Corazón de la Iglesia en la parroquiaBendición de las palmas en el Terruño de Ciudad del Este |
PARAGUAY, Javier Cabral. "Es la misión de todo schoenstattiano ser corazón de la Iglesia en la parroquia..." se lee en una de las últimas motivaciones para la bendición del Santuario Matri Ecclesiae. "En estas fiestas parroquiales los integrantes de la Familia de Schoenstatt trabajan como servidores", y que el Santuario sea parte de la vida parroquial, es la aplicación de esa propuesta en Ciudad del Este, Paraguay. Se lo pudo comprobar el Domingo de Ramos. Bernardino, vendedor callejero de unas vistosas palmas con diversos entramados elaborados manualmente por su familia, me explicó que las mismas estaban hechas con hojas de pindó, (una palmera muy fina, abundante en Paraguay), con ellas elaboran figuras. "Además tiene hojas de ca´a (yerba mate), flores de penacho y siempre viva. También hojas de ruda y de laurel. Son adornos para que el ramo sea más vistoso, claro que algunas personas le ponen las hojas de ruda contra la envidia de las vecinas". Luego de las explicaciones sobre los componentes y utilidades de la palma elegida, pagué 3000 guaraníes (0,5 US$) por una con dos tramas primorosamente tejidas. Las hay más grandes, con entramados más elaborados... por supuesto, más caras. La entrada de Jesús montado en un burro... rumbo al SantuarioCon el ramo nos dirigimos al Santuario, donde el Párroco de la Iglesia del Espíritu Santo (a unos 500 metros del Santuario) iniciaría la Sta. Misa con la bendición de las palmas. Luego se realizaría una procesión hasta la parroquia para la Santa Misa. Al llegar frente al portón del Terruño encontramos a otros vendedores callejeros de palmas, quienes competían ofreciendo ramos, uno más trabajado que el otro. A la hora de inicio la multitud era impresionante. Jesús montado en un burro llegó hasta la explanada del Santuario donde estaba colocada la mesa ceremonial, en una escenificación del grupo juvenil de la parroquia. Del Santuario a la Iglesia parroquialLos caminos y los postes del alumbrado estaban adornados con hojas de palmeras. El párroco manifestó su satisfacción por la ambientación y la gran participación de los fieles de la comunidad. En estas fiestas parroquiales los integrantes de la Familia de Schoenstatt trabajan como servidores, colocando la casa de la Mater a disposición de la comunidad. Al iniciarse la bendición, la gente se ubicó al costado de los camineros agitando sus palmas en lo alto. El párroco Bernardo Mereles realizó la aspersión con un ramo de laurel bastante grande, pues la gente quiere ser salpicada. Conocedor de sus feligreses, el Padre pasó varias veces, para satisfacción de los mismos que si no sienten las gotas no quedan muy satisfechos. Al final de la ceremonia de bendición la multitud se dirigió a la parroquia, donde la misa se hizo en la explanada exterior de la misma, pues la cantidad de gente (que se ubicó bajo los árboles, por el calor) era unas cinco veces la de una misa normal. Es que en Paraguay, el domingo de Ramos es la ceremonia litúrgica que más atrae, seguida de miércoles de ceniza.
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Last Update: 06.04.2004
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