Publicado el 2010-06-08 In Vida en alianza

Nuevos misioneros de la Campaña en Rauch

Compromiso misionero, RauchARGENTINA, Mirta y Marcos Sayavedra. El lunes 31 de mayo, coincidiendo con la Fiesta de la Visitación y en un nuevo aniversario del «Tercer Hito en la {cms_selflink page=»historia» text=»historia de Schoenstatt»}», la {cms_selflink page=»la-campana-de-la-virgen-peregrina» text=»Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina «}de Schoenstatt en Rauch, Provincia de Buenos Aires, cuenta con nuevos «pies y manos» que lleven a la peregrina a las familias rauchenses para que Ella siga obrando milagros. La celebración de envío de estos nuevos misioneros se realizó en la Parroquia San Pedro Apóstol, la parroquia del pueblo, y estuvo presidida por el cura párroco P. Roberto Priore.


Compromiso misionero, RauchLos coordinadores de la Campaña, el matrimonio Mirta y Marcos Sayavedra, siguiendo el rito, presentaron a los nuevos misioneros: el matrimonio Fabiola Armani y Mariano Venzon, el matrimonio Mariela Medina y Walter Verea, Gabriela Bacigalupe y su hija Trinidad Petreigne, Graciela Conti y su hija Macarena Carregado, Mauro Fernández, Dora Lippo, Angela, Adela, Fabiana Morales de Novillo, Claudia Calvo de Pontiggia y Evangelina Fredes, quienes sellaron su compromiso misionero acompañados de sus familiares y amigos de la Campaña.

Hacer vida el Evangelio viviendo el Rosario

Como regalo especial que obró la Mater ese día, se contó con la presencia de Mercedes y Fernando Bonorino, quienes a grandes rasgos relataron los comienzos de la Campaña en Argentina, contaron vivencias y expresiones de Don Joao y estimularon a los nuevos misioneros en su tarea.

Compromiso misionero, RauchMercedes y Fernando hicieron entrega de la imagen de la peregrina a los nuevos misioneros, que luego la coronaron con un rosario que les fue entregado por los coordinadores.

Al finalizar la celebración Fernando Bonorino dejó como presente para cada misionero el libro: «Hacer vida el Evangelio viviendo el Rosario» de su propia autoría. El envío de misioneros culminó en el salón parroquial donde se compartió un grato ágape.

 

 

 

 

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