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 published: 2005-08-18

La irradiación del Santuario

La fuente de gracias que Schoenstatt ofrece a la Jornada Mundial de la Juventud

 

Auf dem Treppe zur Domplatte gibt es schon frühmorgens Werbung für die Oase

Estamos en el Santuario!

We are in the Shrine!

Hier geht es direkt zum Heiligtum!

Foto: POS Brehm © 2005

Jugendliche aus Chile mit ihrem großen MTA-Bild im Dom  

Jovenes de Chile con su gran cuadro de la MTA, en la catedral

Youth from Chile, with their big MTA picture, in the catedral

Jugendliche aus Chile mit ihrem großen MTA-Bild im Dom

 
Ein Wallfahrts-Heiligtum  

Un Santuario de peregrianción

A Shrine for the pilgrims

Ein Wallfahrts-Heiligtum

 
 

La Virgen Peregrina en Hohe Straße

The Pilgrim Mother at Hohe Straße

Die Pilgernde Gottesmutter geht durch die Hohe Straße

Foto: POS Fischer© 2005

 
Andenkenverkauf beim Heiligtum

Santuario: venta de recuerdos

Shrine: gift shop

Andenkenverkauf beim Heiligtum

Foto: POS Brehm © 2005

 
Grußbuch im Heiligtum  

Libro de saludos en el Santuario

Book of greetings in the Shrine

Grußbuch im Heiligtum

 
Pilger auf dem Weg zum Heiligtum

Peregrinos en camino a al Santuario

Pigrims on the way to the Shrine

Pilger auf dem Weg zum Heiligtum

 
Gebet im Heiligtum  

Oración en el Santuario

Prayer in the Shrine

Gebet im Heiligtum

Fotos: POS Fischer ©2005

 

Mas fotos

 

JMJ-COLONIA, mkf. Obras de construcción rodean el lugar, sólo caminando en zigzag se llega a las rejas que bordean la "torre inclinada" de la Iglesia San Juan Bautista, pero aún así, ¡finalmente arriban! Los rostros agobiados de un grupo de chicas chilenas de la JF se iluminan como por arte de magia: ¡Acá está el Santuario! De puertas abiertas y con el Santísimo expuesto, el Santuario de Colonia aguarda la visita de los peregrinos schoenstattianos – unos 3000 al menos– y de cuantos deseen llegarse hasta él. Todos quieren estar en el Santuario, todos buscan el encuentro con la Mater y con el Padre, quien sellara allí la Alianza con Dios Padre. Utilizando el léxico de una obra de teatro que se presenta actualmente en Colonia, se trata de esa "irradiación de paternidad" que a tantos atrae y que se percibe claramente al ingresar al Santuario.

La "irradiación" del Santuario se percibe ni bien se llega a la catedral de Colonia, lugar de peregrinación juvenil. Formados en una larga columna, los jóvenes ingresan a la catedral, rezan ante el relicario de los Reyes, y abandonan el lugar por una puerta lateral. Una circulación constante en la catedral como nunca antes se ha visto: hay banderas, imágenes, rosarios, cruces, y sobre todo, un enorme caudal de oración. Muchos jóvenes de rodilla, con rosarios en sus manos. Algunos llevan fotos de Frere Roger, fundador de la comunidad ecuménica Taizé, asesinado la noche anterior. Muchos traen consigo fotos de Juan Pablo II y de Benedicto XVI. Se ven los clásicos pañuelos de Schoenstatt. Juan, de Paraguay, lleva con orgullo la bandera paraguaya con un pañuelo de Schoenstatt. Unos muchachos de Chile avanzan con su gran imagen de la MTA que durante los días del Festival estuvo sobre las tumbas de los héroes, donde permanentemente hubo gente rezando el rosario. En medio de idas y vueltas portan, descargan y construyen a lo largo de media hora – hasta que los servidores lo prohíben - un pequeño santuario, donde los jóvenes espontáneamente comienzan a rezar... En la "Hohe Strasse", la arteria principal de Colonia, Sandra, de México, camina abrazada a su peregrina. Muchos saludan a la Mater... Un obispo ruso la reconoce y comienza a hablar inmediatamente sobre Schoenstatt...

Gracias, Mater, por llevarme a casa

Desde lejos se alcanza a ver el Santuario, actualmente con su techo provisorio gracias al cual se lo reconoce fácilmente... pero mucho más aún al traspasar el umbral e ingresar en él. "Gracias, Mater, por traerme a casa", se lee en el libro de visitas que está cerca de la puerta. "Es tan espectacular nuestro querido Santuario", escribe allí un joven de Alemania. "Uno se siente en casa en cualquier rincón del mundo". "Mater, te quiero", se lee en castellano, "La Alianza por la Juventud del mundo da fruto", testimonia una chica de Estados Unidos, al pie de las firmas de sus compañeros de la pastoral universitaria.

"Tuvimos misa a cada hora esta mañana", dice la Hna Manuele, superiora de la casa. "¡Es hermoso! Esta tarde a las cinco está la Misa del grupo de Brasil. La casa es un desorden total, pero no importa", agrega, feliz de la vida. "Nunca pasó tanta gente por este Santuario, ¡qué felices deben estar la MTA y el Padre con todas estas visitas!". Según una Hermana de Argentina: "Se siente una presencia muy fuerte del Padre. Al entrar al Santuario, uno siente que está el Padre...". Muchos jóvenes permanecen de rodillas sobre el suelo del Santuario, en oración... "Soy un mejicano schoenstattiano", lleva escrito en su remera uno de los jóvenes que reza en el Santuario, con su peregrina en brazos...

Afuera, en el pequeño patio perteneciente a este Santuario en medio de la ciudad, se ofrecen a la venta recuerdos: remeras de Schoenstatt, pañuelos, medallas, rosarios, cuadros de la MTA, cruces de la unidad; hay una diversidad enorme de material informativo en varios idiomas, grandes pantallas que proyectan la imagen de la MTA y del Padre... y unos frailes hacen su oración a los pies de la MTA. Llega un grupo de scouts con banderas que se encamina directo hacia el Santuario, mientras otros van en busca y encuentran a alguien para una entrevista en Radio María, hay un amplio intercambio de información, y en medio de esto, el constante fluir de jóvenes schoenstattianos de Alemania, Argentina, Chile, Puerto Rico, Estados Unidos, Brasil...

Descansan, cantan, cuentan... como en casa, ya que ésta es su casa.

"¿Dónde está el Santuario?", una y otra vez preguntan los jóvenes en la estación de ómnibus - ubicada entre "Trinitatis" y el Santuario, en la zona peatonal - a todo aquel que de alguna manera identifican como schoenstattiano. "¿Cómo se llega al Santuario?", es la frase que lidera ampliamente todas las encuestas estos últimos días en Colonia!

El 18 por la noche, después del arribo del Santo Padre, los jóvenes tienen previsto formar una cadena humana desde el Santuario hasta la catedral, para celebrar así el día de Alianza. ¡Están todos invitados a unirse a esta cadena de vida y de ardor apostólico por Schoenstatt!

Desde el Santuario de Colonia, en Alianza con Dios Padre, la proclama de nuestro Padre se hace vida en los corazones de millares de jóvenes: "¡Vayan e incendien el mundo!". Alemania, Italia, Polonia, Francia, España, Portugal, Gran Bretaña, Croacia, Suiza, Austria, Rumania, República Checa, Hungría, Rusia, Sudáfrica, Burundi, Nigeria, la India, Australia, Filipinas, Estados Unidos, Méjico, Puerto Rico, Republica Dominicana, Panamá, Venezuela, Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Brasil, Argentina... ¡y mucho más allá! Que en cada rincón donde haya un schoenstattiano flamee victoriosa la bandera de la MTA.

Para enviar un artículo o contribución escrita al blog de Schoenstatt: Escribir un mail a: poschoenstatt.1810@blogger.com

Y para enviar un mensaje hablado, (audio) Llamar al telf 1-415-856-0205 Se le pedirá un número de cuenta que es: 713-599-1283 y un pin que es: 1818

Auf dem Treppe zur Domplatte gibt es schon frühmorgens Werbung für die Oase

Oración en el Santuario

Prayer in the Shrine

Gebet im Heiligtum

Foto: POS Brehm © 2005

 


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Last Update: 18.08.2005 Mail: Editor /Webmaster
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