Tres meses después de la Conferencia 2014...

"Me alegro de pertenecer a esta Familia internacional de Schoenstatt"

Un tiempo de decisiones desde la vida... A time of decisions “from within”... Eine Zeit der Entscheidungen von innen her…
Georg Schick unas horas antes del comienzo... Georg Schick a few hours before it began... Georg Schick, verantwortlich für die Gesamtlogistik, kurz vor Beginn…
Un tiempo de nuevos horizontes comunes... A time of new common horizons… Eine Zeit neuer gemeinsamer Horizonte…
Un tiempo de internacionalidad A time of Internationality Eine Zeit der erlebten Internationalität
Un tiempo de encuentros... A time of getting together… Eine Zeit der Begegnungen… Fotos: Schick/Huapaya/Santos © 2009

CONFERENCIA 2014, Georg Schick. Entre tanto ya han pasado tres meses desde la Conferencia 2014. La primavera siguió al invierno y la vegetación muestra su transformación anual: aparecen los primeros verdes intensos y las flores. También prosperan y se desarrollan los frutos de la Conferencia 2014. No pasa semana sin que recuerde a la Conferencia.

Este proyecto comenzó, para mí, en la primavera (boreal) de 2008. En una breve conversación entablada durante la Jornada de los Católicos en Osnabrück, a raíz de una respuesta lapidaria de mi parte, fui invitado – por medio de la Hna. Kornelia – para participar en el equipo central que preparó la Conferencia. El inicio en el equipo estuvo caracterizado por pequeños encuentros. Pasó mucho tiempo hasta que el equipo completo se reunió por primera vez. Desde el comienzo fue claro que se trataba de un horario "deportivo": tener que organizar una conferencia de estas dimensiones continuando con las tareas habituales o el trabajo profesional de cada uno de los integrantes del equipo . Así, a mí no solo me impidió empeñarme plenamente la distancia de Suabia a Schoenstatt, sino también una agenda repleta de compromisos por parte de la empresa en la que trabajo.

Pero siempre tuve claro que esto sería un hecho único, histórico. No solo por esto. También nuestro equipo central estaba muy comprometido, y especialmente la conducción del P. José María García y de la Hna. M. Luciane Machens me estimulaban continuamente a realizar esta tarea.

Trabajé tres semanas en Schoenstatt

Así pasó volando el tiempo de preparación, y el 25 de enero me instalé en las habitaciones de huéspedes de la Federación de madres en la Casa Marienland. A pesar de tener ya mucha experiencia en Schoenstatt como en la organización de eventos, para mí fue algo nuevo trabajar tres semanas en Schoenstatt, aunque solo, pues por diversos motivos no conseguí ningún ayudante para mi área de trabajo. ¡Pero al final no me quedé tan solito!

La semana de preparación estuvo caracterizada por un excelente trabajo de conjunto en Schoenstatt. Muchas personas de varios países colaboraban para que la Conferencia tuviera éxito. Se podía sentir en todo Schoenstatt una gran alegría y entusiasmo. Se preparó la Casa Padre Kentenich para el acontecimiento, se hicieron las instalaciones tecnológicas, se llevó el material de trabajo, etc. etc. Simplemente queríamos que los delegados internacionales se sintieran bien en Schoenstatt durante la Conferencia.

Al principio estuve solo en el desayuno, pero un día tras otro se fue llenando Schoenstatt más y más con los participantes internacionales de la Conferencia. Se sentía una múltiple diversidad y una ilimitada colaboración entre todos. La Conferencia ya podía comenzar.

El ambiente de la conferencia hizo olvidar las pocas horas de descanso

La Conferencia misma estuvo caracterizada, para mí, por largos días y noches cortas, pero el ambiente que reinaba hizo que esto se olvidara. Los participantes, los colaboradores y los organizadores trabajaban mano a mano y con total generosidad. Se instalaron en el lugar, en Schoenstatt, un entusiasmo y una alegre expectativa ante el año 2014. Junto a una sólida fundamentación para preparar el jubileo de 2014, en esta semana se establecieron, en los muchos encuentros, nuevas amistades y contactos.

El final de la Conferencia, como su inicio, se hizo en el lugar del jubileo: el Santuario original y así finalizó en Schoenstatt un acontecimiento histórico.

Uno tras otro volvieron los delegados a sus países. Había que acondicionar de nuevo el lugar del encuentro y retirar el material. También yo, después de estar tres semanas en Schoenstatt ocupado en la Conferencia, volví a mi vida cotidiana.

Pero, ¿esta Conferencia ya es solo historia?

Trabajo profesionalmente en la gestión internacional de proyectos, pero esta Conferencia me ha marcado y será para siempre un hito en mi vida.

La colaboración – y compenetración – entre las diferentes culturas, las diversas presentaciones, el absoluto compromiso de todos, la ayuda de jóvenes de varios países, los traductores, los responsables de las casas del lugar, los organizadores... todos ellos me han llenado de entusiasmo.

Experimenté una Familia de Schoenstatt internacional que no solo se alegra por el cumpleaños de 2014, sino que también quiere prepararse seriamente para este acontecimiento. ¡Me encanta pertenecer a esta Familia internacional de Schoenstatt, y ya tengo muchas expectativas por todo lo que haremos juntos para preparar el 2014!.

Estoy agradecido y satisfecho por haber podido experimentar lo que fue esta Conferencia y por haber vivido muchos momentos que llevo en el corazón y que aún no comprendí del todo...

Así, después de tres meses, la Conferencia no solamente es histórica sino que sigue viva en mucha gente de todo el mundo.

Traducción: aat, Argentina