"Quien tiene una misión ha de cumplirla aunque un salto mortal siga a otro"

Un matrimonio de España dedica 10 meses de su vida a misionar en la India

Su inspiración: la Sagrada Familia Their inspiration: The Holy Family Inspiriert von der Heiligen Familie von Nazareth
El Santuario de Bangalore, 18 de octubre The Shrine in Bangalore, October 18 Das Heiligtum in Bangalore, 18. Oktober
Misioneros de la Campaña del Rosario Missionaries of the Schoenstatt Rosary Campaign Missionare der Pilgernden Gottesmutter Fotos: Wosny © 2005

INDIA, Rosa y Eduardo Aymerich. Dios nos ha dado a cada uno de nosotros, a todos sin excepción, una misión muy concreta en nuestra vida. Misionero es aquel que es capaz de descubrir cuál es esa misión y llevarla a cabo, aquel que con un toque de osadía sabe arriesgar su vida por aquello que Dios ha sembrado en su corazón. Por lo tanto no se trata más que de buscar el deseo y el querer de nuestro Padre y entregarnos a ello aunque suponga un "salto mortal de la inteligencia, el corazón y la voluntad".

Cristo envió a sus apóstoles a llevar su palabra al mundo entero; tras ellos, muchos santos y santas han evangelizado con sus vidas cada rincón de la tierra. Ellos, los primeros misioneros, encarnaron el ideal cristiano: llevar a Cristo, por medio de sus vidas, a cada persona que Dios les encomendaba. A lo largo del tiempo, este espíritu ha ido resurgiendo, y también hoy, el Espíritu Santo sopla en los corazones de muchos, haciéndole retomar a la Iglesia la conciencia de misión y llevar de nuevo la luz de Cristo a la tierra.

¿Qué espera Dios de nosotros?

No es casualidad que Dios haya susurrado dentro de esta Familia, y en el alma de muchas personas, el anhelo de dar una respuesta concreta a las necesidades del mundo actual. Proyectos como la creación de un nuevo colegio, llevar el espíritu de Schoenstatt a las parroquias más pobres, ayudar a la fundación del movimiento en otros puntos de España y en otras partes del mundo, o las misiones que los jóvenes llevan a cabo año tras año en pueblos y ciudades de España, son sólo algunas de las muchas iniciativas que hoy día se viven dentro de esta Familia.

Llevábamos pocos meses de casados cuando en nuestro corazón surgió la pregunta: ¿qué espera Dios de nosotros?, ¿qué estilo de matrimonio quiere que seamos?, ¿a qué misión estamos llamados?

¡India!

Y tras muchos meses de oración y discernimiento, el Padre nos habló con claridad. Este año iremos a la India para trabajar con la Familia de Schoenstatt, y no será algo aislado en nuestras vidas, sino que responde a un anhelo profundo, y a un estilo de matrimonio y familia que esperamos nos acompañe para siempre, allá donde Dios quiera enviarnos.

Queremos vivir bajo el ideal de la familia de Nazaret, la primera familia misionera, que tuvo que llevar a cabo la misión más grande: dar a Cristo al mundo. Así nosotros también nos sentimos llamados a entregar ese tesoro, y a que cada uno pueda encontrarlo en nuestro hogar. Dios ha querido regalarnos un hijo en este tiempo, que si Él quiere nacerá en la India dentro de seis meses. Ante nosotros se abre una nueva perspectiva. Una inyección de profundidad que nos hará vivir con mayor madurez nuestra misión en la India y el ideal de ser una familia santa.