URUGUAY, Gonzalo Rodríguez. Los misioneros de la Campaña de la Virgen Peregrina, junto a muchos otros peregrinos, llegaron al Primer Santuario Filial de Schoenstatt con la emoción de un día especial…..aún con el recuerdo fresco de la visita semanas atrás en Peregrinación al de Santa Maria, RS Brasil, para conocer la vida y lugares de Joao Luiz Pozzobon in situ, recorrer sus caminos y pueblos que lo llevaron a crear la Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina.
El día estaba anunciado como nuboso y frío, pero aún antes de iniciarse la misa solemne mostró un sol radiante y calor. El Santuario estaba totalmente adornado de flores en su estructura, y el parque en consonancia esperaba este día con todas las plantas haciendo gala de la primavera en ciernes.
La mano y la lapicera
A las 11 hs. se inició la Misa… y las palabras del sacerdote comenzaron a escucharse en silencio, que sólo interrumpían las aves como queriendo hacerse partícipes de tan especial momento. La mano y la lapicera… de eso se trató la homilía. ¿Quien escribe, la mano o la lapicera?… la mano sin lapicera no puede lograrlo, y la lapicera por sí misma nada logrará hacer.
Así es Dios con María, porque así definió que fuera: escribir la historia a través de María. Y así con cada uno: escribir nuestro pedacito de historia, la de cada uno y la de los demás que nos rodean, no sólo a través nuestro, sino con nosotros… tal cual lo establece en la Alianza de Amor el “Nada Sin Ti, Nada Sin Nosotros”.
La primera misionera de la Campaña en Uruguay fallecida el 18 de octubre de 2014
Luego de la homilía la Campaña de la Virgen Peregrina le hizo un regalo a la Mater: una coronita para la imagen insigne de la Campaña peregrina…una demostración de afecto y ternura con quien está siempre pendiente de sus hijos… y aprovechando el momento reafirmar la oración confiada para que la Mater disponga también en la capital, Montevideo, de su santuario.
Reforzando una vez más que si la semilla muere da mucho fruto, al terminar la misa el sacerdote indicó que sólo iba a poder quedarse un momento a compartir, ya que desde hacía mucho tiempo estaba muy enferma la señora que tenía la PRIMERA IMAGEN PEREGRINA DE URUGUAY, la sellada con el Nro. 1, y ese mismo día en la madrugada, el propio 18 de octubre, falleció rumbo al encuentro eterno de la Mater en su camino a recibir las palmas de la victoria junto a Dios para siempre.
La vasija rota
La tarde transcurrió con alegría y la presencia de la celebración en Schoenstatt en vivo a través de una pantalla gigante, para más tarde realizar un Rosario de Luz.
Con mi familia nos retiramos antes, y al despedirnos de una Hermana de María en el Santuario, mi hijo menor chocó contra la vasija de arcilla que recibía los pedidos de oraciones hasta ese día en el Santuario… la misma se cayó y se rompió en pedazos… en medio de su desconsuelo y el nuestro, un señor mayor, con lágrimas en los ojos, dijo que la función de la vasija ya había terminado, porque esos pedidos, en manos de la Mater y en ese día tan especial, ya habían llegado a su destino final…
Fue lindo haberlo vivido, para poderlo contar
Así terminó un día muy cargado de acontecimientos, espiritualidad y por encima de todo, bendiciones, porque el amor con amor se paga. Ya iniciado el regreso, todos venían rumiando lo vivido. Y los comentarios reflejaban una sola cosa, como dice una popular canción de un autor uruguayo: “…lindo haberlo vivido, para poderlo contar” y siguieron cantos y alabanzas de distintos grupos del Movimiento.
