ALEMANIA, Wolfang Fella. Una pequeña corona acompañaba a todos que llegaron a la Fiesta anual del Santuario de Marienhöhe en Würzburg, finalmente llegada la tarde, encontró de nuevo su lugar definitivo en el santuario. En la Santa Misa matinal en la fiesta de Pedro y Pablo el Presidente Diocesano, P. Achim Wenzel explicó por qué precisamente ambos los apóstoles tienen su lugar al lado del altar. Como roca y peregrino reflejan ellos finalmente la diversidad dentro de la iglesia y son con eso también una excelente imagen para los diferentes miembros y los proyectos del Movimiento de Schoenstatt.
La Iglesia con los cambios necesita urgentemente lugares donde se pueda arraigar la fe. En el obispado de Würzburg deberían estar disponibles los centros espirituales, entre los cuales, p. ej., junto a los conventos y en el futuro también se puede contar con el Santuario de Marienhöhe.
100 Años de Schoenstatt
Después del almuerzo todo giraba entorno a los 100 años de Schoenstatt. Con una sala completamente llena, con cerca de 300 espectadores se representaba un musical por parte de la juventud Femenina. „Sus corazones están ardiendo“ llevando a los presentes a los orígenes de Schönstatt en los años anteriores a 1914 hasta su fundación. Las jóvenes miraban atrás aquel tiempo recorrido – sin embargo buscaban también una referencia que haga estos mensajes actuales hoy en día que las invite a ser heroínas en este tiempo presente. En escenas en vivo aparecieron los “ratones del santuario” así como las “mejores amigas”, y la audiencia varias veces fue invitada a participar bailando.
Continuando con el Jubileo en su segundo polo en Roma, Gerhard Pfenning del Instituto de Sacerdotes Diocesanos, desde el nuevo puesto de información de Belmonte, llamó la atención sobre el Santuario Internacional y el centro Internacional de Schoenstatt en Roma, el mismo que espera a los peregrinos de todo el mundo.
Coronación – Explicación útil para el día a día
Finalmente, después de 2 años de haber peregrinado por los miembros de la Familia Diocesana, la corona se encontraba al centro, sobre un Cojín rojo. El P. Wenzel y los representantes de diferentes agrupaciones prepararon al lado interior y exterior de la renovación de la coronación, que no se muestre sólo como un acto de veneración y devoción de Maria. Querían mostrar de forma concreta la experiencia del día a día, Creer que la Reina coronada puede mostrarnos nuevos caminos y oportunidades aún en situaciones difíciles.
Nombrar necesidades – buscar soluciones y aceptar limitaciones – y, finalmente entregar las inquietudes con el deseo de hacer suyo lo mío: así se presentó el triple paso, al cual luego se invitó a todos a participar, escribiendo en papelitos sus inquietudes personales.
Jubileo: No una mirada hacia atrás, sino un envío hacia adelante
Con cántaros llenos y la corona delante fueron al santuario. Allá el P. Gerhard Pfenning subía al altar para asegurar nuevamente la corona en su lugar. Con la solemne bendición final toda la comunidad presente fue invitada a no sólo mirar atrás, muy por el contrario, a dejarse enviar nuevamente desde el Santuario.
Original: alemán. Traducción: Manuel Huapaya, El Callao, Perú
