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José Luis, de Paraguay: celebrar y vivir el 31 de Mayo José Luis from José Luis aus Paraguay: den 31. Mai heute feiern und leben |
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Los dos Nicolás de Chile The two Nicolás from Chile Die beiden Nicolás aus Chile |
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Nicolás en Schoenstatt, en la procesión (o mejor, en la fuente...) Nicolás in Schoenstatt, at the procession (or better, at the well) Nicolas in Schönstatt bei der Fronleichnamsprozession (oder besser, auf dem Brunnen) |
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Christel (izq.) en el Rosario Iluminado en el Santuario de Colonia Christel (left) at the Illuminated Rosary in the Shrine in Cologne Christel (links) beim Lichter-Rosenkranz im Heiligtum in Köln Fotos. POS Fischer © 2005 |
INTERNACIONAL, mca. En Colonia, Alemania, los cinco voluntarios latinoamericanos de la Jornada Mundial de la Juventud se están preparando "con todo" - como cuentan ellos - para el 31 de mayo, conscientes de ser ellos el 31 de mayo hecho realidad, la corriente de amor que viene de América Latina e infunde fuerza al viejo continente. A raíz de ello, organizaron una pequeña reunión para festejar el 31 de mayo, en que por otro lado se cumplen además tres meses de la llegada de algunos de ellos a Colonia, mitad del camino recorrido para la mayoría.
"Con todo esto queremos festejar el ser schoenstattianos, y traer vida al Santuario de Colonia, que necesita de fuerza joven", transmite José Luis, de Paraguay, "les pedimos que se unan en oración a nosotros, que recen por esta cruzada que estamos emprendiendo, a fin de que el espíritu schoenstattiano llegue a la oficina de la Weltjugendtag (Jornada Mundial de la Juventud) a través nuestro".
Dificultades son tareas
Estos jóvenes han tenido que confrontarse con algunas dificultades, como la frialdad por parte de ciertas personas – siempre en comparación con el temperamento latino - el ambiente contrario en sus respectivos lugares de alojamiento dado que allí no están de acuerdo con la JMJ, y por tanto no se sienten bienvenidos... o simplemente el idioma o tener que usar programas de computadora como Corel, Autocad y Word en alemán!!!! Al principio les resultó muy dura esta realidad, pero poco a poco, con ayuda de la Mater, han ido recuperando su fuerza habitual al tomar conciencia de la gran misión que tienen. "Es increíble cómo el buscar el accionar de Dios en las cosas, las personas, los momentos, hizo que viera todo lo bueno que me está pasando y que reconozca la misión que Dios me ha entregado. El camino es y sigue siendo difícil, pero una vez me dijeron que Dios nos pone dificultades en el camino para que llevemos adelante la misión, y estas dificultades son de acuerdo a nuestras fuerzas, para que podamos pasarlas...".
Forjando una corriente de amor
La misión del 31 de mayo es llevar esta fuerza, este amor desde América Latina a Europa, es formar una corriente de amor que supere el pensamiento
mecanicista, al hombre masa, que no es capaz de pensar por sí mismo, y eso
es lo que intenta hacer José Luis allí, junto con los otros cinco voluntarios latinoamericanos. "Muchas veces nos hemos sentido superados, pero también hemos visto cómo vamos ganando espacios, cómo logramos que la gente se sienta atraída hacia nosotros. Creo firmemente que estoy haciendo mi 31 de mayo, que estoy dando mi aporte insignificante pero grandioso al mismo tiempo".
Hace tiempo que estos cinco jóvenes – José Luis, Manuela, de Argentina, los dos Nicolás, de Chile, y Christel, de Venezuela – visitan de vez en cuando el Santuario de Colonia para cantar allí sus canciones... acompañados actualmente en su misión por tres peregrinas. En silencio, la gran Misionera sigue obrando milagros, también en la JMJ...
"Un saludo a todos, FELICIDADES A TODOS LOS SCHOENSTATIANOS, y a festejar el 31 de mayo, un aniversario mas de Schoenstatt! ˇVIVA SCHOENSTATT Y VIVA LA JM!", se despide José Luis en su e-mail dirigido a familiares, amigos y compañeros.