published: 2009-06-19 |
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Lo guardaremos en nuestros corazones y lo recordaremos por el resto de nuestras vidasAlianza de Amor del primer grupo de matrimonios del Movimiento de Schoenstatt en el área de Washington DC, Maryland y Virginia, el 31 de mayo de 2009 |
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EE.UU., Hugo Cáceres. El camino de Washington a Nueva York se presentaba muy lluvioso en las primeras horas de esa mañana. Sin embargo, al llegar al Santuario de La Candelaria, en Staten Island, Nueva York, había aparecido el sol y el clima era muy agradable, adecuado para la fiesta de la coronación de nuestra Madre y Reina y la alianza de amor del primer grupo de matrimonios en el día de Pentecostés, que este año coincidió con el aniversario de una fecha muy especial para la Familia de Schoenstatt: el 31 de mayo de 1949. Eran cinco los matrimonios que sellaron su Alianza de Amor con la Madre Tres Veces Admirable, provenientes de diferentes países: Bolivia, Colombia, Paraguay, Perú y Estados Unidos. Junto a sus once pequeños hijos, vivieron un acontecimiento maravilloso. Estaba también presente el más pequeño de los niños: Cristopher, hijo de Shirley y James O´Donnell, nacido hacía 3 semanas, precisamente tres horas después de haber terminado la última reunión de preparación del grupo. Después de meses de caminar juntos en la formación y de hacer abundantes aportes al capital de gracias, la Mater quiso sellar la alianza de amor en una fiesta tan grande como es Pentecostés, que esta vez coincidió con el aniversario del tercer hito de la historia de Schoenstatt, el 31 de mayo de 1949. Un día especial para Washington y más alláLa ceremonia fue algo maravilloso, el encendido de las velas, la bendición de las medallas, la lectura del rito y la renovación de los votos matrimoniales. El Padre Héctor Vega y la Hermana Iraida Guerra contribuyeron a que la ceremonia fuera algo especial para todos. Fue una honda vivencia que se grabó en los corazones y que sin duda se recordará toda la vida. La Hermana Iraida entregó los símbolos junto con el Padre Héctor. La felicidad y la emoción hicieron que varios ojos se llenaran de lágrimas. La alegría fue indescriptible y en el Santuario se sintieron más cobijados, transformados y sobre todo enviados, no solo a Washington D.C., sino también a Maryland y a Virginia para que Ella reine en cada lugar, con la fuerza del Espíritu Santo y la bendición del Padre y fundador. El 31 de mayo de 2009 ha sido un día muy especial para el Movimiento de Schoenstatt en el área de Washington, DC, Maryland y Virginia. |
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Last Update:
19.06.2009