SUDAFRICA, Hna. M. Joanne. La celebración en la que la Familia de Schoenstatt se reunió en torno al Santuario en la Diócesis de Johannesburgo comenzó el 18 de Octubre con una Misa para celebrar 30 años de la bendición del Santuario. El Santuario lleva el nombre de Aurum Patris "Oro del Padre", y la frase inscrita en la piedra fundamental dice "construir (construyan) desde aquí un mundo mejor". Las celebraciones continuaron el 22 de Octubre con charlas y las presentaciones de cada una de las Ramas sobre sus logros y momentos importantes del año y cuál será el énfasis con el cual asumirán el 2006.

Había mucho que agradecer, por la consagración final del primer curso de Federación de Madres de Sudáfrica y Zimbabwe y también porque el tercer curso encontró su ideal: "Signo de la Luz". Asimismo, por los jóvenes que hicieron su Alianza de Amor comprometiéndose a llevar la Virgen Peregrina a otros, y por último pero no menos importante, la Juventud Femenina compartió su experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud. Hubo un espontáneo y entusiasta aplauso cuando una de las jóvenes mostró la estrella del logotipo original de la JMJ que fue bendecida por el Santo Padre. Esta estrella va a peregrinar por África y seguramente llevará bendiciones e inspiración a la juventud católica de ese continente.

Las imágenes de la Virgen Peregrina y de los Santuarios del Hogar forman una guardia de honor

Luego de una hora de cenáculo de oración al Espíritu Santo, los reunidos dieron sus ideas para el lema y muy pronto todos estuvieron de acuerdo en el lema que los guiaría en el 2006:

Desde el Santuario, inflama los corazones juveniles

El Domingo 23 fue la culminación de las celebraciones con la colocación de las siete piedras en el símbolo del Espíritu Santo en cuya conquista espiritual se ha trabajado desde el 2003. La preparación final consistió en una novena al Espíritu Santo pidiendo un don cada día y a su vez hacer una contribución especial al capital de gracias en esos 9 días. Los papeles con las contribuciones fueron quemados el sábado por la tarde. El Domingo comenzó en el Santuario con una hora santa en honor a la Trinidad, seguido de una charla sobre la doxología de Schoenstatt. El punto culminante del día fue la Santa Misa con una alegre procesión al Santuario con el símbolo del Espíritu Santo ahora adornado con las siete piedras. Las imágenes de la Virgen Peregrina y de los Santuarios del Hogar formaron una guardia de honor en el camino. Y luego se compartió un delicioso té.

Traducción: Angie Santos, Houston, TX, USA