ESTADOS UNIDOS, Carlos Cantú. Solamente quiero compartir esta alegre experiencia. Anoche, Elizabeth y yo fuimos a la instalación de nuestro nuevo Obispo en la Diócesis de Brownsville. Se trata de Mons. Daniel E. Flores. Sólo Dios sabe la razón, pero desde el momento en que recibí la invitación sentí que debía llevar a la Mater conmigo, así que llevé una imagen de la Virgen Peregrina.
Sostuve la imagen a lo largo de la ceremonia. Algunos a mi alrededor hicieron preguntas al respecto y yo les entregué una estampita con la imagen y una oración. Una señora delante mío estaba muy emocionada porque ella se reúne con otras personas para rezar con la Virgen Peregrina. Sus palabras fueron: «¡Ella es poderosa!».
Durante la solemne procesión de entrada yo levanté la imagen para que todos la vieran… Así, Ella fue vista por cardenales, arzobispos, obispos, diáconos y seminaristas. Algunos sonreían, otros hacían una pequeña venia con su cabeza, y uno incluso la bendijo. Durante la procesión de salida, el P. Carlos Zúñiga le lanzó un beso, pero el climax fue cuando nuestro nuevo Obispo pasó… Se volteó hacia Ella, sonrió, extendió su mano para tocar la imagen y dijo «¡Schoenstatt!». ¡Sigo en las nubes, así que alguien debería llamar a un equipo de rescate para que me baje!
Mientras nos acercamos al 2014, debemos ser conscientes de lo importante que es que celebremos Schoenstatt a nivel local: en nuestras parroquias y Centros, diócesis, estados y quizás hasta a nivel nacional. Recemos por esta intención y pidamos muchas bendiciones para nuestro nuevo Obispo en la diócesis de Brownsville, Mons. Daniel E. Flores.
Traducción: María Elena Vilches, Ecuador
¡Felicitaciones, Carlos! Se nota que Schoenstatt se "apoderó" de toda su vida, ya que en todo momento da testimonio de ello. ¡Que la Mater reine en su país y en todo el mundo!