ARGENTINA, Maria Fischer •
Pasó ya un mes desde la última edición de la “Peregrinación de los pueblos”, la peregrinación multitudinaria que hace 40 años, en vísperas del Día de la Madre en Argentina y cerca del 18 de octubre, une la ermita de Hasenkamp y todos los pueblos en el camino de unos 90 kilómetros hacia el santuario de Schoenstatt de La Loma en Paraná. La peregrinación más larga del continente. Miles de peregrinos. Cantos, oraciones, antorchas, banderas, emociones, testimonios, prensa, confesiones, transformaciones… Lo sabemos por tantos artículos compartidos. Sin embargo, hay que estar en La Loma y escuchar para captar que esta Peregrinación de los Pueblos no es un evento, sino una presencia continua en memoria, compromiso y orgullo de toda la familia. —
Entramos al gran predio del Santuario de La Loma, con Tita y Héctor Ríos, amigos y corresponsales de schoenstatt.org desde casi siempre, y mientras los loros dan su concierto de bienvenida, Héctor dijo: “Por aquí entran todos los peregrinos, aquí les recibimos”. La entrada a La Loma es la entrada de la peregrinación de los pueblos. Aquí entran. No dice, “Entraron el 14 de octubre después de caminar 90 km desde la ermita de Hasenkamp, tras 26 horas de marcha”. Dice: “Entran”. Siempre. Desde hace 40 años, cuando empezó con dos jóvenes. A lo largo de los años, esta caminata se ha convertido en una de las muestras de fe religiosa más convocante y multitudinaria del país.
Hablamos con un matrimonio joven de Valle María (localidad a 30 km de La Loma), y hablamos de la Peregrinación de los pueblos. Charlamos con gente de la Federación de Familias, y hablamos de la Peregrinación de los pueblos. Viajamos al día siguiente a Nogoyá, a unos 100 km de Paraná, y los colaboradores jóvenes de las obras sociales de la ermita nos hablan de su experiencia en la Peregrinación de los pueblos. Es omnipresente, es de todos.
“Ya estamos pensando en la Edición 42, donde volveremos a poner lo mejor al servicio de nuestra Madre, para peregrinar como hermanos hacia el Santuario de La Loma”, comentan desde el equipo de organización a pocos días de la llegada de los peregrinos.
La madre peregrina con el santo pueblo de Dios
En cada nueva edición, en vísperas del Día de la Madre, la Mater – la Virgen de Schoenstatt – convoca a miles de peregrinos en la Ermita de Hasenkamp, que unen a pie los 90 kilómetros hasta llegar al Santuario en Paraná, tras 26 horas de marcha. Desde Hasenkamp, hace 41 años, la Madre peregrina se pone en camino hacia el Santuario de Schoenstatt.
Junto a la Madre de Jesús llegan para ofrecer sus vidas, sus oraciones, llegan a descansar, a confiarle la vida de otros, la vida que muchos fueron cargando en la peregrinación, en el silencio y la oración por el camino. Escuchar sus testimonios emociona, conmueve, despierta y anima la fe de muchos.
También peregrinan muchos sacerdotes que en el camino regalan el perdón y la misericordia de Dios por medio del sacramento de la reconciliación. Uno de ellos es el P. Pablo Pérez, director nacional del Movimiento de Schoenstatt en Argentina, que ya lleva cuatro peregrinaciones.
En el santuario, la familia de Schoenstatt recibe a los peregrinos, y todo lo vivido se junta y se ofrece en la Misa celebrada en el altar de peregrinos, este año 2023 por el arzobispo de Paraná Mons. Juan Alberto Puiggari.
La peregrinación de Viviana Biganzoni de Zinoni
Peregrina con la foto de Vivi
Sin embargo, la peregrinación de los pueblos 2023 tuvo un sello especial para la Familia de La Loma.
En la tarde del viernes 13 de octubre, a poco tiempo del inicio de la peregrinación, falleció Viviana Biganzoni de Zinoni, quien con su esposo Héctor, son los Coordinadores diocesanos de La Loma.
Ella tuvo un grave accidente dos semanas antes cuando viajaba a una jornada de la Rama de Madres en Florencio Varela.
Durante esas dos semanas, todas las noches muchas personas de Paraná y de toda Argentina se unían y rezaban por Zoom por la recuperación de Vivi.
Cuando la peregrinación empezó a las 17 hs, Vivi aún vivía, y había peregrinos que llevaban su foto y ofrecían el caminar por ella. En los días previos, había informaciones desde el hospital de Rosario, donde estaba internada y en coma, que decían que lentamente iba a despertarse. Justo el día de la peregrinación, “Vivi se despertó, pero para el cielo”, comentan en la Misa este 11 de noviembre en La Loma, rezando por ella, su esposo y sus hijos.
“Para la familia de La Loma, fue el capital de gracias más grande que nos pidió la Mater”, dijo Tita Ríos. “El sábado 14 terminó la Peregrinación, y comenzamos el velatorio de Viviana, cuyos restos ya habían traído de Rosario. El domingo, día de la madre, fueron la misa y las exequias”.
Capital de gracias para La Loma, Paraná, Argentina, y más allá.
Nos volvemos a encontrar el próximo año, para caminar juntos hacia nuestra Madre, ¡hacia una nueva puesta del sol!️
Video de la llegada de los peregrios (Héctor Ríos)
Colaboración: Claudia Echenique, Tita y Héctor Ríos
