ARGENTINA, diócesis de Morón, por Rosita Ciola •
Hace diecisiete años se bendijo en El Palomar, diócesis de Morón, la 1° ermita de la MTA de ciegos en el mundo. Ella escogió este lugar, este barrio, este momento, para establecer aquí su trono de gracias y quedarse para siempre con nosotros.
Mucha vida fecunda ha transcurrido desde entonces y continúa hoy día en torno a este lugar tan bendecido por el amor de Dios y la presencia de la Mater.
En medio de su pueblo
La ermita se encuentra en una esquina muy transitada por automovilistas y por la gente que a pie, pasa de ida o vuelta a su trabajo, a la escuela, o cuando sale de compras, o realiza sus caminatas habituales; y este suele ser para muchos un lugar de remanso, de paz, en medio de un mundo tan ajetreado, aquí detienen por unos momentos la marcha para saludarla, ofrecerle su día, agradecer alguna gracia concedida, pedirle por alguna necesidad, o simplemente van a darle un beso o decirle “Madre te amo”; Ella siempre está allí, dispuesta a recibir a todos sus hijos, bendecirlos, confortarlos, acompañarlos.
Dar gracias por su presencia en la ciudad
Hoy, 4 de diciembre, víspera de un nuevo aniversario, misioneros, vecinos, amigos quisimos celebrar junto a la Mater el regalo de su presencia en nuestra ciudad.
Comenzamos con el rezo del Santo Rosario, acompañados por el Padre César Tauro perteneciente a nuestra vecina diócesis castrense; a medida que íbamos desgranando las cuentas, las personas que seguían llegando se sumaban a nuestras plegarias, mientras el atardecer nos regalaba su magia en sus tenues rayos de sol, uno de los pocos que brillaron en este día tan gris y así nuestra oraciones iban subiendo al cielo como una exquisita fragancia que emanaba de esos corazones echados con toda confianza y amor a los pies de la Madre para que Ella recoja todo lo que hay en ellos y lo eleve al Padre.
A continuación, la Santa Misa y así, la plaza Alas Argentinas se convirtió aún más en un pedacito de cielo cuando el Padre Casimiro de nuestra diócesis de Morón y el Padre César comenzaron la celebración.
La “causalidad” hizo que el aniversario de nuestra ermita estuviera dentro de la novena de las fiestas patronales, por lo cual, llevamos una imagen de Nuestra Señora de Loreto, que rodeada por imágenes de la MTA encabezaron este gran día de fiesta. Todos compartimos la oración de la novena para finalizar luego con la pequeña consagración y cantos muy emotivos dedicados a María.
Flores para ella, alimentos para sus hijos más pobres
Como no puede ser de otra manera, en ningún cumpleaños pueden faltar regalos ni cosas ricas, la Mater recibió muchas flores que adornaron “su casa” y todo el amor de sus hijos que no solo se reflejaron en las oraciones sino también en alimentos no perecederos para sus hijos más necesitados. Después de compartir unos deliciosos bocaditos dulces, se repartió a modo de souvenir la Cruz de la Unidad, como un deseo fervoroso para nuestro pueblo, en este momento tan particular para la Patria.
Reconfortados por el Rosario, la Palabra, el Cuerpo y la Sangre de Cristo y por este maravilloso encuentro fraterno regresamos a nuestros hogares con el corazón renovado y pleno de alegría.
Madre querida, como siempre te pedimos que hagas valer tu cetro, gobierna y cuida esta ciudad y a todos sus habitantes, ¡Madre Admirable, te necesitamos, no retires nunca tu sol de nuestro cielo!
Gracias Rosita por la Nota y tus palabras !!!
Todos necesitamos este 8 de Dicimebre visitar a la MTA en algun Santuario (como sea, corriendo en el medio de un dia de compromisos y obligaciones), en mi caso en calle Echeverria (Belgrano).
Y tan bien hace dedicar minutos (nada mas) a nuestra Vida Espiritual.
Gracias por compartir !
¡Felicidades a la diócesis de Morón! Una amiga la descubrió «por casualidad» y quedó muy impresionada por la imagen: desconocía la Peregrina de los ciegos. Que ese bendecido lugar sea refugio seguro y atraiga más corazones a la Mater.