El milagro no se dio, y sin embargo existe un milagro

Una vida ofrecida por Schoenstatt: Judy Rehn, de Waukesha, E.E.U.U, fallecida un mes atrás en Milwaukee

En el Santuario, poco tiempo antes de fallecer In the Shrine, a few months before her death Im Heiligtum, einige Monate vor ihrem Tod
Su ofrecimiento Her offering Ihr Angebot
Su ofrecimiento en el fuego de Jose Engling en Cambrai Her offering in the Joseph Engling fire in Cambrai Ihr Angebot im Englingfeuer
Bendición del Santuario Hogar (Judy al lado de la Hermana Winifred) Home Shrine dedication, 1974 (Judy is the girl next to Sister Winifred) Hausheiligtumsweihe 1974 – Judy steht neben Schwester Winfriede Fotos: Jentz © 2006

E.E:U.U, Christi Jentz/mkf. "Aquí va un resumen de cómo me siento. En este momento, los doctores coincidirían con lo que dice el artículo, así que es real. Si se da un milagro terrenal, es bueno que la gente sepa que se trata realmente de un milagro. ¿Cómo darte las gracias, mi querida amiga, por todas tus oraciones, acompañamiento y cariño? Sos un tesoro para mí…". Es el comentario de una mamá de tres chicos, de 44 años de edad, afectada de un serio tumor cerebral. Incurable, desde el punto de vista humano. Comentario que le hizo a su amiga de Schoenstatt de toda la vida a su regreso de una peregrinación a Roma y Cambrai, adonde llevó un pequeño trozo de papel que tenía escrito: "Querida Madre: Día a día ofrezco al capital de gracias cada nuevo síntoma, cada malestar, incluso cada impedimento físico, cada lucha espiritual, el temor a lo que pueda sobrevenir y cada secuela de mi enfermedad.

17 de septiembre en Cambrai, Francia, durante la vigilia de la celebración del 40° aniversario de bendición del Santuario de Cambrai, un Santuario construido y ofrecido en 1965 por toda la Familia de Schoenstatt internacional. Christi Jentz, junto con su marido y su hijo, se encuentra presente allí, donde arroja al fuego el pequeño trozo de papel, bendecido el 7 de septiembre por el Santo Padre Benedicto. El artículo escrito en esa ocasión finaliza así: "El sábado por la noche, en Cambrai, se encendió una hoguera con el capital de gracias. Un contingente de unos 100 alemanes, junto con representantes de varios países y continentes, culminó allí su peregrinación tras las huellas de José Engling, caminando 3 Km. aproximadamente desde Eswars, lugar de su muerte. En esta peregrinación estuvo representada la JM de Villa Ballester que ese mismo día bendijo la piedra de José Engling. Al son de cantos, fueron quemados los papeles con los aportes al capital de gracias. Christi Jentz, de Milwaukee, llevó el capital de gracias de varias familias de Milwaukee, al igual que el Sí de una amiga de su niñez, a punto de morir a raíz de un tumor cerebral. Con todo el dolor, como mujer y como madre de tres hijos en edad escolar, ofrendó su vida como capital de gracias en ese Santuario de Cambrai, en el espíritu de José Engling, abandonándose por entero al amor de Dios Padre. Un acto sencillo, del que casi nadie estaba al tanto, fue quizás el secreto de esta maravillosa celebración del 40° aniversario" Judy reenvió este artículo a muchos amigos, con este comentario: "Les reenvío esto porque casi al final (el autor) menciona un ofrecimiento que envié con mi amiga Christi, en una peregrinación de la que acaba de regresar junto con su familia. Se trata de la celebración del 40° aniversario del Santuario de la Unidad en Cambrai, Francia". Luego explica que este Santuario tiene un futuro incierto y continúa diciendo: "Si esto hace que cobre más sentido lo que me toca vivir en este momento, me siento honrada de ser parte. Sólo Dios sabe si es así. Cientos de personas de todo el mundo se congregaron allí con ese motivo, y parece que se vivió un día especial".

Si se da un milagro terrenal, es bueno que la gente sepa que se trata realmente de un milagro

Judy Rehn conocía la gravedad de su enfermedad, aunque estaba llena de esperanza y fuerzas para luchar. "En este momento, los doctores coincidirían con lo que dice el artículo, así que es real. Si se da un milagro terrenal, es bueno que la gente sepa que se trata realmente de un milagro", le comenta a Christi a su regreso de Cambrai. "¿Cómo darte las gracias, mi querida amiga, por todas tus oraciones, acompañamiento y cariño? Sos un tesoro para mí…".

Judy L. Rehn había nacido el 27 de febrero de 1961 en Milwaukee, Wisconsin. Conoció Schoenstatt cuando niña y desde entonces quedó arraigada a Schoenstatt de por vida. En 1974 su familia bendijo su Santuario Hogar. En la foto se la ve a Judy, radiante de alegría, de pie junto a la Hna. Winifred.

Como madre y esposa, vivió su Alianza de Amor con total autenticidad. Quienes la conocieron, recuerdan siempre su rostro lleno de vida. "Para mí está claro que Judy siguió los pasos de José Engling y Gilbert Schimmel", afirma Christi Jentz. "De manera original, ya que era una hija del Padre. Debemos agradecerle a José Engling haber sido el primero que ofreció su vida por Schoenstatt dando comienzo así a lo que llamamos "Acto de José Engling", ya que este sigue surtiendo efecto hasta nuestros días. Sé que ella lo ofreció por Cambrai, como dice en su carta. A Judy y a Jim les tocó "vivir" muy públicamente su cruz y salieron airosos de este desafío. Su espiritualidad como schoenstattianos fue un testimonio para muchos".

No te preocupes, Schoenstatt

Judy falleció el 29 de noviembre, a los 45 años. El párroco, Padre Jim, pensaba hablar sobre el ofrecimiento de Judy en la misa de exequias. Un ofrecimiento del cual recién se enteraba. Jim y Judy tuvieron más contacto con él a partir de su enfermedad. De hecho, sus palabras de despedida fueron increíblemente parecidas a las del Padre Kentenich cuando murió Gilbert Schimmel el 16 de febrero de 1959. "La semana pasada saqué el texto inédito (Charlas de los lunes por la tarde) con la semblanza que diera el Padre Kentenich a los matrimonios pioneros sobre Gilbert Schimmel (con referencias a José Engling también). Ayer, finalmente, me senté a leerla", cuenta Christi Jentz. "Se me había escapado esta versión hasta ahora. El Padre Jim podría haber abordado el tema de la muerte de Judy de muchas maneras posibles. Pero esto fue asombroso. Asombroso. Decidió centrarse en el hecho de que no se dio el milagro, pero igual hubo un milagro. Después hay otras partes también muy similares. A través de este sacerdote, el Padre Kentenich quiso decirnos: "Fíjense en esto… lo dice todo, yo también estaba escuchando".

El futuro de Cambrai sigue abierto. Schoenstatt se aproxima a su centenario, los 100 años de José Engling y los demás congregantes héroes del tiempo de fundación. El futuro del Santuario original está abierto. No te preocupes, Schoenstatt. La hora de los héroes de Schoenstatt no es pasado lejano. Es hoy.

Traducción: mca, Argentina

Alianza de Amor Covenant of Love Liebesbündnis