COSTA RICA, Sergio Sánchez •
La Alianza de Amor con María es la forma original que tiene Schoenstatt de vivir la alianza bautismal. En ella se expresa y se garantiza nuestra alianza con la Santísima Trinidad. Entendida así, es «la fuente de la vitalidad y el centro de la espiritualidad de Schoenstatt», el corazón de Schoenstatt. Y hoy en particular en el Santuario Familia de Esperanza se pudo vivir esa vitalidad. —
Desde muy temprano, monitores y miembros de los grupos de la Pastoral del Santuario trabajaron en todos los detalles para la gran fiesta; una fiesta a la que estaban invitadas nuestra amada Madre y más de 100 personas.
Iban llegando vestidos de blanco para el momento más esperado de todo un año de formación. Qué día tan esperado en sus corazones, allá donde pusieras la vista se respiraba un día de Alianza de Amor. Un grupo era de la diócesis de Alajuela, otro de la diócesis de Ciudad Quesada (San Carlos), otro de la recién creada Zona de Heredia en la Arquidiócesis de San José; los otros grupos eran de San José. Un par de matrimonios son hondureños (Sampedranos, San Pedro Sula), pero viviendo en Costa Rica; también un matrimonio que vive actualmente en Panamá (ella de Burundi), un matrimonio de la diócesis de Puntarenas. Un par de ellos son de grupos del proyecto de Matrimonios Jóvenes.
Como aquellos congregantes en el pequeño santuario del valle de Vallendar
El padre José Luis, asesor del Movimiento de Schoenstatt de Costa Rica, nos recordaba durante el rito, cómo los primeros congregantes que sellaron su Alianza de Amor hace 108 años con la Virgen Maria, lo hicieron en un pequeño Santuario, exactamente igual al que hoy los recibía en Santa Ana, San José de Costa Rica.
Fue un momento hermoso para todas estas parejas que, una a una, fueron pasando frente a la Santísima Virgen y confirmaban junto al padre Kentenich esta Alianza. El “quedamos en esto, permanecemos fieles…” se repetía una y otra vez. Ella estaba ahí con su mirada amorosa, Ella estaba ahí recibiendo sus corazones y entregado el suyo. Ese es el amor de una madre que se entrega por completo por sus hijos. Hoy fue un día para confirmar que este pacto con Ella nos llevará a lo largo de nuestras vidas a realizar diariamente un intercambio de corazones, bienes e intereses.
Una alianza para toda nuestra vida
Hoy el santuario Familia de Esperanza, se vistió de blanco; hoy nuestro amado lugar de gracias era testigo de cómo muchas parejas confirmaban su amor por la Virgen y el compromiso de seguir siendo un Movimiento que seguirá transformando la Iglesia, somos un Schoenstatt en salida y hoy todos los que compartimos este momento lo confirmamos, salir a conquistar más corazones para ella, y hoy era el día que sus corazones fueran conquistados.
Con un rosario, y la Santa Eucaristía cerramos un día lleno de amor. Todos sellamos nuestra Alianza de Amor con la Santísima Virgen Maria y le pedimos con nuestro corazón que Ella nos conduzca a una Alianza con Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.
Con el corazón agradecido y con la firme convicción de que vivir enteramente esta alianza de amor nos conducirá por una vida de santidad, salimos del lugar de gracias, no sólo con una medalla en nuestro pecho, sino con una alianza para toda nuestra vida.
