mkf. «Comienza la Cuaresma y la sensación que tenemos es extraña; parece que hace nada hemos celebrado el Nacimiento del Señor y ya estamos a punto de acompañarle camino al Calvario. Queremos, como cada año, profundizar en los tres pilares que la Iglesia nos regala para vivir este tiempo». Así comienza la motivación para la Cuaresma que el Padre Carlos Padilla, España, les ofrece a todos los lectores de schoenstatt.de.
Un número creciente de personas disfruta, domingo a domingo, de las prédicas dominicales del Padre {cms_selflink page=»predicas-carlos-padilla» text=»Carlos Padilla»}. Para poder comenzar bien el tiempo de Cuaresma, este año ofrece una motivación para la Cuaresma, un tipo de retiro virtual para el miércoles de ceniza y los días posteriores. Recuerda los tres pilares de Cuaresma – limosna, oración y ayuno – vinculándolo a acontecimientos actuales como el terremoto en Haití, y aplicando los mensajes de la Biblia y de la Iglesia a los desafíos de la vida diaria:
«La limosna es el amor que tenemos que dar y que con frecuencia nos guardamos. La ausencia de gestos de cariño, que no prodigamos por pudor o egoísmo, es lo que nos distancia de Dios, que es amor. Es el tiempo que malgastamos y no reservamos para los que más requieren nuestra compañía y amor sincero, ése es nuestro tiempo peor invertido. Pidámosle a Dios que nuestros propósitos de limosna pasen por preguntarnos: ¿Quiénes son aquellos que más necesitan nuestro amor? No es necesario ir muy lejos, basta con volver la mirada hacia nuestra familia, mirar nuestro círculo de amigos y conocidos. La caridad es el distintivo de la Cuaresma».
Siempre es un agrado recibir noticias desde otros lugares donde está la familia, y más aun cuando son estos impulsos que alegran el corazós. Tuve la oportunidad de conocer al Padre Carlos en Schoenstatt hace un año y de verdad no dudo en sus palabras y en lo certero que puede llegar a ser.. Gracias por este impulso para comenzar la Cuaresma! Sin duda es la m,ejor manera de comenzar este camino donde cada uno de nosotros acompaña a Jesús. ¿Quien es uno de los que más necesita nuestro amor? es el propio Jesús, ese Jesús que está en nuestra oración, el que está en la calle, en nuestra familia, en todas partes, es él quien necesita que le entreguemos nuestro amor durante este tiempo.
Aprendamos a ver a Jesús en cada rostro que se encuentra en nuestro camino.
Mi oración por la familia desde Bellavista.