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 published: 2003-09-09

Sencillamente enamorados de Schoenstatt

Alianza multicolor: Experiencias y encuentros en torno al Santuario Original, del 30 de agosto al 8 de septiembre

Colores de Alianza de septiembre: Santuario Original

Covenant colors of September: Original Shrine

Bündnisfarben im September: Urheiligtum

 
 

Santuario Original, 8 de septiembre

Original Shrine, September 8

Urheiligtum am 8. September

 
 

Un matrimonio de Vallendar con sus nietos

A couple from Vallendar with their grandchildren

Ein Ehepaar aus Vallendar mit seinen Enkeln

 
 

Schoenstattianos de Liverpool y Birmingham, Inglaterra, con Antonieta Saaverdra, Portugal

Schoenstatt members from Liverpool and Birmingham, England, with Antonieta Saavedra, Portugal

Schönstätter aus Liverpool und Birmingham, England, mit Antonieta Saavedra, Portugal

Fotos: POS Fischer © 2003

 

Encuentro en el Santuario Original: Juventud Masculina del Sur de Alemania, con Rosa Maria Wieland, Federación de Familias

Encounter by the Original Shrine: Boys' Youth from Southern Germany, with Rosa Maria Wieland, Federation of Families

Treffen am Urheiligtum: Jugendliche der Schönstatt mannesjugend aus Süddeutschland und Maria Wieland, Schönstatt Familienbund

 
 

P. Barmettler, hermana de Burundi, Madame Lejeune, Hna Lisette

Fr. Barmettler, sister from Burundi, Madame Lejeune, Sr. Lisette

P. Barmettler, Ordensschwester aus Burundi, Madame Lejeune, Sr. Lisette

 

...junto con Jean Claude, Canadá, y los Wieland

...together with Jean Claude, Canada, and the Wieland family

…zusammen mit Jean Claude, Kanada, und den Wielands

Foto: Wieland © 2003

 
 

Testimonio de Hilda Pagán (izq.), Puerto Rico

Testimony of Hilda Pagán (left), Puerto Rico

Zeugnis von Hilda Pagán (links), Puerto Rico

Foto: Saavedra © 2003

 
 

Hilda Pagán en la Oficina de Prensa, 31 de agosto

Hilda Pagán in the PressOffice, August 31

Hilda Pagán im PressOffice, 31. August

 
 

Casa Sonnenau - lugar de encuentro para el mundo

House Sonnenau - here you meet the world

Haus Sonnenau - hier trifft sich die Welt

Fotos: POS Fischer © 2003

 

 

 

SCHOENSTATT, mkf. Más temprano que otros años, la enredadera del Santuario Original, al igual que los árboles y arbustos, están tornándose amarillos, anaranjados y rojizos estos días – fruto del extremo calor que hizo en los meses de julio y agosto. Mientras Schoenstatt se prepara a celebrar el 35ş aniversario de la muerte del Padre Kentenich el próximo lunes, los peregrinos continúan llegando en grupos o en forma individual, por primera vez o, como Pat y Bill McEvoy, de Liverpool, una vez más nuevamente. żPor qué? "Sencillamente enamorados de Schoenstatt".

El 8 de septiembre, cumpleaños de María, Tras intensas lluvias por la mañana, un sol radiante ilumina Schoenstatt. Es uno de esos días típicamente especiales de septiembre, despejado, con viento fresco, un cielo de intenso color azul, y un sol que invita a salir, más allá del trabajo que tenga uno por delante. Un matrimonio de Vallendar se sienta en un banco cerca del arroyito que está entre la Casa Sonnenau y la Casa del Peregrino. Sus nietos, de Ubar, de cinco y casi tres años de edad, disfrutan sus helados y del sol, prontos a subirse de nuevo a su bicicleta y autito a pedal... "Nos encanta venir aquí", dice el abuelo. "Es un lugar tranquilo, a los chicos les fascina jugar aquí, y es un lugar especial, desde luego!".

Esa misma tarde llegó a Schoenstatt una peregrinación de los Estados Unidos, acompañada por la Hermana Marie y el Padre Jonathan Niehaus. Uno de los atractivos de su peregrinación es la visita a Husten, cuna de nacimiento de la Hermana Emilie Engel. Más temprano por la mañana, llegó un grupo de Polonia; entre la Misa de la Federación de Familias a las 9 hs. y la Misa de 10 de la mañana, encontraron un huequito para saludar a la Mater en el Santuario Original.

Encuentro burundí-chileno-suizo-canadiense-francés-alemán en el Santuario Original

Santuario Original, 30 de agosto, después del rosario: la Hermana Lisette, de Burundi, y una Hermana burundí que actualmente está estudiando en Roma, saludan al Padre Joseph Barmettler, de Suiza, "cónsul honorario de Burundi" en Schoenstatt. Esta Hermana – de una de las tantas congregaciones que colaboran activamente con la obra de Schoenstatt – ha formado grupos donde sea que le ha tocado trabajar. "Grupos de Schoenstatt que siguieron adelante cuando ella se fue", agrega la Hna. Lisette. Mientras conversan, Rosa María y Josef Wieland, un matrimonio de la Federación de Familias, apresurándose por entrar al Santuario Original antes de la hora de cierre, las ven y las saludan. Con ellos, la famosa hermana de un famoso autor – Madame Lejeune es la hermana de René Lejeune que escribió la primera biografía del Padre Kentenich y de Karl Leisner en francés. Comienza un vivaz intercambio en francés… Oyendo hablar en francés, Jean-Claude, un canadiense que vive en Bélgica, pregunta en francés, también, si el Santuario está abierto todavía (no lo está), sumándose a la reunión por un momento, y sumando así dos países más al "pequeño Pentecostés" en la Alianza… coronado por un grupo de cuatro jóvenes de Swabia de los cuales tres hablan alemán (o algo así), y el cuarto, más aún, saluda a Rosa María Wieland (chilena) en perfecto español – habiendo vivido un año en Chile. Con las verdadero sello internacional.

Siempre de nuevo

"Es simplemente una historia de amor", dice Pat McEvoy. Junto con su marido, Bill, y dos amigos de la generación fundadora de Schoenstatt en Inglaterra, vino a Schoenstatt por unos días – como casi todos los años desde que se enamoró por primera vez de la Mater en el Santuario. "Uno tan sólo quiere estar aquí", comentó. Levinia Peinar, de Ciudad del Cabo, Sudáfrica, comprende lo que dice Pat. Esta mujer policía, miembro de la Liga de Mujeres Profesionales, estuvo unos pocos días en Schoenstatt en agosto de 1998. Cinco años más tarde, casi el mismo día exactamente, llegó – por un año entero! Junto con otras mujeres jóvenes, tiene oportunidad de quedarse más tiempo, estudiar alemán, y "sumergirse profundamente en Schoenstatt".

Simplemente un Padre

Durante su retiro del 2 al 5 de septiembre, en la Casa Marienland, las Madres de Friburgo tuvieron una experiencia muy especial sobre el Padre Kentenich en Milwaukee, gracias a testimonios de gran valor. El miércoles 3 de septiembre, por la noche, Hannelore Spannagel compartió sus experiencias durante la peregrinación de matrimonios a Milwaukee, de donde había regresado un par de días atrás. Esto preparó la atmósfera para el testimonio de Hilda Pagán, al día siguiente por la tarde. Desde las 15 hasta las 17.30 hs., Hilda Pagán compartió con las Madres sus encuentros personales con el Padre Kentenich durante los cuatro años en que, junto con su marido y sus hijos, vivió cerca suyo en Milwaukee. "Como pareja recién casada, de 22 años de edad", repitió una y otra vez; como matrimonio puertorriqueño que conoció Schoenstatt en Nueva York, su admiración por el Fundador de Schoenstatt encendida a través del libro "La santidad de la vida diaria". Habló sobre la primera impresión que le causó el Padre Kentenich, sobre su comunicación en inglés – "la persona del Padre Kentenich, sus gestos, sus ojos hablaban" -, sobre su conducción personal y la educación que les brindó como pareja, sobre el primer Santuario Hogar... Las Madres tuvieron tiempo de hacerle preguntas: si el Padre Kentenich habló sobre la diferencia entre el hombre y la mujer ("Le dijo a mi marido que debía verme como una reina, y a mí que me comportase de modo tal que mi marido pudiese ver la corona sobre mi cabeza"), sobre la vida matrimonial, la crianza de los hijos, la pérdida y el duelo... y cómo se mantiene en contacto con el Padre Kentenich después de su muerte ("Trato de hacer ahora lo que él me dijo en aquel entonces, leer todo lo que pueda encontrar, "llamarlo" a través del teléfono del Padre, mantener el Santuario Hogar tal como lo vio él por primera vez, aún cuando nos mudamos a Puerto Rico, leer el "libro" de recuerdos, recordar los encuentros que tuvimos – y sé que él está ahí".

"Me hubiese quedando escuchando horas y horas", comentó una madre joven después. "El Padre Kentenich estaba tan vivo a lo largo de esas horas… tan cercano... simplemente un Padre".



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Last Update: 09.09.2003 Mail: Editor /Webmaster
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