Universalidad de la iglesia católica

Encuentros en torno al Santuario de Belmonte

Anneliese Nuño y la Hermana Fernanda reciben a la Sr. Jacoba Kesselheim, Superiora General de las Hermanas de María Anneliese Nuño and Sister Fernanda receiving Sr. M. Jacoba Kesselheim, Superior General of the Schoenstatt Sisters of Mary Anneliese Nuño und Schw. Fernanda begrüßen Schw. Jacoba Kesselheim, Generaloberin der Marienschwestern
El Santo Padre en el Consistorio The Holy Father in the Consistorium Der Heilige Vater beim Konsistorium
El Cardenal Rylko en el Consistorio Cardinal Rylko at the Consistorium Kardinal Rylko beim Konsistorium
P. Ludovico y Hermana Fernanda con peregrinos alemanes en la Casa dell'alleanza Fr. Ludovico and Sr. Fernanda with German pilgrims in the Casa dell'alleanza P. Ludovico und Schw. Fernanda mit den deutschen Pilgern in der Casa dell'alleanza
Comida en casa de la Society Holy Child Jesus en Roma Meal in the House if the Society Holy Child Jesus in Rome Mittagessen im Haus der Society Holy Child Jesus in Rom Fotos: Nuño © 2007

La Hermana Fernanda, Santiago, un joven de Córdoba, Argentina, y el matrimonio Nuño están en estas semanas en Belmonte. El número más grande de personas presentes hace posible participar una y otra vez en eventos y encuentros particulares más allá de los muros del terreno de Belmonte.

Dios vive y actúa en el mundo

El matrimonio Nuño hace unos días fue invitado a la celebración de la Santa Misa y a comer en la casa generalicia de la Society Holy Child Jesus. Es una comunidad de religiosas fundada en Inglaterra en el año 1846 por Cornelia Connelly, mujer nacida en la ciudad de Philadelphia/Estados Unidos de América. En pequeñas comunidades presentes en Europa, África y Estados Unidos "ayudan a otros a creer que Dios vive y actúa en ellos y en el mundo". En la pequeña casa generalicia de Roma viven seis religiosas, entre ellas Louisa Huni-Dadzie procedente de Gana, país del África occidental. Ella es la secretaria de la superiora general. Es una mujer encantadora y cariñosa, muy amiga de Anneliese Nuño – hicieron juntas el curso de italiano el año pasado. Juntas iban y venían en el autobús, hablaban inglés para cambiar y eran el "espectáculo" de los que iban con ellas en los autobuses romanos. Pues bien, Louisa ha celebrado los veinticinco años de su profesión perpetua y quiso invitar a los Nuño a la celebración correspondiente. Con ella viven otras religiosas, venidas de diferentes países – Nigeria, Irlanda, USA, Holanda. La Santa Misa celebrada por un sacerdote ganés de la comunidad del Verbum Dei y la renovación de sus votos fueron una experiencia religiosa muy especial y la comida (medio italiana, medio africana, medio americana) todo un regalo. Las dos religiosas africanas presentes bailaron una danza de agradecimiento y alegría que avivó en nosotros el convencimiento de la originalidad, universalidad y belleza de nuestra fe.

Una verdadera riqueza para la iglesia mejicana

En la tarde del domingo 9 de diciembre la comunidad del Pontificio Colegio Mexicano celebró la solemnidad de Guadalupe y el cuarenta aniversario de la fundación del Colegio en Roma. El Padre Felipe Ruiz, de Chiapas, invitó al matrimonio Nuño a estas celebraciones. En los cuarenta años de su historia este Colegio Pontificio ha visto pasar entre sus paredes a más de mil quinientos jóvenes sacerdotes mexicanos que han venido a Roma para especializarse en las diferentes universidades pontificias. Una verdadera riqueza para la iglesia mexicana.

Después de la celebración eucarística, presidida por el Emmo. Sr. Cardenal Javier Lozano Barragán, fueron todos en procesión con la imagen de la Virgen de Guadalupe desde la iglesia parroquial vecina hasta el colegio mexicano, en donde tuvieron la oportunidad de participar en la convivencia y cena preparada por los sacerdotes mexicanos: una comida típica con tinga, frijoles fritos, tostadas y ponche abundante. Algunos bebieron también su "tequilita". La noche se cerró con un festival en el patio del colegio con mariachis y otras actuaciones folclóricas preparadas por los sacerdotes mexicanos del colegio. Una tarde inolvidable en la que se pudo compartir la fe y alegría con la cultura "guadalupana" y mexicana de los anfitriones. Esto es también parte de la Roma universal.

Ambas experiencias nos llevan a reflexionar y soñar sobre el futuro de nuestro Centro internacional de Schoenstatt en Roma y sobre la "universalidad" de nuestro Santuario Matri Ecclesiae de Belmonte.

Al servicio de la causa del Reino

Más allá de estas vivencias particulares se encuentra la participación en los actos públicos del último Consistorio que los representantes de Schoenstatt en Roma han vivido en San Pedro. Ha sido el segundo Consistorio de creación de nuevos cardenales de Benedicto XVI. Todo ha transcurrido con la solemnidad habitual en este tipo de acontecimientos. Este Consistorio ha puesto de manifiesto muy significativamente el carácter universal de la Iglesia. En el colegio cardenalicio están representados ya más de setenta países. En esta ocasión se ha hecho visible de forma especial la universalidad eclesial con los dos nuevos cardenales africanos, procedentes de Kenya y Senegal y con la presencia de Iraq en la persona del patriarca de la Iglesia caldea Enmanuel III Delly. Un gesto delicado y misionero de nuestro Papa Benedicto XVI. En sus homilías de los días 24 y 25 de noviembre delineó con belleza y precisión la identidad y la misión de los cardenales como los más estrechos colaboradores del Obispo de Roma, destacando además el estilo de vida propio de los cardenales que deben estar dispuestos a la "efusión de la propia sangre" por el Reino de Cristo. "La entera jerarquía de la Iglesia – afirmó Benedicto XVI -, todo carisma y ministerio, todos y cada uno estamos al servicio de su Señorío", al servicio de la causa del hombre, al servicio de la causa del Reino "para anunciar al mundo la verdad de Cristo, esperanza de la humanidad".

Entre los nuevos cardenales se encuentra un amigo de la Familia de Schoenstatt, Su Eminencia Cardenal Stanislaw Rylko, Presidente del Consejo Pontificio para los laicos. Junto a la Hermana Lisianne Braunbeck pudieron Anneliese y Francisco Nuño, como representantes del Movimiento de Schoenstatt, transmitirle personalmente nuestra felicitación y nuestro compromiso solidario en la tarde del sábado 24 en uno de los salones del palacio pontificio. Algo necesario y conveniente en las relaciones y en el protocolo vaticano. Justo en la noche anterior al Consistorio tuvimos también la oportunidad de cenar con él y un pequeño grupo de alemanes procedentes de la parroquia en donde Anneliese y yo nos casamos, y con la que el nuevo Cardenal mantiene unas relaciones de amistad muy especiales.

Visitas "ilustres"

Nuestro Santuario Matri Ecclesiae de Belmonte se ha visto honrado en estos días con la visita de "ilustres" schoenstattianos, una símbolo más de la universalidad de Roma. Nos visitaron la Hermana Jacoba, superiora general de las Hermanas de María, el Padre Heinrich Walter, superior de los Padres de Schoenstatt, y la Sra. G. Pollak de la dirección de las Frauen de Schoenstatt. También estuvo aquí Monseñor Wolf, Rector de los Sacerdotes Diocesanos de Schoenstatt, con un numeroso grupo de peregrinos alemanes que visitaron en dos ocasiones el Santuario y la Casa dell’Alleanza. Todos los años, en la primera semana de diciembre, llega la gran peregrinación del Schoenstatt alemán a Roma y Belmonte. En esta oportunidad han sido más de ciento veinte peregrinos. Es una oportunidad para constatar la fidelidad y solidaridad con las que muchos miembros de nuestra Familia en Alemania acompañan los trabajos de construcción del Centro internacional de Schoenstatt en Roma y el crecimiento del Movimiento de Schoenstatt en Italia. El Padre Ludovico y la Hermana Fernanda dieron sus testimonios al respecto en un encuentro familiar que tuvimos en la Casa en la tarde del día seis de diciembre.