ECUADOR, Hna. María Auxiliadora. Quisiera comunicar la gratitud y la emoción profunda de Schoenstatt en Ecuador en el día de ayer 17 de octubre, que se prolonga a hoy, el esperado 18 de octubre de 2010. Ayer, la Familia de Schoenstatt se reunió junto al Santuario de Guayaquil para vivir juntos la apertura del trienio… unidos como Familia local, pero sobre todo como Familia internacional.
La preparación fue algo hermoso. Muchos schoenstattianos trabajaron para hacer posible esta gran hora: preparando el día de Familia, el almuerzo, las carpas, consiguiendo la señal que costó 800 dólares… Un amigo de Aquiles y Laura Guerrero la prestó. Se trabajó en informar, motivar y preparar. Cada día se envió a todos los schoenstattianos un mensaje de la conferencia con una sugerencia para meditarlo. Se colocó una gran pancarta de invitación.
Y ayer llegó el día. La iglesia se llenó con unas 850 personas, de todas las ramas, edades, procedencias.
Vivimos la apertura internacional
Y vivimos la apertura internacional… Nos parecía un sueño que – a casi cien años de la fundación – fuera posible vivir simultáneamente en todos los países, una liturgia, un acto, una procesión. Se celebró la Santa Misa a las 11.15 hs. y enseguida comenzó la transmisión en directo. ¡Qué grata sorpresa que se haya preparado en varios idiomas y de forma que todos podían entenderla y seguirla!
Lo máximo fue que se previóque conociéramos los elementos del trienio todos al mismo tiempo, en cada país, que se proclamaran en ese momento en el que teníamos la posibilidad de estar en sintonía. Que cantáramos juntos. Que rezáramos por primera vez la oración jubilar. Que cantáramos el himno a la Familia pudiendo ver a quienes nos representaban en Schoenstatt, entrando visualmente al Santuario Original.
Yo estaba adelante, para complementar la traducción, junto a Mónica Maruri y los Guerrero, y desde allí podía ver los rostros felices, las sonrisas de los schoenstattianos en las que se leía la misma alegría: ¡qué emoción, estamos en el Santuario Original, unidos a tantos hermanos de otros países, entrando juntos al trienio preparatorio al centenario de nuestra Alianza de Amor!
La ganadora del concurso del logo
Otro regalo gigante fue que el logo haya sido diseñado por una ecuatoriana, María Cecilia Avilés (Chulla) que durante esta gran hora contó cómo lo hizo: fue en el Santuario, la Mater se lo dibujó.
Además veíamos a los ecuatorianos en Schoenstatt, la bandera del Ecuador allá… se nombró a todos los países: todo dio la sensación de estar en el Santuario Original. También en Quito se reunió un grupo significativo para ver la transmisión. Y en Manta peregrinaron todos a la ermita.
No podemos agradecer suficientemente este preludio del 18 de octubre.
Gracias a Dios existen personas que, en Schoenstatt, aquí y en todas partes, se juegan por hacer posible estos milagros de unidad familiar. Gracias al equipo 2014 por todo, por la audacia y la generosidad. Gracias a las excelentes comisiones jubilares de acá, que tienen el espíritu de los primeros. Se crearon estas comisiones:
- Central
- Liturgia
- Economía
- Comunicaciones
-
Adoración
El trabajo es hermoso, con unidad y alegría, agradecido por nuestro Padre y Fundador.
Unidos ahora en este camino al Centenario de Schoenstatt, nos disponemos a la gran Misa de Alianza que se celebrará esta noche en la que atravesaremos el arco de los tres próximos años.
