Finalmente el tiempo se nos hizo corto

Mil Avemarías en el Santuario de Lima, Perú

Se rezaron 20 rosarios ... Unos de los participantes se quedaron durante todo el tiempo Twenty rosaries were prayed, and some of the participants stayed the whole time Es wurden 20 Rosenkränze gebetet, manche Teilnehmer blieben die ganze Zeit
El 20° rosario... The 20th rosary Der 20. Rosenkranz... und eigentlich war die Zeit viel zu kurz
No  hubo espacio para todos dentro del Santuario The Shrine was filled to capacity, and many prayed outside Es gab nicht genug Platz für alle Beter im Heiligtum
Guia Prayer leader Vorbeter Fotos: Espinozo © 2006

PERÚ, Queca Espinoza. El rezo de las mil Avemarías – veinte Rosarios, cuando es posible en adoración ante el Santísimo – en la Iglesia parroquial, en las ermitas o en el Santuario, se ha desarrollado en al Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina como una tradición muy valorada. Es fuente de abundantes bendiciones, pues promueve la unión de las diferentes instituciones parroquiales, o de las distintas ramas y grupos del Movimiento de Schoenstatt. El 17 de octubre, en vísperas del día 18, se rezaron en el Santuario de La Molina, Lima. Fue una experiencia profunda.

Queca Espinoza comparte su vivencia: "Ayer tuve la suerte de poder estar un largo rato en la convocatoria que se hizo para el rezo de las 1000 Avemarías, para hacer una suave violencia a la Mater, para decirle: mira, te estamos demostrando con hechos que te queremos, que necesitamos que te corones como Reina de la unidad y fecundidad apostólica, te ofrecemos nuestra alegría de estar en tu Santuario rezando junto a numerosas personas que han respondido con generosidad al llamado; te ofrecemos nuestro cansancio ya que muchos se quedaron durante el rezo de los 20 Rosarios, la sed que apremiaba a causa del fuerte sol, el sueño que se produce por el cansancio de estar en una misma posición, pero cuando esto les pasaba a algunos, había voces nuevas que venían llegando y se volvía a escuchar con fuerza el rezo en común:

y nos llevaba a transportarnos al día en que dijiste SI ACEPTO, QUE SE HAGA EN MI LA VOLUNTAD DEL TODOPODEROSO".

Encomendamos a Maria a las personas que nos piden oraciones

Y esa generosidad tuya para con el mundo entero nos animaba a seguir rezando, y encomendando entre tanto al hijo que rinde exámenes, al esposo sin trabajo, al amigo enfermo, al matrimonio con problemas, al que no pudo llegar a rezar por diferentes motivos, a nuestros padres viejecitos ya y lejos de nosotros, por las personas que nos piden oración, en fin el tiempo se nos hizo corto y pudimos llegar al Rosario Nº 20 que completaba las 1000 Avemarías que te ofreceremos esta noche, en la Sta. Misa del 18, Madre querida.

Gracias Margarita, porque con tu equipo de ayuda nos brindaste acogimiento en la cafetería y en la librería..."

Fue una vigilia que preparó los corazones para la celebración del 18 de octubre.

Mil Avemarías