, donde no se puede vivir más en realidad”.

La receta del presidente de la Cruzada de la Amistad para vivir el próximo miércoles 30 de julio es simple: “poner amor”, ante tantas discordias que separan a los hombres. En el Día del Amigo se programan varios festejos.

Fuente: Diario Ultima Hora-Paraguay. Con permiso.

Enviado por Ramón Marini, Paraguay

Felicitaciones, Mons. Claudio, por parte de la redacción y los usuarios de schoenstatt.org, y feliz Día de la Amistad a todos nuestros amigos de schoenstatt.org.

Y… ¿Quién es su amigo del Año?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicado el In schoenstattianos

El obispo Claudio Giménez es elegido el Amigo del año

PARAGUAY,  Última Hora. La Cruzada Mundial de la Amistad distinguió el 27 de julio a monseñor Catalino Claudio Giménez Medina, obispo de Caacupé, al culminar la misa en el Santuario Nacional de Caácupé. El obispo Claudio Giménez  – miembro de los Padres de Schoenstatt – promociona el valor de la amistad en las misas dominicales de Caacupé, destacaron.

 

 

(más…)

4 Responses

  1. Ana Adrogué de Cambacérès dice:

    Felicitaciones Monseñor Claudio!!!Que la Mater lo bendiga!!!!

  2. Juan Enrique Coeymans Avaria dice:

    Muy merecido premio. EL querido Padre Obispo, es un hombre de paz y amistad, un auténtico hijo de nuestro fundador. Ha sido siempre así, desde joven cuando lo conocí.Pero no de la paz de los cementerios, sino la paz de los que suben cerros y transpirando y rasmillados llegan a la cumbre. Un gran abrazo de felicitación.

  3. HMA - Argentina dice:

    ¡Felicitaciones, Mons. Claudio! La amistad es una forma privilegiada de poner en acto la cultura del encuentro, tan querida por nuestro Papa Francisco. Que es también cultura de alianza. Que este premio nos estimule a todos a dar cada día algún paso en esta dirección, para que este año sea para Schoenstatt un año de gracias en la conquista del Cor Unum in Patre.

  4. MPL dice:

    Feliz día de la amistad a todos los lectores de esta página. Recuerdo a muchos amigos. Los que me miran desde el cielo y los que siento cerca en el corazón. Lo bueno de los verdaderos amigos es que no llevan cuenta de nuestras acciones: si no les llamamos o escribimos siguen ahí; y si nos encontramos con ellos, es como si el tiempo se hubiera detenido. Hace poco me visitó una amiga de la universidad a la que hacía treinta años que no veía, pero nos reconocimos al instante – solo el color de nuestro pelo había cambiado, ahora somos las dos más rubias. Empezamos a hablar como si nos hubiéramos visto el día anterior. Así son los vínculos. Gracias por inventar este día.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *