Lima Perú

Publicado el 2024-01-09 In Vida en alianza

Un compromiso sacerdotal con el santuario

PERÚ, P. Alberto Celis •

Los sacerdotes diocesanos de la Federación de Sacerdotes de Schoenstatt asumimos durante el año 2024 la responsabilidad de celebrar todos los domingos la santa Eucaristía en el Santuario en el distrito de la Molina, Lima. —

De esta manera contribuimos a que nuestro santuario esté abierto a la familia de Schoenstatt, pero también se convierta en una fuente viva donde se pueda celebrar la fe en familia.

El domingo 7 de enero, Fiesta de la Epifanía del Señor, el P. Alberto Celis celebró así, la Misa en el Santuario de Schoenstatt. Le acompañó el Pbro. John Leener Jiménez Salirrosas, un sacerdote joven, ordenado hace cuatro años, que ama desde seminarista a la Mater. Este domingo peregrinó al santuario de Schoenstatt y concelebró la misa dominical.

bendición

La bendición del matrimonio

En esta misa, se bendijo a un matrimonio en su aniversario de bodas. “Pero antes les pedí que ellos me bendijeran a mí y recen por mi sacerdocio”, comenta el P. Alberto Celis. “Soy un sacerdote feliz de tener a la Mater en mi corazón y en mis acciones. Aun a pesar de mis contradicciones y pecados. Pero pongo mi Capital de Gracias siempre a los pies de Nuestro Señor Jesucristo y nuestra Madre y Reina tres veces Admirable de Schoenstatt. Este año cumplo 15 años de fidelidad a nuestra Madre la Iglesia Católica”.

bendición

Un domingo en la vida de un sacerdote feliz

“También celebré con mucha fe en la parroquia San Pedro de Ancón donde soy vicario parroquial. Tuvimos en la mañana dos misas temprano, a las 8 horas la que celebré yo, y a las 11 horas la que celebró el padre Carlos con Reyes Magos y obsequios para los niños. Despues fui al santuario de Schoenstatt para la misa a las 12:15 h., porque me toca celebrar los primeros domingos de mes en el Santuario de Schoenstatt en la Molina. Por la tarde y por la noche tuvimos misa a las 17:00 h. donde el padre Carlos la celebró y yo a las 19:00 h. en la sede parroquial, compartiendo y creciendo en la fe de la misma manera con las familias y sus hijos”.

un sacerdote feliz

Un domingo en la vida de un sacerdote feliz

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