published: 2008-05-02 |
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Sólo lo que nos mueve puede mover a los demásPara el comienzo del mes de María en Schoenstatt, se unieron la parroquia de Vallendar, los Padres Pallottinos y el Movimiento de Schoenstatt |
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SCHOENSTATT, mkf. Este año todo cayó temprano: Pascua, Pentecostés, incluso el 1º de mayo...una sonrisa recorrió la colmada iglesia de los Pallottinos cuando el P. Erik Riechers expresó así la sensación que tienen muchos en este año: ¿cuándo fue la última vez que la Ascensión del Señor cayó el mismo día que la fiesta del trabajo y que el inicio del mes de María coincidió con el de la novena de Pentecostés? La luz de la esperanza, dijo el predicador, debe iluminar este atardecer: en las palabras de la Sagrada Escritura, en la gente, en María, y en su lugar de gracias, donde se reunieron la parroquia de Vallendar, los Padres Pallottinos, y el Movimiento de Schoenstatt. Y además, gracias a la presencia de peregrinos de Suiza y de España, un Schoenstatt bien internacional. Lo que no nos mueve a nosotros, dijo el P. Riechers, tampoco mueve a los demás. Las palabras – sean las de una homilía o incluso de la Sagrada Escritura – que no mueven algo en nuestro interior pueden ser hermosas, pero no influyen en la vida concreta. Un pensamiento que sigue a los participantes cuando se ponen en marcha después de la liturgia de la palabra, acompañada con muy buena música. Esta celebración de la apertura del mes de mayo se realiza en tres estaciones: liturgia de la palabra, peregrinación y permanencia en el lugar de gracias. La procesión, llevando la Sagrada Escritura, marcha en torno a la plaza de peregrinos al lado del Santuario Original. Varias veces hay que abrir y cerrar los paraguas, sopla el viento, el cielo se cierra, pero el chaparrón al final pasa por Schoenstatt y cae a algunos kilómetros de distancia. María, aurora de la salvaciónCon el canto "Aurora de la salvación", acompañado por el P. Diensberg en el teclado y por las Hermanas de María con flauta traversa y guitarra, los peregrinos se reunieron en el Santuario original. Se habían colocado unos bancos que permitieron sentarse al menos a la mitad de ellos. Después de algunas oraciones y lectura de textos, el P. Ludwig Lipp habló del anhelo de esperanza que tienen los hombres, del anhelo de Dios. "Aquí, en este Santuario, desde el 18 de octubre de 1914 la Mater regala abundantemente la esperanza y conduce a un encuentro personal con Dios y con su amor". Invitó a todos a renovar la Alianza de Amor y a incluir en ella a todos los que tienen anhelos por la esperanza y por el amor. Después de la bendición impartida por el P. Weber, que estaba allí por última vez como párroco de Vallendar, y de cantar el Himno de la Familia ("Protéjanos tu manto") muchos se dirigieron al Santuario original, hermosamente adornado. Especialmente lo hicieron los peregrinos de Valais y un grupo de hombres suizos que estaban en Schoenstatt acompañados por el P. Erwin Hinder. Unas jóvenes españolas que habían llegado poco antes de comenzar la procesión, comenzaron a cantar canciones españolas y surgió una alegría anticipada cuando se despidieron: ¡hasta pasado mañana, en la novena de Pentecostés! Desde el viernes 2 de mayo se reza en el Santuario original, a las 20 hs., la novena de Pentecostés preparada por los Padres Pallottinos, la parroquia de Vallendar y varias comunidades de Schoenstatt. El cierre será el sábado 10 de mayo con un acontecimiento especial: ¡esa tarde estarán allí las reliquias de Santa Teresita del Niño Jesús! Taducción: aat, Argentina |
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Last Update: 06.05.2008