SUDÁFRICA, Bob Cole. La Familia de Schoenstatt de Durban experimentó una gran celebración en la Catedral. El grupo construyó un Santuario Hogar con velas encendidas a los pies del Santuario – muy significativas, más impresionantes y muy de Schoenstatt. La Misa comenzó a las 10.00 H., celebró el Padre Chris, un misionero Africano que trabaja en la Republica Democrática del Congo en la rehabilitación de niños soldados.
El Padre Chris está terminando un curso sobre “resolución de conflictos” en la Universidad de Durban. A pesar de que él es de habla francesa, celebró la Misa en inglés por los lugareños que asisten. Dio a la Familia de Schoenstatt una conmovedora homilía sobre María – fue más que agradable. Al final de la Misa, Bob Cole dio una breve charla de introducción a Schoenstatt. Después fue abordado por numerosas personas que querían saber más y puede ser que haya un seguimiento más tarde. El Padre Chris podría seguir con Johannesburgo en su visita a fines de año o comienzo del próximo.
El apostolado de los laicos y la desmovilización de los soldados después de la guerra
En una conversación privada, el Padre Chris se centró mucho en el Apostolado de los Laicos de Schoenstatt que comenzó después de 1918, con la desmovilización de los soldados desde el frente. No tan sólo eso, sino también la experiencia del Padre Kentenich después de la Segunda Guerra Mundial con los soldados desmovilizados serían también de gran relevancia.
Tal vez nunca nadie apreció el apostolado de los laicos como una parte integral de la rehabilitación y reubicación de los soldados en una sociedad. Pero, considerándolo así, tiene mucho sentido que el Padre Kentenich haya afirmado que la Iglesia necesita cambiar ideas y actitudes para atender a una población fracturada y alterada en el ambiente de la postguerra.
En diálogo con las voces del tiempo
Esto tiene también gran influencia en la obra que el Padre Chris está realizando con la rehabilitación de4 los niños soldados en África Central. Fue así como la celebración en Durban tuvo algunas consecuencias imprevistas e inesperadas. Tal vez el Centro de Burundi puede ofrecer algo de ayuda y orientación en el futuro.
“La Santísima Virgen estuvo definitivamente en nuestra celebración, pero en la actualidad no veo el camino a seguir. Estoy seguro que Ella clarificará su misión para nosotros que surgirá en su momento a raíz de las celebraciones del sábado”, comentó uno de los dirigentes…
Después de la Misa hubo una barbacoa para todos los que asistieron… El pequeño grupo de Durban hizo maravillas. En definitiva, un gran día.
Original: Inglés – Traducción: Carmen M. Rogers, Santiago, Chile
