Llena de gracias - Piedras vivas para una Iglesia renovada

Belmonte, Roma: imposición del nombre a la Casa de la Alianza

Belmonte, 8 de diciembre de 2005: „piedras vivas“ Belmonte, December 8, 2005: “living stones” Belmonte, 8. Dezember 2005: “lebendige Steine”
Celebración con Mons. Gino Reali, obispo de la diocesis del Santuario Matri Ecclesiae Celebration with Bishop Gino Reali Feier mit Ortsbischof Gino Reali
La “Casa de la Alianza” The “Covenant House” Das “Haus des Bundes”
Simbolos Symbole Viele Symbole vor dem Heiligtum
Las piedras con los nombres – todavía hay lugar The stones with the names – there is room enough Die Steine mit den Namen – es ist noch Platz Fotos: Gerber/Bühler © 2005
Fotos: © 2005

ROMA, P. Michael Gerber. 8 de diciembre de 2005 por la tarde: lentamente se va llenando la explanada del Santuario Matri Ecclesiae. Unos jóvenes españoles siguen acarreando sillas y bancos, el coro de jóvenes de la parroquia Santa Gemma da los últimos toques durante su ensayo y los numerosos peregrinos están atareados escribiendo sus nombres en una de las piedras blancas que más tarde se colocarían en el fundamento de la futura estatua del Padre. Todos los que escribieron y escribirán sus nombres en una de esas piedras quieren comprometerse a ser "piedras vivas" de la Iglesia del futuro, tal como la describieron el Concilio y nuestro Fundador con su visión profética. Y se reunieron muchas de esas piedras en esta tarde.

Se congregaron para este día de fiesta un total de 230 peregrinos, de Alemania, de la Familia de Schoenstatt romana y los fieles de la parroquia Santa Gemma. También podían verse las piedras que con el deseo de unirse espiritualmente a esta celebración solicitaron vía e-mail muchísimas personas: 169 mensajes enviados por correo electrónico. Ellos son un testimonio sin igual de tanta gente que quiere construir la Iglesia desde sus lugares de residencia, según la visión de nuestro Fundador. Por cada correo electrónico se depositó una piedra delante de la foto de nuestro Padre. Durante la ceremonia estas piedras, junto con todos los mensajes impresos, fueron depositados en los fundamentos de la futura estatua del Padre Kentenich.

Construyendo a partir de donde comenzó el Padre

Al inicio de la celebración, Mons. Sanna saludó al Obispo del lugar, Mons. Gino Reali, al párroco, P. Federico, y a Mons. Dr. Peter Wolf – Rector general del Instituto de los sacerdotes diocesanos de Schoenstatt, responsables de ese Santuario – junto con los muchos peregrinos presentes. Los oradores recordaron la importancia de esta hora, de los acontecimientos sucedidos justamente hace 40 años y nuestro compromiso actual de servir a la Iglesia. Una nutrida procesión se dirigió a los fundamentos de la Casa de la Alianza, en plena etapa de construcción. Sobre los fundamentos que están en el centro de una futura plaza se hará después una fuente, donde se ubicará la estatua de nuestro Padre. "Seguimos construyendo donde él comenzó; aún hoy él construye con nosotros". El fundamento se llenó con muchas piedras, grandes y chicas, pero aún queda suficiente lugar para que los grupos de peregrinos de todo el mundo que visiten el lugar puedan depositar allí sus piedras.

Nuestra actividad y la gracia que viene de lo alto

Estos fundamentos comenzaron de modo peculiar a llamarnos de nuevo la atención sobre la relación con la Mater y la renovación de la Iglesia. A la mañana siguiente los mismos experimentaron una transformación por un breve lapso de tiempo, que manifestó un consciente contenido simbólico: debido a la fuerte lluvia y a la aún faltante red de desagüe, se llenó el pozo de los fundamentos con tanta agua que impidió ver las piedras, Si interpretamos el agua caída como símbolo de las bendiciones celestiales, entonces este acontecimiento vendría a decirnos que el trabajo en la "Iglesia renovada" no comienza con nuestra actividad. Comienza cuando nosotros, como María, nos abandonamos totalmente a la gracia divina, que en cierto modo nos absorbe. Así seremos como las piedras con las que Dios puede construir algo asombrosamente grande.

"Estoy totalmente rodeado por Schoenstatt"

En la mañana del miércoles 7 de diciembre, el grupo de peregrinos alemanes participó en la audiencia general en la plaza de San Pedro. Mons. Ignacio Sanna había conseguido pases para ingresar al "Sagrato" de la fachada de la basílica de San Pedro, en la inmediata cercanía del Papa. Los peregrinos se alegraron mucho por estar en un lugar tan destacado y por el saludo del Santo Padre. A continuación muchos tuvieron la posibilidad de darle la mano al Papa. Mons. Peter Wolf pudo regalarle su libro sobre María y transmitirle saludos. Con visible alegría y gratitud el Santo Padre le respondió: "¡Estoy totalmente rodeado por Schoenstatt!".

El 8 de diciembre a la mañana el grupo de peregrinos participó en la Santa Misa papal en la basílica de San Pedro. El Papa Benedicto destacó en la homilía el 40º aniversario de la finalización del Concilio y habló extensamente sobre el título "Mater Ecclesiae".

Loppiano, centro internacional de los Focolares

"El viernes iniciamos el viaje de regreso. Cargamos nuestros ómnibus bajo una lluvia torrencial y nos dirigimos a Loppiano, el centro internacional del Movimiento de los Focolares. Fuimos por Florencia rumbo a Alemania. Llegamos a Loppiano con algún retraso. Un joven suizo llamado Rafael estuvo a cargo de la visita guiada, para goce de los peregrinos. Nos asombramos por la "ciudad sobre el monte", que consta de muchas construcciones individuales en torno a dos iglesias, una antigua y una nueva. Hay casas para una cantidad de familias que viven allí y "escuelas" para diversos grupos que mayormente viven allí en forma comunitaria durante diez meses y que quieren ejercitarse en la espiritualidad de los Focolares. Así se encuentra también allí una escuela sacerdotal, otra para religiosos, otras para los Focolares varones y mujeres (por separado) y para los jóvenes. También hay diversos talleres y casas para las bandas Gen Verde y Gen Rosso.

Muchos peregrinos quedaron muy impresionados con la nueva iglesia, dedicada a María como la "Theotokos" (Madre de Dios). La iglesia ha sido construida por artistas de ese Movimiento, totalmente en sintonía con su espiritualidad. El techo, de cobre verdoso, es como un gran manto de María sobre la nave central. El sagrario es una hostia muy grande que está detrás del altar, entre la nave y la torre. Así se hace totalmente visible el axioma "Cristo en el centro" que es tan fuerte en la espiritualidad de los Focolares. Al mismo tiempo el sagrario está recubierto por dentro con vidrio azul, que quiere hacer presente a María. En su interior vive Cristo, que irradia la luz como un sol. Nuestro guía suizo, Rafael, contó que hace 40 años que querían construir esta iglesia y recién se pudo realizar hace un año. Pero finalmente resultó una excelente experiencia, porque todo tuvo que hacerse vida antes en ellos, hasta que se pudiera transformar en una obra. Muchos de nosotros vimos un fuerte paralelismo con nuestra experiencia en Belmonte".

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• Textos de la liturgía (pdf)

Traducción: aat, Argentina