Publicado el 2010-08-19 In Vida en alianza

Misión Lebu 2010: Con María, misioneros de Cristo hoy

LogoCHILE, Mauricio Donoso. Entre el 25 y el 31 de julio los jóvenes del proyecto Misión Lebu viajaron hasta la provincia de Arauco en la Región del Bío Bío (Chile) para entregar todo el amor y el mensaje de una juventud poseída por el Espíritu Santo, como representantes de la Iglesia Católica que sigue tan viva como siempre en su patria, que pronto cumplirá 200 años. Los guió el lema «Con María, misioneros de Cristo hoy».

 

 


Hace años, un sueño

 MisionerosHace un año, un grupo mixto de jóvenes emprendió la realización de un sueño surgido más allá de la cordillera de Los Andes hace un par de años. Un sueño que nació en el corazón de un joven alemán, que luego de participar de varias acciones apostólicas en Chile durante el año 2007, le propuso a un amigo chileno que juntos realizaran un proyecto misionero en una ciudad del sur de Chile.

En el año 2009 comenzaron las gestiones para dar vida a un proyecto que anhela ser un humilde aporte en una ciudad donde no predomina la religión católica, lo que anima más aún toda la preparación y al equipo mismo. Un desafío, una aventura de amor por la Mater: viajar hasta el fin de la provincia de Arauco, invertir con gusto varios días de las vacaciones, llevar el mensaje de Cristo a todo el pueblo… Pero ¿cómo? ¡A través de los niños!

Los niños de una comunidad llamada Junquillo fueron el puente para que los misioneros se acercaran a la realidad local. Tenían la convicción de contar con la protección, el poder y la gracia del envío de la Mater Ter Admirabilis. Compartieron más de un almuerzo o una canción con los niños: compartieron sus vidas y carencias afectivas y materiales críticas.

Desde Bellavista

Los dos años que se ha realizado la misión, una parte del grupo total partió desde el Santuario de Bellavista, recibiendo el envío apostólico especial de la MTA en su Cenáculo Nacional. Llevaban a Cristo como instrumentos de María.

Entre los años 2007 y 2009 los jefes del proyecto sellaron la Alianza de Amor con la MTA en el Santuario de Bellavista en las respectivas ramas universitarias.

El Padre Kentenich dejó una «pista» para Lebu: una ermita de la MTA

Ermita en LebuEn el camino encontraron una plática del Padre Kentenich de hace más de 60 años, cuando se comenzaba a construir un Santuario en Chile. Aquella plática expresaba concretamente como debían conquistar el Santuario. Ese mensaje del Padre y Fundador hizo brotar mucha vida, mucha motivación para vivir los ideales que hagan de Chile una tierra santa mariana. Son palabras de 1948, pronunciadas en el lugar del Santuario en construcción, en la ciudad de Santa Cruz…

El Padre y Fundador decía el 20 de octubre de 1948: «no sólo Colchagua tiene que llegar a ser una tierra santa mariana, sino que todo Chile tiene que llegar a ser una tierra mariana schoenstattiana».

Motivados por la vida surgida en la preparación del proyecto y confiados en que la Mater Ter Admirabilis quería establecerse en Lebu, durante la misión del año 2009 los misioneros erigieron una ermita de la MTA con sus aportes al capital de gracias. El 26 de julio fue bendecida por el Padre Claudio Soto, entonces párroco de la parroquia Santa Rosa de Lima de Lebu.

Julio de 2010: se hace realidad la segunda misión

Realizando terminación de interior de viviendas de emergenciaDurante los siete días de la misión de este año, fueron muchas las emociones que el grupo vivió como una familia. Comenzaban temprano, a las 7 de la mañana, con la levantada y partida al desayuno en el comedor capilla de Junquillo, junto a la Ermita. Luego un recorrido puerta a puerta por sectores como Lepiñanco, José Miguel Carrera, Eusebio Lillo y Junquillo. A partir del mediodía se reunía a los niños en el almuerzo para luego realizar talleres con jóvenes, adultos mayores y niños en torno al comedor.

Como un gran regalo llegó la invitación del Hogar de Cristo para que los misioneros realizaran trabajos de terminación del interior de viviendas que no lo tenían, en el sector Las Niñas con dos adultos mayores: don José y don Antonio que cariñosamente agradecieron el trabajo realizado por «estos jóvenes enviados por Dios» como decían ellos. Así los misioneros tuvieron la oportunidad de concretar el trabajo espiritual en un aporte material…

La Madre Tres veces Admirable de Schoenstatt ha demostrado con hechos concretos su presencia en Lebu y ha realizado pequeños milagros a quienes la encuentran en su Ermita. Así Ella se ha mostrado una vez más en «la gran misionera» como decía San Vicente Pallotti y como lo actualiza continuamente la Campaña de la Virgen Peregrina.

«Todo por Schoenstatt, Schoenstatt para la Iglesia, la Iglesia para la Sma. Trinidad» PJK

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