CHILE, Marcelo y Marisol Vergara. Entre el sábado 17 y el sábado 24 de enero se realizaron por quinta vez las Misiones Familiares del Instituto de Familias, Región Chilena. Asistieron 7 familias de cinco cursos distintos con un total de 66 participantes entre matrimonios, hijos y amigos. Estas misiones se realizaron en la comuna de Marchihue ubicada a 180 km. al sur de Santiago.
Marchihue es una localidad rural, agrícola y rodeada de las mejores viñas de Chile. Su población alcanza los 7.365 habitantes.
En esta ocasión, nos alojamos en el Colegio las Américas ubicado en el centro de la ciudad. Allí pudimos descansar, alimentarnos y además fue el centro de operaciones.
Con el fuerte apoyo del párroco, Padre René, nos repartimos para misionar en cuatro sectores de Marchihue: Cadenas, Villa La Dehesa, Villa Amanecer y Villa 2000.
El lema de las misiones Marchihue 2015 fue “Familia misionera, iglesia en cada tierra”.
Salir a las periferias
Siguiendo la invitación del Santo Padre de “salir a las periferias”, todas las actividades incluso la Sta. Misa, se realizaron en las villas. Las diferentes tareas estuvieron a cargo de las familias misioneras y de los líderes de las respectivas villas. Se realizaron talleres para niños, jóvenes y matrimonios, donde primó el tema de ser testimonio de Cristo.
Hay que destacar la peregrinación (7 km. aprox.) que se realizó desde la parroquia de Marchihue hasta el santuario de San Sebastián, en la que participaron muchas personas de la localidad, acompañando con cantos y oración.
Finalmente, las misiones concluyeron con una misa de campaña (en plena plaza) y el show de talentos. Evento musical donde los misioneros agradecen por la recepción y a su vez jóvenes, niños y adultos de la localidad muestran sus habilidades artísticas, cantando, bailando, agradeciendo por la semana llena de alegrías y bendiciones.
De misioneros a misionados
Debemos dar gracias Dios por habernos permitido llevar el mensaje divino. Dar gracias porque pasamos de misioneros a misionados. Gracias a la gente de Marchihue hoy somos mejores personas, mejores padres, mejores familias, orgullosos de los hijos que Dios nos regaló.
“Nos guíe la fe sencilla… invicta en el huracán”.
