Warning: include_once(x_include/xzz-include-einstellungen.php) [function.include-once]: failed to open stream: No such file or directory in /homepages/29/d69818482/htdocs/schoenstatt/news2007/06/7t0647sp-sch-encuentros-en-sonnenau.php on line 10

Warning: include_once() [function.include]: Failed opening 'x_include/xzz-include-einstellungen.php' for inclusion (include_path='.:/usr/lib/php5') in /homepages/29/d69818482/htdocs/schoenstatt/news2007/06/7t0647sp-sch-encuentros-en-sonnenau.php on line 10
Sonnenau, mi hogar
Nachrichten - News - Noticias
 published: 2007-06-19

Sonnenau, mi hogar

Experiencias de una voluntaria mexicana en Schoenstatt

 

Pilger und Praktikanten aus Mexiko in der Sonnenau, mit Monika Weißenberg

Los mexicanos en Sonnenau, con Monika Weißenberg

Mexican pilgrims and volunteers in Sonnenau, with Monika Weißenberg

Pilger und Praktikanten aus Mexiko in der Sonnenau, mit Monika Weißenberg

 

Das kann Spaß machen: Bety und Aleida beim Geschirrspülen

Hay que aprovechar de todo: Bety lava y Aleida seca

Let’s do it the fun way: Bety and Aleida doing dishes

Das kann Spaß machen: Bety und Aleida beim Geschirrspülen

 
Mit einigen Pilgern aus Brasilien

Com unos peregrinos de Brasil

Together with some pilgrims from Brazil

Mit einigen Pilgern aus Brasilien

 
Kinga, Aleida und Elisa

Kinga, Aleida y Elisa

Kinga, Aleida, and Elisa

Kinga, Aleida und Elisa

 
Pilger aus Brasilien

Peregrinos de Brasil

Pilgrims from Brazil

Pilger aus Brasilien

 
Voluntärinnen in der Sonnnenau

Voluntarias en Sonnenau

Volunteers in Sonnenau

Voluntärinnen in der Sonnnenau

Fotos: Aleida Montalvo © 2007

 

 

 

SCHOENSTATT, Aleida Montalvo. Apenas hace dos semanas que vivo en el hermoso valle de Schoenstatt, y ya le puedo decir "mi hogar" a esa hermosa casa llamada Sonnenau.

Desde el momento en el que entré sentí la calidez de una familia. Fui recibida con una rica comida después de dos días de viaje desde mi país, México. Al despertar el primer día, pude ver a los muchos peregrinos que pasaban por la casa: alemanes, chilenos, argentinos, brasileños, paraguayos, irlandeses, mexicanos, suizos, etc. Cada uno llegaba con una felicidad tan grande por poder estar en esta casa tan alegre y cercana al Santuario Original.

Peregrinos que dejan huella

¡Cómo olvidar a la familia Chiapinni, de Chile, que llegó a altas horas de la noche pues se habían perdido, hasta que gracias a un amigo encontraron la Casa Sonnenau!. Poder escuchar sus anécdotas de cómo es el Movimiento en Viña del Mar y cómo juntos construyeron el Santuario de Los Pinos el año pasado... ¡Si supieran cuánto aprendí de ellos! A su partida llegó otra familia del mismo lugar y verdaderamente sentía como si ya los conociera. Imposible olvidar a la gran peregrinación de Brasil donde me acogieron como parte de ellos durante su recorrido. A pesar de la diferencia de idioma se podía sentir el tacto latino y hasta intercambiamos correos para no perder el contacto.

Dos jóvenes de la Argentina también pasaron por aquí, Julieta y Elisa. Estuvieron sólo dos noches, pero al momento de su partida sentí mucho su ausencia. Fue muy lindo ver a Elisa regresar a los tres días porque había le había gustado mucho el lugar. Ella no estaba en el Movimiento en su país, pero la tierra de Schoenstatt le era muy atractiva por su tranquilidad y la posibilidad de tener unos días de alimento espiritual personal. La llegue a sentir como parte de las voluntarias, pero como todo tiene un final, llegó su hora de partida. Al mismo tiempo arribó la familia Aizpuru. Tuve un sentimiento difícil de explicar al momento de verlos y saber que eran de Torreón y Guanajuato, ciudades de México. El poder hablar de gente que conocíamos en común y juntos añorar la salsa y las tortillas (comida típica de México) fue como sentirme aún más en casa. Durante esos días también llegaron Francisco y Patricia, mexicanos que viven en Irlanda. Ellos vinieron sólo a conocer el Santuario original después de haber rezado una novena de la Mater, y al ver tan bello lugar decidieron quedarse a pasar la noche. En Sonnenau se encontraron con los demás mexicanos y hasta celebraron el cumpleaños de la Sra. Patricia- Estuvieron durante horas conversando hasta que se hizo de noche.

En todo momento internacional

En las oraciones de la noche grupales para mí es muy lindo el comenzar rezando en inglés, luego un canto en húngaro, otro en xhosa y terminar con uno propio en español. Aunque para ser honesta gran parte no lo entiendo, el sentimiento es el mismo. Se puede notar cómo la forma de decir las cosas tiene mucho más impacto que las palabras en sí. También este viernes tuvimos una Sta. Misa con los voluntarios en la capilla de la casa. Entre los presentes estábamos cuatro mexicanos, dos húngaros, una sudafricana, dos paraguayos y tres alemanes. La Sta. Misa la comenzó el Padre Lothar en inglés y al momento de la homilía explicó la parábola de la oveja perdida en inglés, alemán, español e hizo pausas para la traducción al húngaro. Nunca había participado en una Sta. Misa tan internacional. Éramos pocas personas pero de muy variados países, y el Padre Lothar tenía mucho interés en que todos entendiéramos tan importante evangelio. Todo fue muy acogedor.

Siempre está presente el espíritu de la Hna. Lisann

Lamentablemente no tuve la oportunidad de conocer a la Hermana Lisann, pero sí he escuchado numerosas anécdotas de mis amigos sobre ella. Me contaron de su gran amabilidad hacia todos los peregrinos y voluntarios, haciendo todo lo posible por hacerlos sentir como en casa. Sentí como si en verdad la conociera y la noticia de su fallecimiento me tomó por sorpresa. Después de eso escuché a varios de mis amigos comentar que tenían cierto temor de regresar a Sonnenau y experimentar de algún modo el vacío, pero déjenme decirles que ella sigue aquí. Sus hermanas, la Sra. Sinnhuber y la Sra. Weissenberg, están ahora encargadas de Sonnenau. Ellas están trabajando ahí voluntariamente con la intención de que siga vivo el ambiente por el cual la Hna. Lisann había trabajado tanto. La hermosa casa de la juventud femenina sigue tan alegre como siempre y con los brazos abiertos para recibir a todo el que llegue.

Dos importantes opciones

Aquí en Sonnenau también ayudamos en las tareas de la casa. El trabajo es, por ejemplo, lavar platos para aportar algo de nuestra parte por vivir aquí. Pero me he dado cuenta que hay dos opciones: puedes tomarlo como un trabajo algo aburrido y hacerlo solo por obligación, o lo puedes aprovechar para algo positivo. Yo he tratado de elegir la segunda opción. Así que lavo los platos al ritmo de alguna canción o lo aprovecho para conversar y hasta he usado el tiempo como clase de alemán. Y sí, en efecto, mi alemán hasta ahora llega sólo a los nombres de los utensilios de cocina, pero bueno, ¡eso es mejor que nada!.

Aprovechar al máximo

Trato de no concentrarme en esto, pero es claro que pienso que en poco tiempo tendré que regresar a mi casa en México. Ahora tengo la gran bendición de pasar diariamente por el Santuario Original camino a la Oficina de Prensa. También tengo a tres hermanas, Betty de México, Kinga de Hungría y Thobeka de Sudáfrica de quienes aprendo y con las que me divierto cada día. Sin olvidar a las Hermanas de María que conozco diariamente de las cuales he aprendido tanto hasta ahora. Extrañaré mucho todo esto, pero siempre estaré muy agradecida por haber tenido esta oportunidad que me ha ayudado tanto crecer. ¡Con tantas anécdotas por contar en dos semanas, no puedo esperar a hacerlo dentro de dos meses, a la hora de mi hora de partida!.

 

 

 

Zurück/Back: [Seitenanfang / Top] [letzte Seite / last page] [Homepage]

Last Update: 28.06.2007 Mail: Editor /Webmaster
© 2007 Schönstatt-Bewegung in Deutschland, PressOffice Schönstatt, hbre, All rights reserved, Impressum