ALEMANIA, Hna. M. Elinor Grimm/mlh. En torno al 16 de julio, fecha muy importante para Schoenstatt – en este día el Padre José Kentenich fundó en Dachau la Obra Familiar y el Instituto de los Hermanos de María – se produjo un inesperado encuentro internacional en la plaza de llamada del lugar conmemorativo del antiguo Campo de concentración de Dachau.
La Hna. M. Isabel, de Brasil – responsable de las chicas de países de habla hispano-portuguesa que hacen el “Tiempo de Schoenstatt” en Schoenstatt – fue invitada por la Hna. M. Elinor Grimm (que voluntariamente hace de guía en Dachau), a visitar el memorial. Allí está la imagen de la Madre, Reina y Victoriosa tres veces Admirable de Schoenstatt, la “Reina del Campo de Concentración”. Cuenta la Hna. Elinor:
“Llegaron, desde las barracas, un grupo de mujeres. Eran de las diócesis de Augsburgo y Munich, acompañadas por la Hna. M. Linda. Ellas acabaron de volver de la Sala de Seminarios y querían renovar la entrega del cetro a la MTA, el mismo que le regaló, como don de coronación, la Liga Apostólica de mujeres en 1992, cincuenta años después del día de la fundación de los Hermanos de María y de la Obra Familiar. Nos alegramos por este encuentro inesperado después de un día intenso en Dachau”.
Un grupo internacional
El grupo que acompañó la Hna. M. Isabel estaba integrado por algunos miembros de la Federación de Mujeres, dos Hermanas de María argentinas que desde hace tres años mantienen la adoración eucarística en el Santuario Original, y que dentro de unos dos meses regresarán a su patria, y las chicas del “Tiempo de Schoenstatt”.
El día anterior, durante el viaje a Munich, hicieron una escala en la basílica de Ingolstadt y en el Canisiushof (Kösching), en el Santuario del Paralelo. Las chicas estaban muy interesadas y receptivas acerca del paralelo Ingolstadt – Schoenstatt.
Sigue la Hna. Elinor: “Querían que se cumpliera en ellas lo que el Padre Kentenich escribió en un telegrama enviado el 21 de julio de 1968, con motivo de la colocación de la piedra fundamental del Santuario: ‘Que las gracias originarias del paralelo fluyan y sean fecundas abundantemente. J.K.’”
Algo de esto sintieron también los peregrinos de la Argentina cuando hicieron un recorrido por el terreno del Santuario de Koesching el domingo 17 de julio.
“Nombres, en lugar de números”
También en las visitas guiadas comunes en Dachau, cuenta la Hna. Elinor, siempre hay profundos encuentros. Cuenta de uno de ellos: “También en julio tuve una hermosa vivencia internacional en el memorial de Dachau. Acompañé a un grupo de estudiantes de doce países. Los jóvenes, premiados por el gobierno alemán por su destacado rendimiento en el estudio del alemán como idioma extranjero, eran muy receptivos. El profesor responsable quiso que el cierre de la visita se hiciera en la Iglesia de la Reconciliación. Así, en el programa del seminario hubo lugar para un valioso intercambio. Además pude indicarles el Libro de la Memoria “Nombres, en lugar de números”, que estaba allí. Me alegré al ver que ahora las páginas sobre el Dr. Fritz Kühr están inmediatamente después de las del Padre Kentenich”.
